LUNES Ť 3 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001
Menos gasto público a educación superior
El gasto federal en educación superior representa menos de 0.6 por ciento del producto interno bruto. Este porcentaje ha ido disminuyendo: en 1994 fue de 0.66 por ciento del PIB; 1995, 0.59; 1996, 0.54; 1997 0.50; 1998, 0.49; 1999, 0.48, y en 2000, después del largo conflicto en la UNAM, se elevó ligeramente para colocarse en 0.54 por ciento. Este porcentaje no llega ni a la mitad de 1.1 por ciento del PIB recomendado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos como ''el mínimo necesario'' para impulsar la educación superior.
El presupuesto por estudiante universitario disminuyó drásticamente en el sexenio pasado, ya que la matrícula creció 16.9 por ciento. Por ejemplo, en 1994, ante una matrícula de 978 mil 220 estudiantes de educación superior, se destinaron 8 mil 784 pesos, en promedio, por alumno. Seis años después, ante una matrícula de 1 millón 143 mil 687 estudiantes, el gasto per cápita por alumno se redujo a 6 mil 309 pesos; 70 por ciento de los estudiantes de educación superior está en instituciones públicas.
El gasto federal en educación superior se redujo durante todo el sexenio anterior en términos de precios reales, al pasar de 8 mil 593. 6 millones de pesos en 1994 a 7 mil 232 millones en 1999. Sólo hasta 2000 se eleva el presupuesto -como efecto del conflicto en la UNAM- aprobándose 29 mil 216 millones de pesos que, en términos reales, representó un incremento de 10 por ciento en comparación con 1994.
La contracción del gasto en educación superior ha sido brutal. Mientras que en el sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado por cada 100 pesos que se gastaban en el sector educativo, 29 pesos se destinaban a la educación superior, con Ernesto Zedillo esta proporción cayó a 11 pesos.
FUENTE: OBSERVATORIO CIUDADANO DE LA EDUCACION (COMUNICADO 34)