Ť La vieron casi 250 mil personas; "todo respondió a la ecuación mágica"

El Hombre de La Mancha concluyó temporada; producción absolutamente rentable: Gilbert

ARTURO CRUZ BARCENAS

El pasado domingo llegó a su fin la temporada del musical El Hombre de La Mancha, en el Centro Cultural Telmex, luego de un año y medio y 443 puestas en escena. "Duró exactamente el tiempo que le teníamos destinado; todo respondió a la ecuación mágica", precisó el productor Morris Gilbert, durante el intermedio.

Antes, durante y al final de la última función, varios actores lloraban, otros tragaban saliva, los más aguantaban las lágrimas. Para la ocasión, Morris dispuso que actuara la mayor cantidad de gente posible. En el primer acto Laura Cortés hizo el papel de Aldonza y Eugenio Montesoro a Don Quijote, así como Luis René Aguirre al pesado bachiller Carrasco; para el segundo entraron en dichos papeles Pía Aun, Roberto Blandón y Abel Fernando.

La obra gustó en lo general a todos los asistentes que, expuso Gilbert, fueron 250 mil, quienes salieron cobijados con la aureola del sueño imposible. Para la anécdota queda que un chavo la vio más de cien veces. Es un lector tenaz y enamorado de la obra de Miguel de Cervantes Saavedra.

Al finalizar cada uno de los números musicales un jovenazo se paraba y aplaudía como si Hugo Sánchez hubiera anotado a Polonia. Sancho (Carlos Cobos) enterneció una vez más a los asistentes con su bonhomía, característica casi inexistente en nuestros días.

Esta producción de tres millones de dólares fue rentable, "absolutamente", dijo Gilbert. También en lo artístico. "Qué bueno que la vio casi un cuarto de millón de personas." La historia estuvo a punto de ser llevada a provincia; sin embargo, Ocesa Presenta, productora, realizó un estudio de la viabilidad, "pero el horno no está para bollos. Esta fue una compañía grande, más de cien personas. Quizá la gira se realice el año que entra; de ser así se traería la producción de nuevo. Pero ya viene Chicago (que se presentará en breve)".

En México no había público suficiente para musicales de este tipo. Gilbert señaló al respecto: "Vamos de gane, pero aún no llegamos al lugar que queremos. Nuestros musicales los ha visto un millón de personas, con boleto pagado. Esta es una cifra impresionante."

-Es una lástima que no los vean más personas...

-Establecemos todas las estrategias. Hacemos promociones. Ahora estamos trabajando con el ISSSTE, para traer a los tarjetahabientes.

-¿Va a haber video de El Hombre de La Mancha?

-No, quien lo vio lo vio, y ya. El teatro es una experiencia en vivo. No habrá ni disco.

Morris y amigos fueron a sus asientos para ver el segundo y último acto. Anselmo (José Joel) casi llora de emoción. El elenco y la producción (más de 200 personas) cantaron con el público de pie El sueño imposible, la rola del ideal inalcanzable, pero moral y dable sólo a ciertos mortales. Varios se convirtieron en caballeros del siglo XXI. En el escenario se tomaron de las manos los dos Quijotes, las dos Dulcineas, los dos Carrascos.

Concluyó así, en el DF, el musical de Dale Wasserman, con música de Mitch Leigh y letra de Joe Darion.