JUEVES Ť 6 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Se rodó con apoyo de la productora mexicana Bertha Navarro

La fiebre del loco, filme del director chileno Andrés Wood, recibió aplausos en Venecia

Ť Buena recepción de la prensa especializada a El voto secreto del iraní Babak Payami

AFP Y DPA

Venecia, 5 de septiembre. Con aplausos fue recibida, en la Mostra de Venecia, la más reciente cinta del director chileno Andrés Wood, La fiebre del loco, que cuenta con el respaldo de la productora mexicana Tequila Gang, encabezada por Bertha Navarro y Rosa Bosch. También participó en la realización del filme la española El Deseo, empresa de Pedro Almodóvar.

El filme, que compite por el recién creado premio el León de Oro, recrea, como la legendaria fiebre del oro, la fiebre por un molusco al que se le atribuyen poderes afrodisiacos, que invade a un pueblo de pescadores de la Patagonia chilena, atrayendo a traficantes, falsos empresarios japoneses, un sacerdote, buceadores y un grupo pintoresco de prostitutas, los cuales enloquecen durante los pocos días en que el gobierno autoriza su pesca.

La historia de estos personajes, que buscan hacerse ricos con rapidez -algo muy chileno en opinión de Wood-, es al mismo tiempo un cuento acerca de la locura que produce esa riqueza.

''No tengo la pretensión de contar lo que es mi país con una metáfora", dijo el cineasta, quien por su primer largometraje, Historias de futbol (1997) recibió numerosos premios en Europa y América Latina.

''Mi país'', añadió, ''está muy lejos de sus sentimientos, que de a poco se va encontrando consigo mismo."

Wood, una vez que haya pasado el estreno de La fiebre del loco en Chile -previsto para el 4 de octubre- retomará la elaboración del guión de su próximo filme Machuca, una historia de niños durante la transición de la democracia a la dictadura.

No soy político, soy cineasta: Payami

Y si el León de Oro dependiera de las reacciones, se lo llevaría la película iraní El voto secreto, de Babak Payami, la cual fue aplaudida a rabiar por la prensa especializada después de su proyección.

La historia narra mediante situaciones cómicas y absurdas la jornada de una mujer que llega a una isla para recoger los votos de sus habitantes y que es acompañada durante todo el día por un soldado, que inicialmente se rebela contra el hecho de que una mujer haya sido designada funcionaria del gobierno. Inspirada en una escena del filme del también iraní Mohsen Mahmalbaf, Pruebas de democracia, en el que una mujer es lanzada con paracaídas en el mar para recoger una urna electoral, El voto secreto resulta una representación surrealista y satírica de un tema sociopolítico.

Payami (Teherán, 1966) explicó que se propuso exponer cómo las personas con nociones para instruir la democracia también necesitan aprender mucho de las personas que viven en el país. ''Ella tiene más que aprender, que enseñar a la sociedad.

''No quise hacer un filme sobre el sistema electoral iraní, sino acerca de las elecciones en un lugar lejano e indefinido, lleno de contradicciones'', señaló.

El realizador se abstuvo de expresar su opinión acerca de la actual situación política en Teherán, donde las reformas del presidente Jatami enfrentan la oposición conservadora.

''No soy político, soy cineasta", dijo Babak Payami, cuya ópera prima fue Yek Rouz Bishtar.