JUEVES Ť 20 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť "Dios nos protegerá si el mundo intenta incendiar el país", dice Mohammed Omar

Reafirma el líder talibán que Osama Bin Laden no será extraditado de Afganistán sin pruebas

Ť Washington usa al saudiárabe como pretexto para acabar con el Islam, afirma el mullah

AP, AFP, DPA Y REUTERS

Kafghanistan_us_attacks_bftabul, 19 de septiembre. El máximo líder del régimen afgano talibán, mullah Mohammed Omar, reafirmó hoy que Osama Bin Laden no será extraditado sin pruebas sobre su presunta responsabilidad en los atentados del pasado día 11 en Estados Unidos, y aseveró que Dios los protegerá si el mundo intenta "incendiar" Afganistán.

Omar, quien aseveró que "ni Osama ni Afganistán cuentan con los recursos, ni Osama tiene la libertad o los contactos para llevar a cabo tales ataques", pidió a Washington "paciencia" e investigar a fondo el incidente para llegar a descubrir a los verdaderos culpables, e incluso afirmó que su gobierno está en favor de negociar con los estadunidenses.

"Nunca hemos buscado problemas con Estados Unidos, sino que hemos mantenido conversaciones con éste y anteriores go-biernos estadunidenses, e incluso ahora es-tamos dispuestos a negociar", apuntó, y di-jo poder asegurar al mundo que "ni Osama ni nadie más puede usar el territorio de Afganistán contra ninguna persona".

Durante un mensaje dirigido a los más de mil ulemas, teólogos y juristas musulmanes -reunidos en esta capital para decidir la suerte del principal sospechoso de los atentados-, el líder talibán insistió en que Washington sólo está usando el caso Bin Laden como un pretexto y una estratagema para lograr la destrucción del Estado islámico de Afganistán.

Tras señalar que las comunicaciones del "huésped" saudiárabe están cortadas y no puede hablar con persona alguna del exterior, indicó que el problema es que Estados Unidos no los quiere escuchar ya que sólo los amenaza.

Añadió que si hay pruebas en su contra deben ser entregadas a la Suprema Corte afgana, o permitir que los ulemas de los tres países islámicos o de la Organización de la Conferencia Islámica vigilen a Bin Laden, y agregó que Washington ha rechazado estas sugerencias.

El jefe y líder espiritual supremo talibán, que convocó al consejo de los estudiosos, aseveró que "el Islam es un verdadero ca-mino de vida y nuestros enemigos, así como aquellos que están en contra de nuestra religión, creen que somos sus enemigos".

Sin mencionar la jihad (guerra santa), pi-dió a los ulemas que lancen una fatwa (condena a muerte) en el ámbito de la Sharia (ley islámica) "si Estados Unidos sigue usando la fuerza y considera atacar Afganistán, si inflige daños injustificados a este pueblo inocente y pretende destruir el emirato islámico de Afganistán".

Más tarde, los más de mil dignatarios religiosos pospusieron para este jueves, por segundo día consecutivo, su decisión en torno a si entregan a Bin Laden, o si asumen enfrentar las represalias militares de Washington y sus aliados occidentales.

Así, los ulemas, procedentes de diferentes regiones del país, se dividieron en varios comités de discusión para analizar "todos los aspectos" del problema.

El régimen fundamentalista talibán afirmó que los combatientes islámicos que perdieron la oportunidad de luchar en la guerra de liberación contra la ex Unión Soviética, ahora tendrán la oportunidad de hacerlo con Estados Unidos, según dijo el ministro de Fronteras, Said Jalaludin Haqani.

Por lo tanto, ante esta "excelente oportunidad" llamó a todos los afganos dentro o fuera del país a sumarse a la jihad en caso de darse el ataque estadunidense.

En Moscú, se reportó que Bin Laden continúa en Kandahar, en el sur de Afganistán, el bastión del multimillonario saudiárabe y de las fuerzas armadas del régimen talibán.

Guardias fronterizos rusos dijeron que si Estados Unidos lanza una incursión en esa zona, Bin Laden y sus aliados seguirán ocultos en las provincias sureñas.

En las inmediaciones de los los cuarteles del saudiárabe, en una zona montañosa, el hombre más buscado por Washington po-see una espaciosa casa, cercana a la del lí-der talibán Mohammed Omar. Además, Bin Laden controla muchas otras bases y campos de entrenamiento en regiones afganas como Jalalabad y Mehtarlam.

Mientras continúa el éxodo de miles de personas ante el temor de un ataque estadunidense y unos 5 mil afganos protestaban contra Estados Unidos en la frontera con Pakistán, al menos 5 millones de afganos necesitan con urgencia ayuda alimentaria ya que tras la salida de los apoyos internacionales las reservas de Naciones Unidas sólo durarán dos semanas.

Por último, el régimen talibán expulsó al corresponsal de CNN, informó este miércoles en Washington la televisora. Nic Ro-bertson era el último periodista de la televisión occidental en Afganistán.