sabado Ť 6 Ť octubre Ť 2001

 Miguel Concha

Frente urgente por la paz

Ante el incremento y los avances taimados pero firmes del frente para la guerra, crece también felizmente un frente civil por la paz y el respeto de los derechos humanos. La Jornada informó puntualmente hace dos días que el Congreso de Estados Unidos analiza un proyecto de ley antiterrorista o "Acta Patriótica" que amplía las facultades de los organismos investigadores, limita la privacidad de las comunicaciones, refuerza la seguridad de las fronteras y tipifica nuevos delitos. Pero también el martes informó que los organismos defensores de derechos civiles de ese país habían logrado que se eliminara media docena de provisiones más, que comprometían más gravemente la observancia de derechos humanos fundamentales. Es más, se anuncia que para evitar que las nuevas leyes puedan ser utilizadas para violar las libertades civiles, se crearía para protegerlas el puesto de inspector general en el Departamento de Justicia.

Ciento veintisiete organismos no gubernamentales de derechos humanos y libertades civiles en Estados Unidos, entre los cuales se encuentran la organización Human Rights Watch y la sección estadunidense de Amnistía Internacional, con sede en Washington, así como el Lawyers Committee for Human Rights y la Red Nacional Católica de Cabildeo por la Justicia Social, habían dado a conocer en efecto desde el 21 de septiembre, a través de una Unión Estadunidense por las Libertades Civiles, una declaración de 10 puntos, en los que entre otras cosas establecen con clarividencia lo siguiente: "Necesitamos considerar todas las propuestas (de lucha contra el terrorismo) calmada y deliberadamente, con la necesaria determinación de no socavar las libertades civiles, que son la base de nuestro modo de vida. Necesitamos garantizar que las acciones de nuestro gobierno sean coherentes con los principios de una sociedad democrática, de un gobierno responsable y del derecho internacional, y que todas las decisiones se tomen de conformidad con la Constitución. Debemos aplaudir en los días venideros a aquellos de nuestros dirigentes políticos que tengan el coraje de decir que nuestras libertades no pueden ser limitadas". Con razón el procurador Aschcroft dijo días después que consideraba muy lentas las medidas legislativas del Congreso.

No faltan tampoco las gentes decentes en la Unión Europea, pues ese mismo día seis organizaciones no gubernamentales defensoras de la privacidad y las libertades civiles en el llamado viejo continente, entre las cuales se encuentran dos alemanas, una holandesa, una austriaca, una danesa y una holandesa, dirigieron una carta abierta al Consejo de Europa, en la que cuestionan con sabiduría el contenido y los alcances de las medidas legislativas propuestas por los ministros de justicia y del interior de sus gobiernos para combatir el terrorismo.

Con el propósito enunciado de combatir este mal -denuncian las organizaciones civiles-, los gobiernos de la Unión Europea pretenden la retención de todos los datos transmitidos por redes de comunicaciones de uso general, por parte de los órganos encargados de hacer cumplir la ley; y dada la confusión y la vaguedad de la tipificación de ese delito, en ella pueden incluirse como actos de terrorismo las mismas protestas y manifestaciones de los ciudadanos. "La propuesta para combatir el terrorismo de la Unión Europea -analizan las organizaciones de derechos humanos-, o bien está muy mal redactada, o bien muestra un intento deliberado de ampliar el concepto de terrorismo para cubrir protestas (tales como las de Gotenburgo y Génova) y lo que denomina 'violencia urbana' (a menudo vista por las comunidades locales como defensa propia). Si lo que pretende es introducir cautelosamente medidas draconianas para controlar la disidencia política, sólo servirá para socavar las mismas libertades y democracias que los legisladores dicen proteger".

Por otro lado la premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú Tum anunció también el martes pasado en la Universidad Iberoamericana, durante un seminario sobre justicia universal, una acción internacional próxima, junto con otros muchos premios Nobel, que lleva como consigna la de "Un voto por la cordura. Un voto por la paz", que esperamos comentar en nuestro próximo artículo. Ť