JUEVES Ť 11 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť El entonces presidente Castello Branco conocía esa actividad, declara

La CIA colaboró en la represión política en Brasil, tras el golpe de 64, revela ex agente

Ť La tarea de la compañía era estimular a los responsables de asesinatos y torturas

AFP

Río de Janeiro, 10 de octubre. La Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos colaboró con la represión política en Brasil después del golpe militar de 1964, y el entonces presidente Humberto Castello Branco sabía de esas actividades, afirmó el ex agente Phillip Agee, en entrevista publicada este miércoles.

Según afirmó Agee -quien en 1968 abandonó la CIA y se dedicó a denunciar los atropellos cometidos por esa agencia- al diario Jornal do Brasil los agentes, todos brasileños, actuaban estrechamente ligados a los órganos locales de represión política, responsables por asesinatos y torturas.

''La CIA tenía relación de trabajo muy próxima con los servicios brasileños de seguridad, tanto civiles como militares. Había actividades intensas con militares, especialmente el general Castello Branco. Era normal para la compañía (la CIA) tener ese tipo de relación con esos servicios y darles informaciones'', declaró.

Después del golpe militar de 1964, el general Castello Branco fue nombrado presidente de Brasil, cargo que ocupó hasta 1967.

La tarea de los hombres de la CIA era estimular a los órganos locales de represión, abasteciéndolos de dinero, informaciones y equipos.

''La CIA no se ensuciaba las manos, pero estaba detrás. En otras palabras: personas como yo incentivaban a esos represores dándoles dinero y equipos, y ellos hacían el resto'', agregó Agee, quien reside en La Habana.

Los consulados de Estados Unidos en varias ciudades brasileñas servían como base de apoyo a esos agentes. ''Los consulados estaban allí para ofrecer protección a los agentes de la CIA y adquirir informaciones sobre quienes apoyaban al gobierno del presidente Joao Goulart'', afirmó Agee.

Las actividades de la CIA se fortalecieron en Brasil en 1961, contó Agee, cuando el entonces presidente Janio Quadros renunció al cargo. Los militares se movilizaron para impedir la toma de posesión del vicepresidente Goulart, a quien veían como un político próximo al Partido Comunista.

Goulart asumió la presidencia, pero según Agee la CIA comenzó inmediatamente a actuar para desestabilizar su gestión. En 1964, el presidente fue derrocado por un golpe militar.

El pasado domingo, el Jornal do Brasil localizó al agente de la CIA Robert Hayes, quien en 1987 admitió ante una comisión del Congreso de Estados Unidos haber participado de la organización de secuestros y de asesinatos de militantes cubanos en Brasil en la década de 1970.

Según el diario, Hayes actuaba en Brasil bajo la supervisión del agente John Hull, a quien el Congreso de Estados Unidos acusó años atrás de contrabandear armas para los contras, fuerza armada que enfrentaba al gobierno sandinista de Nicaragua, en la década de 1980.