VIERNES Ť 31 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť La empresa reiniciará la producción de papel con un nuevo contrato colectivo

Pactan el cese de 650 obreros de Atenquique

Ť El GID alaba la política foxista que fomenta estructuras menos costosas y más productivas

CAYETANO FRIAS FRIAS CORRESPONSAL

Guadalajara, Jal., 30 de agosto. Los representantes de la empresa productora de papel de Atenquique, subsidiaria del Grupo Industrial Durango (GID), llegaron a un acuerdo para liquidar a más de 650 trabajadores sindicalizados, en huelga desde hace cuatro meses. La fábrica cerró sus puertas 15 días antes de que empezara el paro en forma legal, con el argumento de que era incosteable sostener la fuente de trabajo.

Esta tarde el GID envió un comunicado en el cual precisa que "este es un evento de trascendencia nacional en materia de política laboral del presidente (Vicente) Fox, al permitir a las empresas mexicanas la flexibilidad necesaria para insertarse en la competitividad internacional, con estructuras laborales de menor costo y mayor productividad, a través de liquidación de contratos colectivos de trabajo obsoletos y no competitivos, sin violar los derechos de los trabajadores".

El principal fabricante de papel en México precisó que planea "reabrir este importante centro industrial en las próximas semanas, con un nuevo contrato colectivo de trabajo base cero, acorde con los tiempos actuales de competitividad, lo que permitirá a la empresa continuar realizando nuevas inversiones para impulsar su crecimiento y desarrollo".

Aurelio Vázquez, secretario general de la sección 11 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Papelera, dijo que optaron aceptar un acuerdo con los empresarios "porque si nos hubiéramos ido con otro proceso, la moneda seguiría en el aire".

Manifestó que la empresa se comprometió a recontratar al menos a la mitad de los trabajadores que serán liquidados, una vez que se tenga la estructura para reiniciar labores. Agregó que a partir de la próxima semana se empezarán a pagar las liquidaciones a los trabajadores, y esperan que sean de acuerdo con la ley, incluyendo los salarios caídos de cuatro meses y dos días, desde que la empresa cerró sus puertas.