Ť Repudio de partidos políticos y organizaciones de derechos humanos
Se desata polémica en Argentina por decisión de detener a niños de la calle
Ť El gobernador de la provincia de Buenos Aires, donde se aplicará la medida, en difícil situación
Ť Como protesta contra la crisis, en Mendoza un pintor quemó un cuadro que había sido premiado
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 30 de agosto. La decisión del gobierno de la provincia de Buenos Aires, la más grande de Argentina y con mayor concentración de pobreza, de detener a niños de la calle y a los que estén mendigando, desató hoy una po-lémica que puso al gobierno provincial en una difícil situación.
El gobernador justicialista (pe-ronista, oposición a nivel nacional), Carlos Ruckauf, ya enfrenta una grave situación en la provincia de Buenos Aires, que cada día registra movilizaciones de protesta contra el ajuste económico y los recortes salariales a burócratas, que además cobran parte de sus salarios en bonos patacones.
Uno de los primeros en reaccionar fue el ministro de Desarrollo Social, Juan Pablo Cafiero, del centroizquierdista Frepaso, socio minoritario de la socialdemócrata Unión Cívica Radical (UCR) en la Alianza gobernante.
También protestaron organismos de derechos humanos y varios partidos políticos, que presentaron decenas de demandas en la justicia y de recursos de amparos. Esto hi-zo que durante las últimas horas el gobierno bonaerense anunciara que está estudiando la medida que, según sostuvo, "tenía la intención de proteger a los menores".
Sin embargo, desde hace años se reproducen las denuncias por graves violaciones a los derechos hu-manos por parte de fuerzas policiales y también en los institutos donde son alojados los menores.
Ochenta por ciento de los jóvenes y adultos que están en las atestadas cárceles del país han pasado por esos institutos, donde son so-metidos a sesiones de torturas y también aprenden a delinquir.
Pobres, más de la mitad de los infantes de la mayor entidad
De acuerdo con organismos hu-manitarios, más de la mitad de los niños del gran Buenos Aires son pobres, lo que equivale a más de un millón 300 mil. De ellos, más de 400 mil viven en la indigencia.
En octubre pasado el oficial Instituto Nacional de Estadística y Censo evaluó que de los 4 millones de bonaerenses menores de 14 años, 53 por ciento vive en hogares pobres. Las nuevas cifras, que aumentaron en 500 mil el número de pobres en este último año, hace que se haya disparado también la de menores en la pobreza.
La zona de la provincia de Buenos Aires que rodea a la capital federal, el llamado conurbano, con 9 millones de habitantes, tiene los indicadores socioeconómicos más negativos del país. El segundo cordón bonaerense, con 6 millones, está aún en peores condiciones.
Al darse a conocer la polémica medida, el secretario de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Ramón Verón, dijo que el arresto de los menores por la policía para ponerlos a disposición de un juez o entregarlos a familiares era "una forma de contener" a esos chicos ante los peligros de la calle.
En cambio, Cafiero dijo que si el gobierno de Ruckauf decide po-ner tras las rejas a niños que por la grave crisis económica "ingresan en un circuito de la calle o de marginación, es el camino equivocado... son justamente las víctimas más indefensas", y recordó que los institutos de menores que deberían albergar a los niños detenidos "están al borde del colapso".
Los propios niños de la calle, organizados en algunas iglesias u organismos civiles, pidieron que "hagan algo con los pobres porque cada día hay más gente en las calles mendigando y revolviendo basuras", y recordaron que para muchos de ellos trabajar en la vía pública es la única posibilidad de conseguir algo de comida.
A esta situación se agrega que más de 500 mil jóvenes, entre 2 millones radicados en esta capital y el gran Buenos Aires, abandonaron el sistema educativo.
En tanto, miles de personas marcharon esta noche en La Plata, ca-pital de la provincia de Buenos Aires, para reclamar no recortar el presupuesto a la educación, mientras en la provincia de Mendoza un pintor quemó un cuadro que había sido premiado, también co-mo forma de protesta contra la gravedad de la situación social.
Mientras, los gobernadores provinciales llegaron a la capital, los opositores justicialistas para ad-vertir que resistirán cualquier re-corte a la coparticipación provincial para que el país logre el déficit cero exigido por el Fondo Monetario Internacional (FMI), y otros, los oficialistas, para solicitar que cuando se negocie con ese organismo financiero también asistan los mandatarios provinciales.
Campaña gubernamental contra líder del partido oficial
Al drama social y las protestas se suma el aumento de la tensión en la relación entre el presidente Fernando de la Rúa y su partido.
El presidente de la UCR y ex mandatario, Raúl Alfonsín, denunció una campaña de algunos sectores gubernamentales contra su persona, y aseguró que "jamás me ha consultado el presidente" en decisiones del gobierno.
Citó como un ejemplo de esto que como líder del partido oficialista no conoce el contenido de la carta de intención que el ministro de Economía, Domingo Cavallo, firmará mañana con el FMI.
Cada día aumenta más la distancia de los hombres que rodean a De la Rúa con la UCR, después que muchos de ellos están señalados desde el partido por "conspirar" para destruir la Alianza que llegó al gobierno a fines de 1999.
La última movida que provocó descontento en la UCR fue el remplazo del radical Héctor Rodríguez por el cavallista Armando Caro, al frente del organismo re-caudador de impuestos. De la Rúa aseguró que no existe campaña contra Alfonsín, por quien "todos tenemos respeto".
En otro orden, este día se inauguró una plaza que se convertirá en el Parque de la Memoria, en la avenida costanera frente al Río de La Plata, que recordará a las miles de víctimas de la última dictadura militar, y también a los muertos y heridos del atentado que destruyó la Asociación Mutual Israelita Ar-gentina en julio de 1994.
"Esperamos que esto sirva para dar luz e impedir el ocultamiento de aquel terror, a la vez que se reivindique la lucha de miles de personas que soñaban con un país con libertad y democracia real", dijo Estela Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo.