JUEVES Ť 11 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Washington comenzó a utilizar bombas de racimo y de dispersión antipersonal

Se intensifican los ataques estadunidenses contra las guarniciones del régimen talibán

Ť Se contemplan ataques sorpresivos con helicópteros, preludio de operaciones en tierra

AFP, REUTERS, AP Y DPA

Washington, 10 de octubre. Después de asegurar el control del espacio aéreo de Afganistán, las fuerzas estadunidenses continuaron atacando hoy guarniciones de los talibán, mientras buscan "blancos emergentes" y contemplan ataques "sorpresivos" con helicópteros, preludio de operaciones co-mando en tierra.

Los ataques diurnos de este miércoles se concentraron en objetivos cercanos a Kandahar, bastión del jefe supremo talibán, el mullah Mohammad Omar, que escapó a los bombardeos de su residencia en la víspera, según el Departamento de Defensa.

Pero fuentes de esa misma secretaría de Estado, que se mantuvieron en el anonimato, precisaron además que hoy se lanzaron bombas de racimo, de dispersión antipersonal, tanto para objetivos fijos -guarniciones cerca de Kabul- como móviles (vehículos blindados y convoyes).

Señalaron también que se utilizaron bombas de 5 mil libras antibunker o GBU-28, para alcanzar objetivos subterráneos o puestos de comando fuertemente defendidos.

El martes, el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Richard Myers, afirmó que Estados Unidos había logrado "la supremacía aérea" y dañado 85 por ciento de los objetivos buscados (aeropuertos, baterías de defensa, campos de entrenamiento de Al Qaeda, centros de comunicación y comando, cuarteles y tropas talibán).

El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, señaló a su vez que los blancos co-menzaban a escasear, por lo que los próximos ataques se realizarían en función de los objetivos que se presenten a partir de información recogida en el terreno.

Mientras tanto, la utilización de helicópteros no fue resuelta todavía y no se tratará de operaciones generalizadas, indicó otro alto responsable del Pentágono, cuyo nombre no fue citado.

Según el periódico The New York Times, el Pentágono se prepara para utilizar helicópteros de combate para descubrir y abatir a las fuerzas de Osama Bin Laden, acusado de dirigir los ataques del 11 de septiembre, y del régimen talibán.

Las misiones realizadas a partir de bases cercanas a Afganistán son arriesgadas, porque los helicópteros vuelan más bajo que los bombarderos y cazas que atacan desde el domingo, destacó el diario.

Comandos, la próxima etapa

Por lo pronto, el portaviones Kitty Hawk se dirigía al océano Indico sin su escuadrón aéreo, al parecer para que su cubierta pueda ser utilizada como base para los helicópteros Black Hawk, que pueden llevar hasta 14 comandos y su equipo, y volar a baja altura y a elevada velocidad aun de noche y bajo clima adverso.

Los comandos especiales "tendrán un pa-pel significativo en todas las áreas en las que han sido entrenadas", dijo el coronel Bill Darley, vocero del Comando de Operaciones Especiales. Eso significa que grupos reducidos de soldados podrían ser despachados a misiones que incluyen entrenar a fuerzas opuestas a los talibán.

Pero las fuentes del Pentágono buscaron desmentir "la impresión de que tendremos helicópteros recorriendo Afganistán; lo po-dríamos hacer en forma selectiva, pero no de manera amplia, en patrullas".

En tanto, satélites, aviones espías y fuerzas especiales se han desplegado en la re-gión para observar los movimientos en tierra, dijo otro funcionario de Defensa.

"ƑSe ven convoyes sobre las rutas? ƑSe ven campos que hace un mes estaban va-cíos y ahora están muy animados? Entonces se envía un Predator para tratar de determinar si se trata de comandos militares o refugiados", explicó.

Igualmente, las comunicaciones por radio o teléfono celular pueden ser interceptadas por los satélites, los U2 o los aviones RC-1235, que pueden identificar el origen de la señal y desatar un ataque aéreo.

"La estrategia consiste fundamentalmente en crearle dilemas al adversario", señala el experto John Pike. "El dilema es elegir comunicarse por radio y morir, o bien no hablar por radio y mantenerse descoordinado y desorganizado".

Gran Bretaña no participó en los últimos ataques contra Afganistán, aunque sigue "completamente preparada", dijeron hoy fuentes del Ministerio de Defensa británico, y agregaron que hay señales de que el talibán podría colapsar antes de que se haga necesario enviar tropas terrestres.

Estados Unidos dijo la semana pasada que Australia, Canadá, Francia y Alemania ofrecieron colaborar militarmente, mientras el Parlamento turco aprobó este miércoles el despliegue de soldados en la lucha antiterrorista, así como albergar tropas de otros países en territorio nacional.