Ť Propone oficina presidencial sancionar la arbitrariedad de empresas de servicio
Se requiere una legislación bilateral ante el coyotaje en la remesa de dólares a México
Ť En el primer trimestre de 2001 llegaron 2 mil 10.7 millones de dólares por esa vía
ISRAEL RODRIGUEZ
El coyotaje en el cobro excesivo por la transferencia de dólares de trabajadores mexicanos, en su mayoría indocumentados, que sólo al primer trimestre del año sumó 2 mil 10.7 millones de dólares, impone la necesidad de establecer un marco legal bilateral que sancione la arbitraria determinación del tipo de cambio por parte de las compañías acaparadoras del servicio de remesas familiares, expuso la Oficina Presidencial para Mexicanos en el Exterior.
La Dirección General de Negocios y Transferencias propone establecer entes regulatorios coordinados, ya que la autorregulación y autoajuste del libre mercado no equilibran los costos ni los precios.
Sin embargo, se reconoce que es difícil obtener un marco regulatorio para que ambos países operen en conjunto, debido a la marcada diferencia entre ellos y a que no existe una legislación homologada en Estados Unidos, ya que varía de estado a estado.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) , así como la Asociación de Banqueros de México (ABM), ven a este mercado regirse por acciones de competencia desleal, en alusión a las ventajas que detentan grandes empresas que tienen la posesión, administración y usufructo de los negocios integrados en todas sus fases, como es el caso de Elektra, de Ricardo Salinas Pliego, en asociación estratégica con Western Union.
MoneyGram es otra de las empresas que opera las transferencias de dólares. El precio por el envío de dólares ha tenido un importante descenso al pasar de 21.68 dólares por cada 300 dólares de remisión en noviembre de 2000, a 12.46 dólares en junio de 2001, cantidad que sigue siendo elevada.
Elektra cobra por las transferencias de dinero en el interior de la República un mínimo de 7 por ciento, porcentaje que va incrementándose de acuerdo con el monto de dinero que se quiere transferir.
La Presidencia de la República sugiere establecer convenios bilaterales de discrecionalidad sobre las problemáticas derivadas de la migración y de la circulación de dólares, en concreto con respecto al coyotaje sobre esta actividad.
Solamente en 2000 los connacionales enviaron 6 mil 572.7 millones de dólares, cifra que representó la mitad de la inversión extranjera directa total captada en ese periodo. El migrante temporal remite a México entre 40 y 60 por ciento de sus ingresos. El promedio denominativo de cada envío es de entre 250 y 300 dólares.
Durante el primer trimestre de 2001, las remesas familiares sumaron 2 mil 10.7 millones de dólares, que representa un incremento de 43.83 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.
Si la tendencia mostrada de enero a marzo de 2001 continúa, ese 43.83 por ciento podría proyectarse a una tasa promedio de 49.2 por ciento para la totalidad del año, sumando 9 mil 808 millones de dólares. Lo anterior constituye un indicativo importante de la generación de mayor confianza y del logro paulatino de la reducción de las tarifas de envío.
Entre los problemas que enfrentan los migrantes para enviar sus dólares destaca la lentitud en la recepción de dinero, poca seguridad en los sistemas tradicionales de remisión, robos usando money orders, cuantificación difícil y poco confiable de los flujos de divisas y altos costos.