LUNES Ť 11 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Aún no hay fecha ni lugar para el encuentro entre Yasser Arafat y Shimon Peres

Incrementa Israel presencia militar en Palestina

Ť Cancilleres de la Liga Arabe solicitan envío de observadores a la zona de conflicto

AFP, REUTERS, AP Y DPA

Jerusalen, 10 de septiembre. Tanques israelíes ingresaron hoy en una zona autónoma de la ciudad de Gaza, hicieron varios disparos -sin causar heridos- y destruyeron una posición de la seguridad pública palestina cercana a un puesto de la Fuerza 17, la guardia personal del presidente palestino, Yasser Arafat. Horas antes, un policía palestino murió y cinco más resultaron heridos cuando blindados israelíes dispararon en la localidad de Tamún, cerca de la ciudad cisjordana de Jenín.

El ejército israelí también desplegó blindados en los alrededores de Jenín, de donde procedía el autor del atentado suicida en el balneario de Nahariya, en el norte de Israel, que el domingo dejó tres muertos y que fue reivindicado por Hamas.

Estas operaciones, que incluyeron el sobrevuelo de aviones F-16 y helicópteros de combate en Jenín, Rafah y Gaza, son parte de las "acciones puntuales" acordadas ayer por el gabinete de seguridad israelí en represalia por los atentados suicidas de Nahariya y el cruce de carreteras de Beit Lid, y un ataque de palestinos armados, con un saldo total de cinco israelíes muertos y varios heridos.

Pese a los ataques, este lunes continuaron contactos entre palestinos e israelíes para un encuentro entre el canciller israelí, Shimon Peres, y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat.

En un principio, el canciller español, Josep Piqué, y su par de Italia, Renato Ruggiero, anunciaron por separado que el encuentro se realizaría este martes "en un lugar ubicado entre la frontera israelí y los territorios" palestinos.

Sin embargo, Arafat y Peres declararon en Jerusalén y Gaza, respectivamente, que aún no se había acordado ni fecha ni lugar para el encuentro, cuyo objetivo principal sería la aplicación real de un cese del fuego, aunque tampoco hay una agenda precisa.

Arafat había propuesto que la reunión, la primera de alto nivel en varios meses, se efectuara este mismo lunes en Egipto, pero los israelíes rechazaron la posibilidad.

En El Cairo los cancilleres de la Liga Arabe concluyeron una reunión de dos días con un llamado al envío de observadores internacionales a las zonas palestinas y demandaron a Naciones Unidas la creación de una comisión internacional que investigue "las matanzas cometidas por Israel".

En su declaración final los ministros definieron como "aislamiento militar racista" la política israelí destinada a separar la parte árabe de Jerusalén de los territorios palestinos. Este fin de semana los países árabes fracasaron en su intento de que la Conferencia Mundial contra el Racismo, efectuada en Durban, condenara el "racismo israelí contra los palestinos".