MARTES Ť 25 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Grano modificado genéticamente fue destinado al consumo humano sin autorización

La contaminación de maíz comenzó en EU desde 98

Ť En México el riesgo es mayor por el cúmulo de variedades, consideran especialistas

ANGELICA ENCISO L.

En Estados Unidos desde 1998 se comenzó a presentar contaminación de maíces convencionales con transgénicos, ya que en muestras recolectadas ese año se encontró que una proteína del gen BT fue a dar a sus campos. Además, el grano modificado genéticamente, denominado Starlink, se destinó para consumo humano sin autorización, y se exportó.

toluca_maiz_34fEl estudio ¿Quién debe pagar los costos del Starlink?, de Kristin Dawkins, del Instituto para la Agricultura de Minneapolis, refiere el caso de la contaminación que se dio por ese grano modificado genéticamente en maíces convencionales de ese país, y los costos que se tendrán que pagar para separar las variedades.

Aunque México no es el primer caso donde se ha presentado la contaminación de maíz con variedades transgénicas, el riesgo es mayor porque la nación es centro de origen de ese cultivo, todavía hay miles de variedades desconocidas, y se puede afectar su existencia, indican especialistas.

En el caso estadunidense, desde 1998 se comenzó a sembrar el transgénico Starlink, el cual contiene la subespecie Bacillus Thuringiensis (BT), que se utiliza para combatir las plagas y que contiene la proteína Cry9C, la cual es estable al calor y resistente a la degradación en los jugos gástricos, lo cual es indicador de alergias.

El texto refiere que el grano, producido por Aventis, fue distribuido en los mercados domésticos de Estados Unidos y exportado, ya que pruebas independientes encontraron que este grano estaba presente en una gran variedad de productos de consumo en esa nación y en Japón.

En ese país los esfuerzos por separar el maíz Starlink del resto representa costos de entre 100 y mil millones de dólares. Las empresas de alimentos Kraft, Safeway y Western Family retiraron del mercado los tacos, porque presumían que las tortillas contenían ese maíz, además de que la Administración de Alimentos y Drogas sacó del mercado 297 productos, lo cual a la comercializadora Archer Daniels le representa pérdidas por 10 mil dólares diarios.

La Agencia de Protección Ambiental estadunidense tenía registrado el Starlink para uso industrial y alimento animal, por lo que después de que se conoció que no estaba autorizado para consumo humano los agricultores reclamaron que no se les avisó.

La contaminación con este transgénico se detectó en cultivos de 1998 y se comenzaron analizar los posteriores. Aventis investiga cómo el gen fue a parar a la variedad 848IIT de la empresa Garst, y su hipótesis principal es que se trata de una "contaminación adventicia por polinización cruzada".