MARTES Ť 4 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Se hará algo para paliar el desempleo, prometió

No es saludable el escaso crecimiento en EU, reconoce el presidente Bush

NOTIMEX

Washington, 3 de septiembre. El presidente estadunidense, George W. Bush, señaló hoy que a nadie beneficia la expansión promedio de uno por ciento en el crecimiento anualizado del producto interno bruto (PIB) de Estados Unidos.

El bajo nivel de crecimiento de la economía estadunidense no ''es saludable'' para nadie, dijo ante la Asociación Nacional de Carpinteros en la población de Kaukauna, en Wisconsin, Michigan, y reiteró su ''preocupación'' por ese problema.

''Me preocupa también el nivel de desempleo (en la actualidad de 4.5 por ciento en términos anualizados), pero mi administración hará algo al respecto'', aseguró.

wisconsin_bush_jheEn un discurso con el que conmemoró el Día del Trabajo, Bush señaló que una de las piezas clave para restablecer la situación económica es el recorte de impuestos que impulsa su administración.

''Tengo confianza en que nos vamos a recuperar... por eso necesitamos el apoyo de todos los trabajadores de Estados Unidos para pedir al Congreso que respalde los recortes a los impuestos que dan confianza a la economía'', subrayó Bush.

Su gira por Wisconsin forma parte de una nueva estrategia política de la Casa Blanca que tiene la finalidad de reducir las diferencias de Bush con los sindicatos laborales del país, que rechazan sus proyectos de apertura comercial.

El presidente se mostró cuidadoso de no mencionar una sola palabra de sus proyectos de promoción del libre comercio, pues sabe que son los sindicatos obreros los que acusan a compromisos de esta naturaleza de ser los responsables del creciente nivel del desempleo.

Para los sindicatos de trabajadores, compromisos como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte los pone en desventaja ante la mano de obra barata que ofrece México, hacia donde las empresas se están llevando plazas de trabajo.

''Entiendo perfectamente los problemas por los que está pasando el gremio trabajador de Estados Unidos, sé que un despido en estos momentos significa la imposibilidad de encontrar un lugar donde trabajar'', apuntó Bush.

Aprovechó su discurso para promover el plan de reducción tributaria y criticar a sus opositores demócratas en el Congreso, que consideran que por ello ahora el gobierno federal tendrá que echar mano del dinero del superávit presupuestal.

Los demócratas argumentan que el recorte a los impuestos, lejos de ayudar a superar el bache macroeconómico profundiza los problemas y obliga al gobierno federal a usar el superávit para financiar programas de asistencia social, como los de salud y educación.

El presidente rechazó esa postura y garantizó a los carpinteros que ''en Washington hay dinero'' para financiar los proyectos federales, sobre todo la reforma educativa, que ha considerado la prioridad más importante de su administración.

''Es correcto el recorte a los impuestos y se hizo en el momento adecuado, por ello ahora la gente tiene más dinero para gastar y los empresarios más fondos para invertir, eso crea empleos'', acotó.

Con el reajuste a los pagos tributarios aprobado en el Congreso, los estadunidenses comunes están recibiendo un reembolso de 300 dólares por sus pagos al fisco, mientras los empresarios se llevarán tajadas mucho más grandes.

''¿Acaso mis críticos quieren subir los impuestos? Lo peor que pudiera ocurrir en estos momentos de dificultades económicas es que subieran los impuestos a los trabajadores'', puntualizó Bush.