MIERCOLES Ť 5 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001
Ť El kamikaze, un palestino disfrazado de judío ortodoxo
Nuevo atentado suicida en Jerusalén; 15 israelíes heridos
Ť En el lugar del atentado abuchean a Javier Solana
AFP, AP, DPA Y REUTERS
Jerusalen, 4 de septiembre. Un atacante suicida palestino, disfrazado de judío ortodoxo, hizo estallar una bomba que lo destrozó y que hirió al menos a 15 israelíes en la céntrica calle de Niviim, en Jerusalén, a sólo una cuadra de la pizzería en la que otro kamikaze mató a 15 personas el pasado 9 de agosto.
Este ataque podría frustrar del todo el posible encuentro entre el presidente palestino, Yasser Arafat, y el canciller israelí, Shimon Peres. El vocero del primer ministro, Ariel Sharon, Raanan Gissin, aseguró que la responsabilidad de estos ataques es totalmente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), y dijo que de lo único que puede hablarse, en este punto, es del fin de la violencia.
Asimismo, el jefe de Política Exterior de la Unión Europea (UE), Javier Solana, quien está en Jerusalén para concertar el encuentro Peres-Arafat, fue abucheado por israelíes hoy, cuando visitó el lugar del atentado. "Basura, toma tu equipaje y sal hoy mismo de Israel", le gritó en inglés un transeúnte a Solana.
Mickey Levy afirmó que policías que patrullaban la zona del atentado fueron alertados por varias personas de un judío ortodoxo que se veía nervioso. Los uniformados siguieron al individuo y dijeron haber notado que llevaba una barba falsa. Cuando le llamaron la atención el hombre se volvió, sonrió, y levantó la mano derecha hacia la mochila que llevaba a la espalda y voló en pedazos.
Fuentes hospitalarias dijeron que al menos uno de los lesionados está grave. Uno de los dos policías que confrontaron al atacante se encuentra gravemente herido, dijeron fuentes hospitalarias.
Esto ocurrió pasadas las 7 de la mañana, a la hora en que los niños se dirigían a la escuela, si bien no se reportó que ningún menor quedara herido. Un hombre que llevaba a su hija al colegio, sin embargo, debió llevar a la pequeña al hospital por conmoción nerviosa y señala que después del estallido, el auto en que viajaban quedó cubierto de sangre y piel.
Poco después apareció en el lugar Solana, y aseguró que la UE "condena este acto brutal. Es terrible, esto tiene que terminar". Rodeado de guardaespaldas, Solana salió del lugar mientras la gente lo abucheaba y tachaba de "antisemita".
Sharon, quien se encuentra en Moscú y hoy visitó al presidente ruso, Vladimir Putin, excluyó toda reanudación del diálogo con los palestinos y responsabilizó de la violencia a la ANP. Putin, por su parte, condenó "el terrorismo contra civiles" y manifestó su intención de que su gobierno se involucre más en el proceso de paz en la región.
El diario israelí Haaretz dijo en su edición de hoy que Peres esperaba encontrarse con Arafat en un lugar "tranquilo", y que continuaban los contactos bilaterales informales entre israelíes y palestinos, pero el canciller no dijo hoy nada sobre si este encuentro, gestionado a instancias del ministro del Exterior alemán, Joschka Fischer, se realizará o no.
Gissin, por lo pronto, aseguró hoy que la ANP tiene a su alcance el control de la violencia, "pero ellos no hacen nada para detener los horrendos asesinatos de hombres, mujeres y niños". El vocero de Sharon dio por terminada cualquier iniciativa hacia el encuentro entre Peres y Arafat, y aseguró: "ƑDe qué hay que hablar ahora? Sólo hay una cosa de qué hablar y es del completo cese de la violencia, el terrorismo y la incitación".
Yasser Arafat, por su parte, declaró su desolación por el atentado suicida, después de sostener un encuentro con Solana, y afirmó: "Estoy muy triste por los heridos de Jerusalén. Siento lo mismo cuando hay civiles heridos, ya sean israelíes o palestinos".
Todo esto ocurría en momentos en que el Partido Laborista elegía a un nuevo dirigente en una contienda que enfrenó al ministro de Defensa, Benjamin Ben Eliezer con el presidente del parlamento, Avraham Burg, considerados respectivamente, un halcón contra una paloma.
Según un primer recuento parcial de 40 mil de un total de 60 mil votos, Ben Eliezer iba a la cabeza con 51.7 por ciento de los votos contra 47 por ciento de Burg. Según la comisión electoral del Partido Laborista, sólo la mitad de los 117 mil miembros del partido participaron en la consulta.