VIERNES Ť 21 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Alteración transgénica en Oaxaca y otros estados

Pide Greenpeace plan de emergencia ante la contaminación del maíz

Ť Recomienda la Cibiogem establecer un sistema de monitoreo

ANGELICA ENCISO L. Y MATILDE PEREZ U.

La organización ecologista Greenpeace exigió establecer un plan de emergencia para proteger los cultivos de maíz en Oaxaca de la contaminación con semillas transgénicas. Por su parte, el Consejo Consultivo de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad y Organismos Genéticamente Modificados (Cibiogem) recomendó establecer un sistema de monitoreo en la región oaxaqueña en donde se detectó el maíz contaminado, y otro para las regiones donde se pudiera sospechar la presencia de organismos genéticamente modificados (OGM).

A petición de la Secretaría de Agricultura -que actualmente tiene la presidencia de la Cibiogem-, el coordinador del consejo consultivo de ese organismo, Ariel Alvarez, dijo que al analizar la presencia de OGM en maíces criollos de Oaxaca, no se consideró que éste pudiera ''tener un impacto negativo sobre la salud de la población que los consuma.''

Agregó que se precisará ''la identidad'' de los OGM involucrados; la intención principal es saber si los hallados en los maíces criollos de Oaxaca están asociados a la variedad starlink y después pedir un pronunciamiento a la Secretaría de Salud.

Alvarez también propuso ''la constitución de un comité ad hoc que coordine las acciones sugeridas, en las que participen Cibiogem, Semarnat, Sagarpa y Ssa.'' Cabe destacar que esas secretarías integran la Cibiogem.

Raúl Benet, director de Greenpeace, insistió en que la alteración de los maíces criollos con OGM es ''una contaminación sin precedente desde que en 1995 se comenzaron a utilizar los transgénicos, por lo que se deben tomar medidas urgentes para evitar que se convierta en un problema fuera de control'', señaló

La asesora científica de la organización, Doreen Stabinsky, indicó que la legislación europea establece que con tan sólo uno por ciento de variedades transgénicas presentes en semillas convencionales existe contaminación. El 10 por ciento que existe en estas variedades de maíz es similar a la infición que registró el grano convencional estadunidense con la variedad transgénica starlink, lo cual ocasionó pérdidas millonarias a agricultores y procesadores de alimentos.

En conferencia de prensa, la organización recordó que la Semarnat reconoció la contaminación con transgénicos derivada de un estudio que hizo en 22 comunidades. El porcentaje de la propagación que reportó la dependencia afectaba entre 3 y 10 por ciento de los cultivos de 13 comunidades, además de un porcentaje mayor no especificado en otras dos.

Al respecto, el especialista Ignacio Chapela, de la Universidad de Berkeley, estimó en un análisis enviado a la organización que aunque ''los genes contaminantes se mantuvieran en frecuencias bajas, como pretende la Semarnat, puede haber importantes impactos en el ambiente que aún no han sido evaluados. La realidad es que 10 por ciento de contaminación es un porcentaje sumamente alto, que de ninguna manera desaparecerá por sí mismo si no se toman medidas de inmediato, comenzando por eliminar la fuente de contaminación.''

El especialista señaló que el caso de Oaxaca es simplemente el que por diversas circunstancias estudió, pero no es necesariamente el único que está contaminado y esto puede haberse extendido a más regiones. La contaminación se dio porque maíces tradicionales de la región recibieron polen de maíz modificado genéticamente que contiene BT, lo cual es una toxina en contra de las plagas, y esto pone en riesgo el centro de origen.

El BT en las variedades criollas producirá toxinas y se afectarán insectos benéficos, algunas de las plagas de maíz se volverán resistentes y su presencia se incrementará en las futuras generaciones.