LUNES Ť 27 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť No se trata de "agarrar carretonadas de gente en un partido que va en vías de éxito"
Acción Nacional debe abrirse a nuevos militantes sin que se filtren oportunistas: Martín Huerta
GEORGINA SALDIERNA
El subsecretario de Gobernación, Martín Huerta, consideró que el PAN debe comenzar un proceso de apertura a nuevos militantes, pero cuidando la elección de sus adeptos, pues no se trata de "agarrar carretonadas de gente en un partido que va en vías de éxito".
En medio del proceso de reforma estatutaria que vive Acción Nacional desde el año pasado, el ex gobernador de Guanajuato se suma a una corriente de panistas que principalmente se encuentran en los estados de Baja California, Chihuahua, Nuevo León, Guanajuato, Aguascalientes y Jalisco, donde el blanquiazul ha tenido éxitos electorales en la última década.
Tras el triunfo del PAN el 2 de julio, con Vicente Fox, ese instituto político se ha convertido en un imán; muchos son los que buscan ingresar al partido, en busca de un cargo o un puesto de representación popular. Ello ha abierto un debate sobre si debe abrirse o no a nueva militancia.
La polémica se avivó con la reforma de los estatutos que empezó en 2000 y que no se sabe cuándo concluirá. Los optimistas hablaban de noviembre, pero otros señalan que el proceso terminará en 2002.
Huerta estimó que una fuerza importante de panistas está por abrir el partido; un reto del mismo tamaño es establecer filtros y cuidar la entrada para evitar el ingreso de oportunistas, consideró.
Reconoció que el ingreso de militantes puede causar un descenso en la calidad de los adeptos, sin embargo, ese es un reto que todos los partidos han efrentado.
Rechazó que el PAN no haya apoyado al gobierno foxista. Señaló que sí lo ha hecho, de acuerdo con la necesidad del momento. "Si el resultado final no satisface a la población en general, es porque esta administración tiene poco tiempo, con respecto al gobierno que le tocó suceder. Nueve meses contra 70 años", puntualizó.
Destacó que el cambio de gobierno levantó grandes expectativas y desde luego la población quería resultados al día siguiente de la elección. Sin embargo, el limitado presupuesto y el marco legal se han constituido en factores que impiden cambios inmediatos.
Rechazó que el candidato Fox haya prometido demasiado y por ello ahora no pueda satisfacer las expectativas. Durante la campaña se hicieron planteamientos generales sin caer en los absurdos, pero desde ese momento y hasta la toma de posesión transcurre mucho tiempo en el que las cosas van cambiando, subrayó como parte de la argumentación en torno a los resultados de la actual administración.
Refirió que "ahí la lleva" el gobierno foxista, pues, por ejemplo, las administraciones priístas nunca lograron una reforma hacendaria integral y nosotros enviamos una propuesta que no fue rechazada.