a
u t o b i o g r a f í a
En
la garganta un solo
nudo
basta
Gabriela
Zamudio Demerutis
|
Paco
Ignacio Taibo I,
El
hombre sin corbata y otras fabulaciones,
UNAM,
México,
2000. |
No usaba
corbata para mantener en vilo sus principios. Y eso que te puede parecer
una
tontería es
cosa seria porquela guardia civil registra primero a los que no tienen
corbata.
Yo supe que era comunista
no porque hablara
de comunismo conmigo,
sino porque tenía
el aspecto de los
comunistas según la descripción oficial.
Taibo
I
¿Por qué el hombre sin corbata
resulta ser el relato más importante de un libro en el que hay otras
historias que podrían darle título? Porque el hombre sin
corbata es la idea que permanece oculta en todas las demás fabulaciones.
Es en sí el motivo del libro, lo que identifica a su autor, quien
desde temprana edad sintió esta inclinación gracias al medio
en el que se desenvolvió y a las lecturas que hizo, en ocasiones
por curiosidad y en otras por gusto.
Su vida, filtrada por los propios sueños.
El resultado: un libro único, tratado desde una perspectiva muy
creativa. Podemos estar a favor o en contra de sus ideas; no importa, porque
no son leyes sino narraciones pequeñas, que no hacen afirmaciones
sobre lo que es correcto o lo que no lo es. La sutileza del autor nos conduce
por un laberinto de hechos y creencias sin detenernos en los conceptos.
Fluye la lectura por la buena sintaxis y nos envuelve más en los
hechos que en las ideas; juega con nuestras emociones sin necesidad de
evocarlas por un medio directo.
Sufrimiento y desilusión a causa
de una guerra civil arrolladora, que deja profundas huellas tanto en el
autor como en el alma de su pueblo. Miseria, prohibiciones y gran pobreza
tratadas desde su punto de vista, que encierra en su semántica el
dolor y la tristeza callada; su rebeldía ante un régimen
dictatorial y ante las devastadoras consecuencias de la guerra: "El Dictador
que está situado en la cima del país [...] destila una sustancia
verde y venenosa que se va desplazando [...] y tocándolo todo y
convirtiéndolo en una cosa sórdida y esencialmente hipócrita..."
Autor y protagonista del libro, Paco Ignacio
Taibo I nos lleva de la mano por sus recuerdos desde niño, nos introduce
a su visión de las cosas. Sabe despertar la curiosidad de quien
lo lee. Invita al análisis y a la reflexión sin forzarnos
y hace evidentes sus creencias sin negar las del lector. No hay violencia,
sino audacia.
Lector
desde corta edad, culto y con amor al arte, Paco Ignacio Taibo I, posible
descendiente de aventureros checoslovacos, ha conseguido a lo largo de
su vida realizar lo que le gusta: escribir. Y con sinceridad se presenta
a sí mismo tal como es, sin máscaras ni palabras rimbombantes.
Su redacción es pulcra y no por ello falta de naturalidad. La mezcla
de diálogos con la narración le dan vida al texto y lo hacen
ameno. El hombre sin corbata... es un libro interesante por su estilo,
por la profundidad de sus asuntos y por la manera en que los trata.
Taibo I va de la subjetividad a la objetividad,
de la realidad a la fantasía y de la crudeza a la risa; nos muestra,
sin sentir casi, los contrastes y, sin la necesidad de evocar los sentimientos
con cursilerías o mojigaterías, conduce al lector por una
gama de emociones, con sutileza bien manejada. Elige contar su historia
a través de un yo constante que narra, nos interesa, nos envuelve
en un sinfín de experiencias en un vaivén entre lo real y
lo ficticio que nos llama, que nos atrapa desde las primeras líneas.
El lector se deja llevar por este fluir de palabras, hábilmente
manejadas con humor, con sentido crítico e inteligencia.
