Ť El otro jugador. La Caravana de la Dignidad Indígena, libro de Ediciones La Jornada
Rebeldes mayas mostraron la vieja costumbre de aguardar sin doblarse
Ť Recoge textos de reporteros, enviados, corresponsales, articulistas, escritores
Ť Esta novedad bibliográfica será presentada mañana viernes en Casa Lamm
PABLO ESPINOSA
La gente salía a las calles o se plantaba en las curvas del camino, llenaba las plazas con mantas y pancartas de adhesión y demandas concretas y abstractas. En el camino y en sentido inverso de la ruta de Puebla a Panamá, los caminos de herradura, los fogones de leña, el agua envenenada, los niños con sarna, la diarrea, la gastritis, las lombrices, la tos, el silencio, la esperanza, la vieja costumbre de aguardar sin doblarse.
Del 22 de febrero al 28 de marzo, 23 dirigentes rebeldes mayas recorrieron 3 mil kilómetros en medio de incontables muestras de apoyo popular en carreteras, ciudades, aldeas y pueblos.
En las pequeñas y aparentemente débiles figuras de los 23 indígenas caminantes se concentró el sacudimiento planetario, la atención del mundo y la profusión de palabras y de imágenes.
El episodio culminante: la comandanta Esther ante el Congreso de la Unión en su histórico discurso del 28 de marzo de 2001.
Paso a paso, una gesta
La Jornada documentó paso a paso aquella gesta. A partir de esos materiales nació El otro jugador. La Caravana de la Dignidad Indígena, libro de Ediciones La Jornada que será presentado este viernes 12 a las 17 horas en Casa Lamm (Alvaro Obregón 99, colonia Roma).
La presentación estará a cargo de Carlos Montemayor, Adolfo Gilly, Juan Bañuelos, Magdalena Gómez; Carmen Lira, directora general de La Jornada; Luis Hernández Navarro y Ramón Vera, a cuyo cargo estuvo la edición del libro.
En 381 páginas de gran formato, El otro jugador... recoge textos de más de una treintena de reporteros, enviados especiales, corresponsales, colaboradores, escritores, filósofos.
La profusión también se escancia en esas páginas con las fotografías y los cartones publicados en La Jornada en aquellas fechas y un epígrafe de Jorge Luis Borges que da pie al cuento que insertó el subcomandante Marcos en su discurso pronunciado el 12 de marzo en la Villa Olímpica:
''Un grupo de jugadores se encuentra enfrascado en un importante juego de ajedrez de alta escuela. Un indígena se acerca, observa y pregunta que qué es lo que están jugando. Nadie le responde. El indígena se acerca al tablero y contempla la posición de las piezas, el rostro serio y ceñudo de los jugadores, la actitud expectante de quienes los rodean. Repite su pregunta. Alguno de los jugadores se toma la molestia de responder: 'Es algo que no podrás entender, es un juego para gente importante y sabia'. El indígena guarda silencio y continúa observando el tablero y los movimientos de los contrincantes. Después de un tiempo, aventura otra pregunta: 'Y para qué juegan si ya saben quién va a ganar'. El mismo jugador que le respondió antes le dice: 'Nunca entenderás, esto es para especialistas, está fuera de tu alcance intelectual'. El indígena no dice nada. Sigue mirando y se va. Al poco tiempo regresa trayendo algo consigo. Sin decir más se acerca a la mesa de juego y pone en medio del tablero una bota vieja y llena de lodo. Los jugadores se desconciertan y lo miran con enojo. El indígena sonríe maliciosamente mientras pregunta: '¿Jaque?'"
El libro El otro jugador. La Caravana de la Dignidad Indígena, de Ediciones La Jornada, empezará a circular en breve. No contiene epílogo.