MIERCOLES * 19 * SEPTIEMBRE * 2001

 

SIMBOLO FUNDACIONAL
DE LA
CIUDAD DE MEXICO
 
 

En el año de 1325, un grupo de dirigentes acompañados por un sabio llamado Axolohua, se dio a la tarea de buscar el símbolo que había revelado el dios Huitzilopochtli, para que en ese lugar se estableciera la Ciudad de México: eran los mexica.

LA GRAN CAMINATA

Se narra que habrían salido 300 años más tarde que los xochimilcas, chalcas, colhuas, tepanecas, tlahuicas, tlaxcaltecas, de un lugar llamado Chicomóstoc o Aztlán. A veces, durante su recorrido que duró 80 años, según cuenta la crónica, establecieron cultivos y poblaciones en las que permanecían por años, pero sus guías los impulsaban a dejar las comodidades y bienes acumulados, para seguir adelante. Eran un pueblo culto que intercambió conocimientos durante su travesía.Su actividad principal era la agricultura.

EL SITIO FUNDACIONAL

aguilaAl llegar a la cuenca de México primero se asentaron en las orillas del lago para finalmente ubicar el símbolo que señalaba el lugar en el que se fundaría la ciudad capital de este grupo de origen nahua. En el sitio encontraron al águila parada sobre un nopal, que crecía entre piedras, bajo las que manaba agua. Era parte de uno de los dos grandes islotes que emergían sobre las vastas zonas en las que prosperaban tulares y carrizales.
 
 

piedraEn los códices, en la tradición oral y en las narraciones de informantes registradas en las crónicas de la época de contacto, aparecen como constantes el agua, la piedra sobre la que se encontraba el nopal, el nopal mismo y el águila. La representación gráfica de estos elementos es de origen indígena, y su permanencia en los símbolos nacionales ha sido signo de identidad y una forma de reconocer nuestras raíces.

LOS SIMBOLOS ACOMPAÑANTES

nopalEl nopal es una planta de gran importancia para las culturas de las zonas semiáridas. Se reconoce la fortaleza de la planta frente a la sequía. Desde la antigüedad, los habitantes de estas regiones esperaban gustosos el momento de su fructificación para comer con avidez las tunas, alimento grato; también comían sus pencas. No extraña que el nopal haya tenido connotaciones simbólicas.

El agua, como signo de vida y fertilidad, es una constante en las culturas mesoamericanas; encontrarla después del trayecto, muchas veces penoso, que duró decenas de años, era sin duda un signo favorable.
 


Agradeceremos que nos envíen datos acerca de las celebraciones que se realizan en su comunidad, así como descripciones de sus costumbres y tradiciones. También serán bienvenidos sus comentarios y correspondencia a: La Jornada, Francisco Petrarca 118, Col. Chapultepec Morales, Mi-guel Hidalgo, C.P.11570, sección Cultura, página Tradición y Cultura.