MARTES Ť 4 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001

Ť Las lideresas nacionales de PRD y PRI aceptan la invitación presidencial

El acuerdo político que propuso Fox podría ser afinado durante la gira a EU, plantea Creel

Ť El tricolor quiere pactos en plural, "que sirvan al pueblo", señala Dulce María Sauri

El acuerdo político al que convocó el presidente Vicente Fox podría afinarse Durante el viaje a Estados Unidos. Eso dejó entrever ayer el secretario de Gobernación, Santiago Creel, quien argumentó para ello que a la gira están invitados los presidentes de los tres partidos principales y los líderes del Congreso de la Unión.

Creel vaticinó que dentro de la apretada agenda presidencial en su visita de Estado -que incluirá las ciudades de Washington y Miami- podría abrirse un espacio para una reunión informal. Precisó que los alcances del acuerdo de alguna manera ya se han discutido con los actores políticos en los meses previos, pues el Ejecutivo sólo esperaba que transcurrieran los procesos electorales para que no hubiera elementos que pudieran incidir en la búsqueda de consensos.

Por la noche, las presidentas nacionales de PRI y PRD, Dulce María Sauri Riancho y Amalia García, confirmaron que aceptaron la invitación presidencial para acompañarlo en su viaje al vecino país. Sin embargo, la visión de las principales fuerzas opositoras distaron del optimismo del secretario. La presidenta nacional del PRI, Dulce María Sauri Riancho, resaltó que su partido quiere acuerdos en plural, "que sirvan al pueblo, a la sociedad, a la gente de carne y hueso, no aquellos que tengan que ver con asuntos que interesan primordialmente a los partidos políticos, o al propio gobierno".

Para la presidenta de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, la también priísta Beatriz Paredes Rangel, la convocatoria presidencial para establecer un acuerdo nacional "es muy interesante" y en ese órgano legislativo se habrá de analizar con seriedad.

En entrevista telefónica previa a su viaje -al que acude en virtud de que uno de los temas centrales de la gira es el migratorio-, Creel dijo que será la oportunidad de dar continuidad a las negociaciones del acuerdo.

El contenido del pacto, adelantó, involucraría temas de lo más diverso, partiendo de los que son propios de la reforma del Estado, pero también asuntos como: democratizar las instituciones sociales para que la gente que menos tiene pueda aspirar a un mejor desarrollo; aspectos económicos que se asocian a la preservación de finanzas sanas y que el Estado cuente con mayores recursos para financiar los programas sociales.

A juicio de Creel, el acuerdo no sería coyuntural, sino que abarcaría prácticamente todo el sexenio, pues su aplicación requeriría de reformar instituciones, cambiar procedimientos políticos y la modernización del sistema político.

Creel insistió en que gobierno y partidos deben condenar las expresiones de violencia de algunos grupos armados. "Ya basta (de) que los movimientos tomen el curso de la violencia para intentar hacer los cambios sociales o políticos del país. Por eso creo que todos debemos combatir esta violencia".

Sólo para enfrentar problemas sociales

La presidenta del tricolor precisó que a su organización le interesa un acuerdo sobre "cómo los partidos, el gobierno, los legisladores podemos sumar fuerzas para resolver los problemas del desempleo, la inseguridad pública, el campo y los campesinos. Eso es lo que nos importa para ir a un acuerdo con otras fuerzas políticas y con el Ejecutivo federal".

Destacó que el pacto deberá darse en el marco absoluto de respeto al régimen constitucional y a las instituciones producto del mismo régimen, y que el "acuerdo no puede ser pretexto para pretender cercenar alguno de los poderes o de los órdenes de gobierno, de las facultades que la propia Constitución les señala".

Ese acuerdo debe definir también dos cuestiones fundamentales, advirtió: un mecanismo de comunicación política que haga posible la construcción de acuerdos, en plural, y que sean asumidos y tomados en sus ámbitos de competencia, por parte de las fuerzas políticas.

En tanto, el presidente del Senado, y coordinador de la fracción panista en esa cámara, Diego Fernández de Cevallos manifestó que la convocatoria a un acuerdo político nacional "es un reclamo de la sociedad que se ha venido mencionando por los partidos, y hoy lo toma muy oportunamente el Presidente de la República".

Con ese acuerdo, abundó, se avanzaría en los consensos básicos para ir desahogando la agenda política, económica y social. Un acuerdo, agregó, "no implica claudicaciones". DE LA REDACCION