VIERNES Ť 14 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Los inversionistas esperan señales legislativas para impulsar proyectos, afirma

En manos del Congreso, reactivar la economía: Gil

Ť Reformas en áreas fiscal, eléctrica, telecomunicaciones y competencia o se limitará el empleo y la producción, amaga el secretario de Hacienda Ť Críticas de PRI y PRD

ROBERTO GONZALEZ, ROBERTO GARDUÑO Y CIRO PEREZ

El secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, confirió al Congreso la responsabilidad de emprender medidas para contener la desaceleración de la economía mexicana, que registra el menor crecimiento de los últimos cinco años.

"Los inversionistas están esperando las señales legislativas que les permitan llevar a cabo proyectos" que aumentarían el empleo y la producción, afirmó el funcionario ante la insistente petición de los grupos parlamentarios de PRI y PRD para que el gobierno de Vicente Fox promueva un programa de emergencia para hacer frente a la contracción de la actividad económica.

gil_diputados_1309mhi"No llevar a cabo esas reformas" en las áreas fiscal, eléctrica, telecomunicaciones y competencia económica "es estarnos autolimitando y limitar la capacidad de empleo, de producción, la eficiencia y las mejoras en la productividad", indicó. El programa para hacer frente a la actual situación económica "es conocido y está en sus manos llevarlo a cabo", dijo el funcionario a los legisladores.

Gil Díaz compareció este jueves ante el pleno de la Cámara de Diputados sin lograr el apoyo de las fracciones parlamentarias opositoras al gobierno para la aprobación de la reforma fiscal propuesta por el Ejecutivo, que el gobierno considera clave para fortalecer las finanzas públicas y aumentar la capacidad de gasto en áreas sociales y de infraestructura.

Las finanzas públicas son "estructuralmente frágiles" y necesitan de la aprobación de la reforma hacendaria para aumentar los débiles ingresos del gobierno y para que dejen de ser obstáculo para un crecimiento más dinámico, insistió Gil Díaz.

El secretario de Hacienda, quien hizo la glosa económica del primer Informe de gobierno del presidente Fox, llegó a la Cámara de Diputados sin una oferta concreta para avanzar en la negociación de la reforma fiscal y sin un plan específico para reactivar la debilitada actividad económica del país, que en el segundo trimestre de este año registró cero crecimiento.

En intervención desde la tribuna, la diputada Miroslava García Suárez, del PRD, ratificó que su partido votará en contra de la aplicación del IVA en alimentos, medicinas, colegiaturas y libros. La aplicación del IVA generalizado "no resuelve el problema de las finanzas públicas", manifestó. Afirmó que en el gobierno existe falta de compromiso en cuanto al destino que tendrán los recursos que emanen de esa reforma fiscal, calculados por el gobierno en 140 mil millones de pesos al año. "En pocas palabras, no confiamos en usted, porque usted no está sirviendo a los intereses generales de la República y porque en la práctica se está convirtiendo en un obstáculo para acordar una verdadera reforma fiscal. Sus oficios no ayudan ni al presidente Fox ni al país", dijo la legisladora al titular de Hacienda.

El PRI también fue explícito en su rechazo a la homologación del IVA, una de las columnas de la propuesta fiscal del actual gobierno y que precisamente requiere del apoyo de la bancada tricolor para su aprobación.

"Rechazamos que se graven los alimentos y las medicinas que forman parte de los consumos vitales de la población", afirmó el diputado priísta José Luis Ugaldo Montes. Además, anunció que su bancada está en contra de reducir la tasa del impuesto sobre la renta en los niveles mayores de ingreso -como plantea la propuesta gubernamental- y de gravar prestaciones sociales, como primas vacacionales, primas dominicales y vales de despensa, entre otras.

Los legisladores de Acción Nacional no reflejaron una postura clara en cuanto a la posición sobre la reforma fiscal propuesta por el gobierno.

El titular de Hacienda -a quien el legislador priísta José Antonio Chávez Presa le pidió dejar su fría actitud y "actuar con pasión en la defensa de la política económica del actual gobierno"- no satisfizo los requerimientos de varios legisladores sobre un plan de contingencia frente a la actual crisis económica.

"Ha sido realmente sorprendente la lentitud para elaborar y aplicar un plan emergente y ya es hora de asumir la responsabilidad al frente del Estado", recriminó el priísta Ugaldo Montes. ''La errática actitud de la política económica puede describirse en etapas sucesivas. Primero, el triunfalismo desbordado del cambio. Luego, la invocación irresponsable de la crisis externa como pretexto. Después la aceptación parsimoniosa del bache o el atorón, para terminar a las puertas de una situación de muy alto riesgo. Han preferido negar la existencia del problema en lugar de afrontarlo", añadió.

El perredista Pedro Miguel Rosaldo Salazar cuestionó al funcionario si la verdadera intención del gobierno era contar con más recursos para "seguir rescatando a los grandes empresarios ineficientes y corruptos de este país".

En un tono contrastante con la visión de las fracciones opositoras, el panista Jaime Salazar Silva dijo que su partido "reconoce las acciones realizadas por la Secretaría de Hacienda en la conducción responsable de la economía del país. Todos lo hemos reconocido de una manera u otra; sin embargo, permanecen importantes rezagos que deberán remontarse. Los retos están a la vista, la voluntad para hacerles frente ha quedado demostrada y los mexicanos esperamos una respuesta eficaz", apuntó.