MARTES Ť 2 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Bush no planea una acción militar con la alianza

La OTAN, "en modalidad de espera" para un llamado de Estados Unidos

REUTERS

Bruselas, 1o. de octubre. Un silencio fantasmal se instaló en la sede de la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN), en momentos en que Estados Unidos elabora su respuesta por los atentados del mes pasado en Nueva York y Washington.

"La alianza militar más exitosa de la historia", como les gusta a los líderes estadunidenses llamar a la OTAN, se mantiene al margen, a la espera de un llamado de Washington que posiblemente nunca llegue.

Un día después de los atentados del 11 de septiembre, los aliados se apresuraron, por primera vez en los 52 años de historia de la OTAN, a invocar su cláusula de defensa mutua de la era de la guerra fría, declarando que si los atentados provinieron del exterior, serían considerados un ataque contra todos.

Ese firme gesto de solidaridad abrió paso, al menos en teoría, a una posible respuesta militar conjunta.

Sin embargo, por el momento el presidente George W. Bush ha decidido utilizar la alianza de 19 naciones como un elemento alentador y no como una fuerza militar en su coalición internacional para combatir el terrorismo.

"Aún estamos en modalidad de espera, misma que puede ser indefinida", dijo un diplomático europeo después que el subsecretario estadunidense de Defensa, Paul Wolfowitz, rindió un informe la semana pasada a los ministros de Defensa de la alianza.

Los diplomáticos y los funcionarios de la alianza dicen que existen varios motivos:

-La naturaleza elusiva y remota de los posibles objetivos de cualquier acción militar.

-Pequeños grupos de militantes islámicos en las montañas afganas o células encubiertas en las ciudades occidentales.

-El hecho de que solamente un grupo de aliados de la OTAN cuenta con efectivos especiales de combate o con capacidades especializadas de espionaje.

-El hecho de que la OTAN no tiene analistas o planificadores de defensa encargados de amenazas terroristas, asunto de índole policial en los estados occidentales.

-La clase de coalición amplia que Estados Unidos está tratando de crear, y que incluye a Rusia, diversos estados del Medio Oriente y Pakistán.

-El deseo de Washington de tener libertad política y de no estar atado a una engorrosa toma de decisiones colectiva.

Wolfowitz precisó que el gobierno de George W Bush consideraba la declaración de la OTAN como una base para solicitar ayuda a aliados individuales, citando a Turquía, Gran Bretaña y Francia. Pero dijo que Washington no planea una acción militar conjunta de la OTAN.

Un diplomático europeo dijo que algunos aliados se sintieron aliviados tras conocer esta postura, ya que temían que se les arrastrara a un conflicto lejano y potencialmente costoso.

Ninguno de los aliados manifestó frustración por ser "dejado de lado", aunque algunos reconocieron que esperaban más detalles sobre la investigación estadunidense en torno a los atentados que vinculan a Osama Bin Laden.

Del mismo modo, ningún aliado cuestionó la continua importancia de la OTAN si no se le convoca -o si no está preparada- para hacer frente al primer gran desafío de seguridad del siglo XXI.

Fuentes oficiales de la OTAN dicen que esos cuestionamientos son prematuros y que son los estadunidenses los que deben decidir cómo desean utilizar la oferta de ayuda de los aliados.

"Los estadunidenses tienen el artículo 5o. de la OTAN como una póliza de seguro en caso de que la necesiten en el futuro", dijo un veterano funcionario de la OTAN.

Los funcionarios estadunidenses dicen que la clase de operación aérea requerida para detener a las fuerzas yugoslavas que llevaron a cabo una limpieza técnica en Kosovo en 1999 fue totalmente distinta del desafío militar de desterrar a las elusivas redes guerrilleras que operan en Afganistán. "La OTAN es un instrumento contundente y muy eficaz si uno quiere lanzar una campaña militar en la periferia de Europa, pero esto es algo diferente", dijo un funcionario.

El hecho de que se necesita una coalición diferente para combatir a los militantes islámicos en Asia central no significa que la alianza haya perdido su razón de ser, dijeron otros funcionarios de la OTAN.

Tras el fin de la guerra fría, la OTAN atravesó una etapa de fricción transatlántica antes de encontrar un nuevo rol a mediados de la década de 1990 en la estabilización de los Balcanes, y acordó expandirse hacia el este para incluir a los países ex comunistas de la región central de Europa.

El principio de compartir la carga significa que es probable que los aliados europeos asuman una mayor responsabilidad a fin de dar a las fuerzas estadunidenses más libertad para concretar la guerra de Bush contra el terrorismo.