Ť Espera el regreso del campeón César Figueroa

Con 81 años a cuestas, Fidel Ortega no falta un día al gimnasio

 CARLOS HERNANDEZ

Una vez que se coronó campeón nacional pluma, César Figueroa empezó a faltar al gimnasio. Y es que no sólo le llegaron los halagos, sino también las ofertas para cambiar de manejador. "Ya se lo piratearon", es el comentario generalizado en el gimnasio Nuevo Jordán, en un caso más de los apoderados que llegan con dinero y promesas y se llevan a peleadores que otros formaron.

Sin embargo, su mánager de toda la vida, Fidel Ortega, dice no prestarse a rumores. "Debe tener algún problema. Ya regresará", se esperanza el mejor conocido como Orteguita, quien trabaja con el púgil desde sus inicios, lo coronó monarca en Guantes de Oro, Cinturón de Oro y a nivel nacional.

"César es mi orgullo, es un peleador que yo formé", señala con satisfacción este personaje que fue boxeador en 1936, empezó como entrenador en 1952, formó a su primer campeón amateur en 1955 y es mánager desde 1961.

-¿Lo ha tratado bien el boxeo?

-Desgraciadamente no -dice el veterano, con voz queda, y completa-: "He trabajado toda mi vida de balde... tengo más de 40 años en el boxeo, pero no tengo 40 pesos en el bolsillo.

Fidel Ortega ha entrenado a campeones como Romeo Lacandón Anaya, Macetón Cabrera, Ladislao Mijangos y Raúl Baby Juárez, pero es a Figueroa a quien ha formado desde sus inicios y representa su motivo principal para asistir al gimnasio, además de sus otros 2 púgiles profesionales y 12 amateurs.

Modesto, sencillo, Orteguita cuelga al cuello un silbato para dar indicaciones a sus peleadores y una decena de llaveritos con la figura de un boxeador, que vende a 10 pesos para completar el gasto familiar. Inmóvil en su casa del campamento 2 de Octubre, don Fidel, como también lo llaman, es todo entusiasmo y rapidez en cuanto escucha el ruido de los aparatos boxísticos y observa los movimientos de sus pupilos.

César Figueroa, quien conquistó el título el pasado marzo y lo defendió con éxito el 16 de junio, es pretendido por promotores como Ignacio Huízar y Rafael Mendoza, quienes se han acercado a Orteguita para comprarle el contrato. Sin embargo, muchos apoderados han hablado directamente con el peleador, quien se ha ausentado de la sala de prácticas y en cualquier momento podría aparecer entrenando en otro gimnasio.

Mientras, su mánager de siempre lo estará esperando en el Jordán, adonde llega con sus 81 años a cuestas y a pesar de su problema de cataratas.