JUEVES Ť 18 Ť OCTUBRE Ť 2001

RUTA SONORA

Patricia Peñaloza

Warpig, Tricky y los Fancy Free

Y A PROPOSITO de guerras, hay individuos que no comprenden que la convivencia pacífica entre los seres humanos procede de la semilla que implica el respeto a quienes más cerca tenemos. De esta manera, y aunque yo ya había dado por terminado el conflicto, me veo imposibilitada a quedarme callada ante la nueva ofensa pública que llevó a cabo contra mi persona Roberto Muñoz, alias el Warpig, productor y locutor del 98.5 FM y baterista de Lost Acapulco. No contento con haber empleado hace dos semanas sin autorización una grabación privada con mi voz para hacer con ella escarnio público de esta servidora, Roberto Muñoz durante la presentación de la magnífica banda Phantom Surfers en el Foro Alicia el sábado pasado, dio rienda suelta a su prepotencia (arma regularmente usada para suplir incapacidades, complejos o impotencias) y vomitó ante cerca de 500 testigos lo siguiente: "Esta canción va dedicada a esas periodistas pendejas que escriben en La Jornada", para al terminar, decir: "es para ti, Pati". No era la primera vez que este sujeto se dirigía a mí de modo procaz. Le pedí que retirara aquella grabación del aire, pero no sólo expresó que no lo haría, sino que lo transmitiría más veces de lo normal pues yo era una tarada que me sentía muy importante. Le advertí entonces que denunciaría el asunto públicamente, lo cual así fue, desde esta columna. Tanto mi trayectoria profesional como personal acreditan que ni este periódico ni yo merezcamos esos insultos. Ni un promo como el que hizo enriquece a la radio ni sus comentarios enriquecen al rocanrol: muy al contrario, promueven el machismo y empobrecen a ambos. Por lo tanto, y bajo instrucciones de nuestro editor, esta sección no volverá a mencionar nada que tenga que con el asunto ni mucho menos con las actividades de Roberto Muñoz.

REGRESANDO A LA música, aunque apareció desde julio los meses han permitido digerir y disfrutar de Blowback, el sexto álbum del inglés enloquecido Tricky, cuyo debut Maxinquaye (1995) cimbró la escena pop/electrónica con su instinto experimental y retorcido; disco que le mereció le tildaran de "creador del trip-hop". Varios discos y etapas mentales han pasado desde que Adrian Thaws (1970), chamaco callejero de Bristol, cuya madre se suicidó cuando él tenía cinco años para luego ser abandonado por su padre, salió a la luz como respetado representante de la claustrofobia y la paranoia sonoras. Sin embargo, en Blowback el ánimo de Tricky dio enorme giro a raíz de su cambio de dieta: el doctor le dijo que sus ataques de paranoia, los cuales le llevaron a casi aventarse por una ventana, cesarían si dejaba de comer azúcar, levadura y comida enlatada. Tricky se siente ahora saludable, positivo, alegre, lo cual se refleja en este disco: "Quizá muchos prefieran mi etapa oscura, y tal vez esto sea lo más comercial que he realizado, pero puedo asegurar que mi música es más honesta que la de muchos". Y sí, sus fascinantes retruécanos musicales se ven domados en este álbum, menos electrónico y más roquer. Entre otros cambios, ya no colabora la peculiar voz de su esposa Martina Topley-Bird (le había acompañado desde el primer disco), sino la de la intérprete de soul Ambersunshower. También se hizo rodear de luminarias como los Red Hot Chilli Peppers, Alanis Morissette, Cindy Lauper y Ed Kowalczyk del grupo Live. Distintiva colaboración es la del cantante reggae-muffin Hawkman, descubierto por Tricky. A pesar de la luminosidad que busca este rapero/cantante/productor (ha trabajado con Björk, PJ Harvey, Damon Albarn de Blur, DJ Muggs de Cypress Hill, entre otros), conserva sus momentos de oscuridad como en la intensa Bury the evidence, Five days, o la versión que hace a Something in the way de Nirvana. Las mejores rolas de ánimo encendido son el sencillo Evolution revolution love y Excess. Your name y A song for Yukiko son las más ricas y suaves. Quizá las menos afortunadas son esas donde intervienen los Red Hot... En general, es un disco brillante, prendido. Aunque a nivel mainstream es un hitazo, esta servidora habría preferido el riesgo y la experimentación que le han caracterizado.

AHORA QUE SI les da mucha weba ver a Eric Clapton el viernes, será opción simpática el reventón que ofrecerán Los Fancy-Free y Los Panterss (con Tito de Molotov). Martin Thulin, el sueco amexicanado detrás de Los Fancy-Free (en realidad es sólo él) anda muy emocionado con material nuevo (suena como electro-pop de inicios de los 80, muy divertido), producido por Paco Huidobro (ex Fobia) y Emilio Acevedo (Titán) en una rola. Asegura que pronto firmará con Universal para distribuirse en México, EU y Centroamérica; el disco también se editará en España en la disquera Inane y en Francia en el sello Tricatel. En verdad ver a Martin (DJ Menonita Rock) es todo un espectáculo. Los Panterss, ya antes reseñados en este espacio, también harán de las suyas con sus ocurrencias electrosónicas, bailables y cotorras. Museo Taurino La Faena (Venustiano Carranza 49, Centro), 21:30 horas, $50. También el viernes, el rave Aceite en el Club Nervios (Av. Central 219, Bosques de Africa, Aragón); 12 horas de música con Giorgio Briseni (Italia), Maurize X, Faktor y 12 más. 20 horas, $50 (mujeres gratis de 20 a 21 horas).

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