MIERCOLES Ť 19 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

EU, EN PIE DE GUUERRA

Ť Sus familiares siguen esperando ayuda del gobierno para indagar su paradero

Aún no se sabe cuántos mexicanos murieron en NY

Ť Según la Organización Tepeyac fallecieron cientos de connacionales en los atentados

Una semana después de los atentados terroristas en Nueva York, las familias de las víctimas mexicanas acaecidas en el ataque a las torres gemelas están sin rumbo y a la espera de auxilio en la indagatoria sobre el destino de las decenas o cientos de connacionales que habrían perecido el martes pasado.

El consulado neoyorquino, otras oficinas gubernamentales y agrupaciones civiles se debaten aún en las contradicciones sobre el número de decesos. En México, los partidos políticos han contribuido más con declaraciones que con fórmulas concretas de auxilio a esa población.

Son mínimos los contactos que han establecido con las comunidades poblanas, de la cuales provienen principalmente los indocumentados que radican en el conglomerado neoyorquino.

La Organización Tepeyac informó que fueron cientos los mexicanos que murieron en los atentados de hace una semana, según testimonios que han recabado entre los sobrevivientes, quienes afirman que muchos connacionales trabajaban en los restaurantes de comida rápida en las zonas aledañas a las torres. Distribuían café y refrigerios en el cúmulo de pisos de los edificios. A la hora de los sucesos, todos se encontraban laborando.

Es difícil saber cuántos murieron en realidad, porque los empleadores se niegan a proporcionar información por dos razones fundamentales. La primera, que eran indocumentados, y la segunda, que no quieren pagar la indemnización respectiva.

Las estimaciones indican que en Nueva York y distritos circundantes radican 900 mil mexicanos, de los que 700 mil son de origen poblano. En Harlem, esta colonia ya superó en número a los puertorriqueños, uno de los grupos raciales más numerosos después de los afroamericanos.

Los vínculos entre las agrupaciones civiles y el consulado prácticamente están rotos. La queja primordial de aquéllas radica en que no han recibido la atención y el apoyo de la representación diplomática y del gobierno mexicano, aunque la oficina presidencial para la atención de los migrantes en el extranjero asegura reiteradamente que sí se está ofreciendo auxilio a los connacionales.

Asimismo, se estableció la Fundación para la Atención de Mexicanos en el Exterior, que tiene entre sus objetivos recaudar recursos para las familias de mexicanos que perecieron o que resultaron heridos en los actos terroristas, informó Juan Hernández.

Paradójicamente, el funcionario no sabe con qué recursos contará esa oficina, aunque detalló que Hacienda proporcionará el presupuesto y que también colaborarán organizaciones empresariales y gobiernos estatales, pero desconoce la cifra exacta. En la feria de cifras que la oficina gubernamental y la agrupación civil han dado sobre el número de muertos, Hernández destacó que ha recibido 4 mil 635 llamadas telefónicas solicitando información sobre el paradero de mexicanos en Estados Unidos.

En 3 mil 375 se ha logrado la localización de connacionales, en mil 300 no se ha podido establecer su paradero, aunque ello "no quiere decir que estén desaparecidos".

Detenciones erróneas

Los mexicanos radicados en Estados Unidos y familiares de víctimas continúan a la espera de alguna ayuda oficial, mientras los atentados empiezan a tener repercusiones en territorio nacional. Ayer se informó de la detención errónea de un ciudadano de origen paquistaní y otro jordano.

La Secretaría de Gobernación informó que el jordano fue detenido en Piedras Negras, pero no está vinculado a los atentados, y el paquistaní Umer Hamzan fue detenido por carecer de documentos migratorios, cuando se dirigía a Estados Unidos, acompañado por dos ciudadanos árabes, a quienes también se investiga. Se conoció que solicitó formalmente al Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR) se le conceda el estatus de refugiado, toda vez que manifestó venir huyendo del régimen político de Pakistán.

El comisionado del Instituto Nacional de Migración, Felipe de Jesús Preciado, descartó que existan presiones estadunidenses para intensificar la búsqueda de ciudadanos presuntamente relacionados con los atentados.

Por otro lado, dijo que oficialmente se tiene conocimiento de que sólo se encuentran desaparecidos 17 mexicanos bajo los escombros de las torres gemelas en Nueva York, de los cuales se han recuperado tres cadáveres.

Estas cifras se contradicen entre las propias autoridades del gobierno. Tanto Juan Hernández como el consulado aseguran no tener información de que alguno de los cuerpos rescatados corresponda a un mexicano.

Castañeda, a comparecer con los diputados

En la Cámara de Diputados, representantes de las fracciones de PAN y PRI manifestaron que el gobierno mexicano deberá apoyar a los familiares de las víctimas.

La ausencia de una reacción oficial para esclarecer cuántos mexicanos fallecieron en los atentados del 11 de septiembre propició que la Comisión de Relaciones Exteriores del citado órgano legislativo llame al canciller Jorge Castañeda a que comparezca la próxima semana.

Gustavo Carvajal Moreno, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, adujo que las autoridades del gobierno de México tienen la obligación de proteger a los deudos de muertos.

El priísta dijo que la escasa atención del gobierno mexicano para atender a los familiares de los connacionales desaparecidos no corresponde a una actitud premeditada, porque el caos provoca una suerte de desorganización, pero corresponde a la SRE solucionar ese problema.

Más críticas al canciller

Manuel Tello Macías, ex secretario de Relaciones Exteriores, planteó que la cancillería no puede auxiliar a los mexicanos residentes en Nueva York o Washington, ni saber cuántos fallecieron durante los atentados del martes pasado porque no tiene un registro exacto de la cantidad que vive en esas y otras ciudades de Estados Unidos.

Lo que sí puede hacer la cancillería, sostuvo, es no empeñarse en sumarse a Estados Unidos en su declaración de guerra. No sé si Castañeda tenga información, pero "como país no podemos ir a una cruzada o a una expedición punitiva. México no tiene ninguna obligación de seguir a Estados Unidos al precipicio", alertó.

En tanto, el ex subsecretario de Gobernación, Jesús Murillo Karam, dijo que las expresiones de un canciller de México debían ser "un poquito más inteligentes", y no insistir -como lo hace Castañeda- en ofrecer un apoyo a Estados Unidos que no se ha pedido expresamente al gobierno de Vicente Fox.

Ineptitud, fue la definición del responsable de asuntos exteriores del PRD, Juan José García, para referirse a la operación del consulado mexicano en Nueva York. Esa oficina no ha favorecido el contacto con las agrupaciones civiles que resultan fundamentales para el levantamiento de un censo entre las familias de quienes habrían perecido la semana pasada.

García informó que Castañeda ha tenido que rectificar su postura en torno al apoyo "incondicional a Estados Unidos". Después de la reunión que el canciller tuvo con los coordinadores partidistas en el Senado, se acordó una postura común que presentará hoy en la reunión de cancilleres de la OEA. Uno de los puntos es la sujeción de la política exterior mexicana a "los preceptos constitucionales".

Por su parte, el cardenal Norberto Rivera Carrera, opinó que aun cuando se deben respaldar todas las acciones en contra del terrorismo, el pueblo de México "tiene que ver con claridad" que "no puede apoyar una causa contra nadie, menos contra una raza o una nación".

(DE LA REDACCION, CON INFORMACION DE ANTONIO LOPEZ Y ANDRES MORALES, CORRESPONSALES)