MARTES Ť 16 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Ajustará el gobierno local programas no prioritarios, afirma el secretario de Finanzas
Continuará la austeridad en 2002
Ť Será un año difícil en el ámbito económico, pero seguirán los apoyos a programas sociales
Ť A septiembre se ha ejercido 60 por ciento de 70 mil mdp programados, afirma Carlos Urzúa
RICARDO OLAYO GUADARRAMA
El Gobierno del Distrito Federal ajustará programas no prioritarios en el gasto del año próximo, en continuidad con la línea de austeridad que ha operado hasta ahora, pero sin dejar el apoyo a las preparatorias, universidad, vivienda y programas sociales, entre otros, anunció el secretario de Finanzas, Carlos Urzúa.
El 2002 será un año difícil en el ámbito económico que da pie "a seguir apretando" en la reducción de los gastos, explicó el funcionario en entrevista al final de una reunión de gabinete donde se presentaron cifras del presupuesto ejercido hasta septiembre pasado.
De casi 70 mil millones de pesos programados presupuestariamente, las dependencias han utilizado en promedio 60 por ciento, por lo que se espera un incremento en el gasto en el último trimestre a partir, por ejemplo, de la terminación de obras en curso.
Las delegaciones políticas se ubican por debajo de ese promedio, en 55 por ciento, aunque se espera que apliquen los recursos en las adquisiciones programadas y las obra por contrato.
Escenario incierto
El secretario Urzúa dijo que en tanto se prevén ingresos bajos en las finanzas capitalinas y en consecuencia "tenemos que ajustarnos a ello", aunque precisó que falta claridad en los escenarios futuros.
Hasta entonces, los funcionarios del gobierno capitalino trabajarán para hacer un planteamiento de requerimientos en el presupuesto 2002 que se enviará a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, para su aprobación en el pleno de legisladores.
Urzúa comentó que en el caso del Gobierno Federal, se ha propuesto que en la conformación de su presupuesto, soliciten un incremento en proporción al crecimiento del índice inflacionario.
Sin embargo, se deben poner en perspectiva otros factores, por lo que no es posible aseverar que en el Distrito Federal se regirán por el mismo principio de aplicar el incremento inflacionario.
Pero anticipó: lo que si es "inconcebible" es un presupuesto demasiado alto respecto al de este ejercicio, sobre todo por la perspectiva de bajos ingresos.
Del reajuste a programas, el secretario de Finanzas, respondió que hay espacio para reducir gastos. "Creemos que hay programas que no son fundamentales y que pueden revalorarse", dijo.
No aceptó adelantar cuáles son éstos programas, pero puso énfasis en que el apoyo seguirá "con la línea general" que ha mantenido el gobierno de destinar recursos a los programas sociales, entre otros de adultos mayores, la construcción y equipamiento de las preparatorias y la Universidad, así como la construcción de vivienda.
Al respecto, la Secretaria de Desarrollo Social, Raquel Sosa Elízaga, confirmó que "no habrá programas que se vayan a desaparecer el próximo año" en el área que le toca encabezar.
Al contrario, "estamos creciendo", dijo en función de los programas de educación. Lo que ocurrió el año pasado es que llegaron al gobierno con un presupuesto heredado y ahora se puede hacer una reorientación de lo que se requiere para el 2002.
"Es una actividad absolutamente normal, sin cambios especiales o reducciones", dijo Sosa. El único programa que requiere incremento es el de las prepas y la Universidad, por ejemplo para cumplir con la planta docente, la ampliación de matrícula, equipamiento, entre otros.
Sosa comentó que este año recibieron un poco más de 2 mil millones de pesos y que se han ejercido hasta ahora en un porcentaje de 75 a 80 por ciento. En el caso de la Secretaría de Desarrollo Social, subrayó que se ha ejercido el presupuesto sin problema.
El subsecretario de Egresos de la Secretaría de Finanzas, Gustavo Ponce, indicó en tanto que si bien el gasto ejercido hasta ahora es del 60 por ciento en promedio, se prevé que en el último trimestre del año aumente sensiblemente esta cifra.
Es una dinámica normal, pues el tiempo en que se concluye obra, se vencen contratos y entonces corresponde a las dependencias hacer los pagos correspondientes.
Cerrará fuerte el gasto en vivienda y obra del sector central y también de las diversas obras delegacionales, explicó el funcionario en entrevista al final de la sesión de gabinete encabezada por el jefe de gobierno, Andrés Manuel López Obrador.
Explicó que las direcciones que ejercerán gasto en cantidades importantes, están adscritas a la Secretaría de Obras y Servicios, entre otros, la de Construcción y Operación Hidráulica; la de Obra Pública; la de Construcción del Sistema de Transporte Colectivo.
Luego las delegaciones, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, por la construcción, entre otras.
Hasta septiembre pasado, las delegaciones habían ejercido 55 por ciento, lo cual, dijo Ponce, es natural pues el primer semestre sirvió para definir programas y ahora es momento de aplicarlos.