MARTES Ť 11 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť SCT: alargan vencimientos y reducen tasas de interés

Con pagarés carreteros a 30 años se busca aligerar la carga del rescate

PATRICIA MUÑOZ RIOS

A fin de aligerar la carga financiera que representa el rescate carretero, el gobierno federal a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) decidió establecer un esquema de sustitución de deuda bancaria mediante ''pagarés carreteros a 30 años para alargar los plazos de vencimiento de esta deuda y reducir sus tasas de interés''.

El esquema ha permitido sustituir una parte importante de los débitos bancarios y pasar los adeudos a términos más razonables y con un menor ritmo de crecimiento, señala un informe de la SCT.

El documento establece que el objetivo de este esquema es fortalecer la situación financiera del Fideicomiso de Apoyo para el Rescate de Autopistas Concesionadas (Farac), el cual es el encargado de administrar los asuntos relacionados con el rescate y la deuda de este sector.

Según recuerda la SCT, el gobierno designó a Banobras como la institución bancaria responsable del manejo financiero del Farac. Asimismo, este banco contrató a Caminos y Puentes Federales de Ingresos (Capufe) para que operara directamente algunas autopistas y contratara a empresas privadas para la operación y el mantenimiento de otras, y desde el rescate se ha logrado tener números negros en estas operaciones.

No obstante, se decidió fortalecer y reestructurar financieramente al Farac y el gobierno determinó varias acciones como la sustitución de deuda bancaria mediante pagarés carreteros a 30 años para alargar plazos de vencimiento; asimismo se decidió subordinar la deuda del Farac a diversas instituciones financieras y del sector público como Nafin.

Entre las medidas adicionales que se tomaron también se incorporaron al Farac diversas carreteras, es decir, se sumaron a este fideicomiso autopistas nuevas que no participaron del rescate inicial y que se pusieron en operación en los años posteriores a 1997. Además, e determinó llevar a cabo una actualización anual de las tarifas de las autopistas conforme las expectativas de inflación, a fin de mantenerlas constantes en términos reales.

Con todas estas medidas, el gobierno federal espera lograr que el ingreso real de las autopistas que están en este fideicomiso de rescate carretero crezca a una tasa igual o superior a la tasa de interés de la deuda, a fin de que pueda ser pagada sólo con los recursos de las autopistas sin requerir apoyos del presupuesto fiscal, es decir, mantener en los próximos años este sistema como ''autofinanciable''.