MARTES Ť 2 ŤOCTUBRE Ť 2001

Vicisitudes de 17 telones

El 9 de marzo de 1999 especialistas del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (CNCRPAM), del Instituto Nacional de Bellas Artes, acudieron a inspeccionar un lote consistente en 17 telones localizado por personal de la Procuraduría General de la República (PGR), en la casa de la escritora y bailarina Nellie Campobello, ubicada en la calle de Ezequiel Montes, colonia Tabacalera.

Los telones fueron desplegados en el Monumento a la Revolución. De grandes formatos y formas irregulares, elaborados al gouache, algunos detalles pintados con anilinas sobre un soporte de papel kraft reforzado con telas y doblados -así eran guardados en el Ballet de la Ciudad de México, compañía fundada por las hermanas Nellie y Gloria Campobello-, estos cartones estaban en pésimas condiciones porque, incluso, permanecían ''semienterrados". Estaban arrugados y presentaban humedad, tierra, polvo, manchas y coloraciones causadas por el ataque de hongos y roedores; la proliferación de esporas y orines, entre otros factores adversos.

Al día siguiente los especialistas de ese centro del INBA se trasladaron a la PGR para revisar el material y apoyar al personal en el registro y observar las condiciones de conservación, tratando de identificar alguna firma, ya que algunos de los telones se atribuían a José Clemente Orozco, Carlos Mérida, Roberto Montenegro y Antonio Ruiz El Corsito. Sin embargo, hasta el momento no se ha encontrado ninguna firma. En caso de hallar, por ejemplo, la de Orozco como su obra está protegida por una declaratoria de patrimonio nacional, sería competencia del INBA su salvaguarda, conservación y probablemente la custodia. Al respecto habría que establecer los términos legales adecuados.

El 16 de marzo los telones fueron llevados al CNCRPAM a fin de dictaminar acerca de las condiciones en que se encontraban y así estimar el daño y presentar una propuesta en cuanto a su tratamiento en tiempo y costo para su mantenimiento.

Hasta el momento el dictamen revela que el telón más completo es el segundo rompimiento del ballet Alameda, que muestra un árbol de aquel bosque en tonos grises. Pero, por ejemplo, la pierna derecha, tercer término, del ballet Feria, es una obra ''totalmente fragmentada y perdida en 60 por ciento". Cabe mencionar que cada escenografía consistía de tres planos, es decir, igual número de rompimientos, pierna derecha y pierna izquierda y luego el telón de fondo.

En torno de estos lienzos surgen muchas preguntas. De entrada habría que conservarlos, ya que se trata de un patrimonio artístico. Sin embargo, ante una puesta en valor del material hay que indagar sobre su destino. ƑSerán reutilizados o sólo mantendrán una cualidad documental? Además, se trata de escenografías intervenidas, es decir, a través de los años habían sido parchadas, pegadas y repintadas. Es un material que al manipularlo es susceptible de sufrir rasgaduras y nuevos deterioros.

Respecto de su valor documental, estos telones sin duda forman parte de la historia de la escenografía en México en lo que se refiere al ballet. Como material ''de época" encierran información para todos los que trabajan en el teatro y en la danza. Por el tamaño de los telones -el segundo rompimiento del ballet Alameda mide 8.23 por 3.05 metros- sería necesario crear un espacio adecuado para garantizar su conservación.

El centro del INBA trabaja en el dictamen de estos lienzos. A la mayoría se les ha ''fumigado" con formol y encapsulado en bolsas de plástico para neutralizar la actividad de las esporas. Lo ''ideal" sería ventilarlos, pero esto no ha sido posible dadas sus dimensiones y debido a la época de lluvias. El centro tiene el propósito de ''procesar" los telones, primero por medio de su estabilización al eliminar el ataque de hongos, porque esto refuerza el papel. También habría que crear un equipo ex profeso, pues para mover cada telón se necesitan por lo menos seis personas.

Dicho dictamen técnico, aparte de estimar los daños de los lienzos tendrá que proponer el tiempo necesario para su reparación. Sin embargo, para este proceso también hace falta asignar un presupuesto.

MERRY MAC MASTERS