Ť Es de 2 mil 400 mdp la deuda de ingenios: Romero
Pagarían autoridades créditos que dio Bancomext a industriales azucareros
HUMBERTO ORTIZ MORENO
En lo que a futuro podría representar otro virtual
rescate financiero, el gobierno federal deberá cubrir con subsidios
los pagos faltantes de los créditos otorgados por el Banco Nacional
de Comercio Exterior (Bancomext) a los industriales del azúcar,
en caso de que el mercado interno se desplome o el dulce pignorado por
la institución no pueda ser comercializado.
Al respecto, José Luis Romero Hicks, director
general del Bancomext, precisó que la producción bajo resguardo
del banco es de casi 5 mil toneladas del edulcorante, las cuales podrían
garantizar que no habrá riesgo de cartera vencida si el mercado
no se desploma, pero de ocurrir ello la Sagarpa "me paga la diferencia".
Afirmó que todo el producto resguardado deberá venderse de aquí a diciembre próximo. La deuda de los 27 ingenios expropiados por el Estado suma 2 mil 400 millones de pesos, de acuerdo con los informes de las últimas semanas.
Romero Hicks insistió en que las operaciones de reporto del Bancomext "encuentran garantía en la propia azúcar que se está pignorando", por lo que la decisión gubernamental "es un tema totalmente aislado respecto a la posición del banco como acreedor" y no tendrá ninguna repercusión.
Explicó que el dulce fue cedido a los cañeros y el producto se depositó en un fideicomiso a nombre de ellos, haciéndolos propietarios, y los propietarios son los productores, no los industriales.
En torno a las deudas entre empresarios y cañeros, el funcionario puntualizó que ante la imposibilidad de hacer el pago en especie, los productores querían dinero al haber entregado la zafra. Entonces, dijo, el Bancomext tomó el azúcar y lo monetizó, permitiendo a los industriales cubrir sus compromisos con los trabajadores.
"La garantía de la operación es la azúcar, de tal manera que en el momento en que venzan los plazos de los reportos, en el caso de que no se hubiera pagado o no se pagara por el monto del crédito, es el propio producto cuando se va vendiendo al mercado el que le permite al banco recuperar los préstamos", abundó.
Romero Hicks no descartó, aunque subrayó el "teóricamente", la hipótesis de que los precios se cayeran. Pero si llegara a ocurrir, el Bancomext no pierde, sino que el gobierno federal pagaría la diferencia entre la venta del dulce pignorado y "la no realización" del total adeudado.
"Nosotros no tenemos riesgo en estas operaciones y se entiende por qué estamos presentes", remarcó.
Para el banco, en consecuencia, todo seguirá igual y el Estado, con este esquema, tendría que subsidiar con recursos públicos los créditos que dejaron de pagar los industriales. Las partidas presupuestales de la Sagarpa cubren lo que falte.
Por lo que hace a la posibilidad de que el Bancomext participe en el Programa Nacional Azucarero, Romero Hicks aclaró que ocurrirá "sólo si el gobierno central nos invita", pues recordó que la institución de fomento actúa bajo el mandato de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), exclusivamente, y "nosotros operamos a nombre del gobierno central como agentes financieros".
De esta manera, apuntó, el Bancomext no ha participado en ninguna de las negociaciones entre los sectores involucrados y únicamente es el punto de confluencia y confianza, en el sentido de que "sabemos reportar y pignorar no sólo éste sino otro tipo de granos".