Ť Arguyen que el contrato resulta muy oneroso dada la desaceleración económica

Se retractan industriales del convenio sobre gas natural

Ť Exige la Concamin que Pemex revise tarifas; rechazan precio de referencia de Texas

Ť Si no se cambia el acuerdo ni se acelera la reforma energética se repetirá shock de 2000: Caintra

DAVID ZUÑIGA ENVIADO

Monterrey, NL, 6 de octubre. Dirigentes del sector industrial demandaron al gobierno dar por terminado el acuerdo por medio del cual se les redujo el precio del gas natural de 9 a 4 dólares por millón de BTU por un plazo de tres años. Los empresarios argumentan que la prolongada desaceleración de la economía está haciendo este contrato demasiado oneroso, lo que pone en riesgo a numerosos negocios.

El presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Javier Prieto de la Fuente, señaló que el convenio ya cumplió su cometido, que era proteger a las empresas de las alzas de más de 200 por ciento al precio del gas natural, ocasionadas por la especulación a finales del año pasado.

Entregan propuesta

Según Prieto, el acuerdo podría darse por terminado este año porque el gobierno ya recuperó el dinero que destinó al apoyo de las industrias. La Concamin ya entregó una propuesta sobre este asunto al secretario de Energía, Ernesto Martens Rebolledo.

Más que un nuevo acuerdo, precisó Prieto, los industriales desean que se revise la fórmula con la cual Petróleos Mexicanos calcula el precio en que vende el combustible a las empresas, pues no están de acuerdo que se tome como referencia el precio de Texas, que no consideran representativo del mercado internacional.

La inconformidad se debe a que el precio internacional ya bajó a cerca de 1.90 dólares por millón de BTU (unidad de generación de calor) y los industriales se comprometieron a pagarlo a 4 dólares por tres años; además, se obliga a las empresas a mantener determinados volúmenes de producción, lo que no pueden cumplir debido a la desaceleración y la caída del consumo. Según Prieto, hay empresas que han declarado en quiebra y aún así tendrán que pagar el gas por el periodo convenido, aunque no lo usen.

El presidente de la Cámara de la Industria de la Transformación de Nuevo León (Caintra), Eduardo Garza Fernández, comentó que el precio del gas natural producido en México podría aumentar entre 40 y 70 centavos, lo que generaría "mayor incertidumbre legal y complejidad administrativa".

Según el empresario, si no se modifica el convenio y no se acelera la reforma del sector energético se repetirá "el shock del invierno de 2000, que destruyó parte de nuestra planta productiva".

Garza Fernández señaló que, a pesar de contar con reservas de gas natural probadas y probables similares a las de Canadá, en México la producción de gas se ha mantenido estancada desde 1982 y el año pasado fue aún más baja, de 3.3 millones de pies cúbicos diarios contra 16 millones en Canadá. Ello se debe en parte a que ese país invierte cerca de 6 mil millones de dólares en el sector, con amplia participación de particulares, mientras que en México la inversión apenas llega a 200 millones, detalló.

Las reservas de Canadá y México son similares, 55.7 billones de pies cúbicos contra 60.7 billones; sin embargo, agregó, hasta el año pasado había 300 pozos en México contra más de 9 mil en Canadá y 15 mil en Estados Unidos. El año pasado las exportaciones de gas de Canadá ascendieron a más de 10 mil millones de dólares, mientras que en México sólo sumaron 35 millones, añadió.

Restructura en electricidad

Alejandro Castañeda Sabido, investigador de El Colegio de México, advirtió que una apertura inadecuada del sector eléctrico puede ser contraproducente si no se aplican antes medidas para restructurar el mercado.

Según el especialista, no basta con permitir la participación de otras empresas, ya que actualmente la Comisión Federal de Electricidad concentra 96 por ciento del mercado. Primero se debe desarticular el monopolio de la CFE haciendo de cada planta una empresa separada, regida por leyes similares a las de las compañías privadas para evitar la "competencia desleal".

Otra propuesta del especialista es que la distribución esté a cargo de un organismo autónomo de CFE y de la Secretaría de Energía.

Por su parte, el presidente de la Caintra propuso eliminar el tope de 20 megavatios para proyectos de cogeneración y autogeneración, definir fórmulas de precios para el pago de excedentes de electricidad, apoyar el desarrollo de proyectos de cogeneración y autogeneración y permitir mayor variedad de tarifas.

Monterrey, NL, 6 de octubre. La postura del gobierno federal ante la recesión ha dividido al sector privado: mientras los industriales le aclararon el presidente Vicente Fox que no piden subsidios ni medidas contracíclicas, sino incentivos y una política integral de fomento, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Claudio X., González, secundó la postura del Ejecutivo federal al señalar que mientras no aumenten los ingresos del gobierno nada puede hacerse, salvo eliminar trámites burocráticos.

En la clausura de la Reunión anual de industriales, el presidente de la Concamin, Javier Prieto, destacó la urgencia de integrar una alianza para el desarrollo industrial, que tomaría forma en un consejo nacional de fomento a la competitividad Industrial, que desarrollaría estrategias para la reconstrucción de cadenas productivas en distintas regiones a fin de hacer frente a los retos que impondrá el ingreso de China a la Organización Mundial de Comercio.

Prieto señaló que el gobierno debe asumir una postura proactiva mediante políticas monetaria, fiscal y de comercio exterior, además de programas de financiamiento, capacitación laboral, creación de infraestructura, "mayor libertad" a la banca de desarrollo, específicamente a Nacional Financiera y apertura del sector energético.

En la breve sesión de preguntas y respuestas que el presidente Vicente Fox ofreció a los industriales para escuchar sus puntos de vista, la primera vicepresidenta de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, Yeidckol Polevnsky Gurwitz, le señaló que los industriales están conscientes de que es necesario mantener la disciplina macroeconómica e insistió en que los empresarios no piden subsidios, sino incentivos, como los que aplican los países de la Unión Europea para apoyar a las empresas, sectores y regiones en desventaja.

La respuesta de Fox fue terminante: el fomento, ya sea en forma de subsidio o de incentivo, es un lujo que un país con baja recaudación no puede permitirse. Y remató: "Con las mujeres no se discute ni se argumenta. Vamos a comer". La mayoría de los presentes soltó la carcajada.

No es el primer roce con la Canacintra. En noviembre de 2000, en la convención que organiza esa cámara y que fue el primer acto oficial de Fox con la iniciativa privada, el líder de los industriales de la transformación, Raúl Picard del Prado, cuestionó la iniciativa de reforma fiscal del Ejecutivo por considerar que será lesiva para el mercado interno; a finales de septiembre, en Pachuca, Hidalgo, el dirigente reiteró la necesidad de hacerle ajustes al modelo económico. La respuesta de Fox fue la misma: el modelo seguirá igual.

Por separado, el presidente del CCE, Claudio X. González, señaló que a menos que se apruebe la reforma fiscal, el gobierno no tendrá dinero para incentivos ni para atacar rezagos.

Según González Laporte, el presidente Fox les dijo que se ha logrado un avance de 12 por ciento en la eliminación y simplificación de trámites para la operación de las empresas, "pero eso no nos satisface; tiene que ser mucho más".