Con una larga trayectoria como periodista
y escritor, nutrida por sus lecturas y viajes y por la convivencia con
personajes del medio artístico, político y literario, Taibo
I se ha formado un criterio propio y una cultura vasta, manifiesta en su
amplia obra publicada, de temas diversos. El autor de El hombre sin
corbata y otras fabulaciones nos invita a la reflexión y al
análisis a través de su juego constante entre inocencia y
malicia en este viaje por sus recuerdos
n
o v e l a
El
territorio inabarcable
Leo
Mendoza
|
Gao
Xingjian,
La
Montaña del Alma,
Ediciones
del Bronce,
Barcelona,
España, 2000. |
El Premio Nobel de literatura 2000 se concedió
al escritor chino nacionalizado francés Gao Xingjian,
de quien poco o casi nada se había traducido al español.
Este año, bajo el sello de Ediciones del Bronce, apareció
La Montaña del Alma, una novela que, para muchos, es una
obra maestra. Y el juicio quizá no sea equivocado.
Xingjian quien al parecer escribe
directamente en francés, al igual que lo hace ahora Milan Kundera
ha sacado partido de la libertad que el género posee desde sus mismos
inicios: en ella cabe todo y de todas las formas posibles. La cuarta de
forros insiste en que es un peregrinar por la historia de China tanto como
un retrato de sus costumbres y sus leyendas, a la par que reflexiona sobre
la literatura actual y lo que fue la Revolución Cultural. Pero más
allá de todo esto, de la cantidad de información y de historia
que conlleva, la novela posee una característica fundamental: como
muchas de las grandes historias de nuestro tiempo, es el retrato del desasosiego
que vivimos, del desarraigo vital quizá finisecular a
todas luces existente.
Xingjian forma parte de esa gran generación
de escritores viajeros que hicieron posible reconocernos como nuevos nómadas.
Su narrador él mismo convertido en personaje viaja por
la China contemporánea sin saber a dónde se dirige, quizá
a esa mítica Montaña del Alma donde es posible curarse de
todos los males del espíritu, semejante a la montaña de Thomas
Mann donde la enfermedad de otro fin de siglo la tuberculosis
abría las puertas hacia una nueva sensibilidad.
Gracias a estas divagaciones terrestres
que se corresponden con una escritura errática que cambia de
personajes y aun de historias de un capítulo a otro, Xingjian
ha logrado que la novela se nos presente como un territorio inabarcable,
infinito: la relación amorosa, el juego de la seducción,
la amistad, la vida política en China, la historia antigua y la
moderna, las leyendas, los bandidos, la vida familiar, todo encuentra acomodo
en este enorme fresco que es La Montaña del Alma.
Como en Extraños en un tren
novela de Patricia Highsmith que Hitchcock llevó a la pantalla,
el detonante de la historia es un encuentro casual entre dos viajeros.
El narrador conoce así la leyenda de la Montaña del Alma
y decide encontrarla. En el camino conoce a una mujer quien también
escapa. Las siguientes noches estarán llenas de historias, diálogos,
cambios, recuerdos. Lo único que queda es la aventura misma del
lenguaje y el hecho de escribir la novela como un acto de resistencia:
lucha dice Kundera contra el olvido.
El narrador lo dice claramente: es un refugiado
desde su nacimiento y quizá por ello busque un lugar donde establecerse
y por ello también va dejando sus huellas en esos amores imposibles,
cargados de deseo pero ajenos a una verdadera relación.
La Montaña del Alma es una
enorme novela-río que, a diferencia de las grandes novelas chinas
clásicas, no cuenta las peripecias sin fin de una familia sino que
divaga, viaja de un lugar a otro, salta de tema en tema y de acontecimiento
en acontecimiento para levantar el mapa de la desesperanza. En todo caso,
el narrador salta de la historia y las leyendas chinas a su propia vida,
o a lo que parece ser su vida.
De hecho, casi al final de la novela se
encuentra con un crítico oficial y el resultado es la incomprensión:
ante la monumentalidad de la obra y sus pretensiones, porque él
no hace más que "embriagarse con la utilización del lenguaje,
para contar cosas sobre la mujer y el hombre, el amor, la pasión
y el sexo, la vida y la muerte, el alma y la alegría, y el sufrimiento
y el placer del cuerpo humano en su carne mortal, y el hombre en sus relaciones
políticas y la huida del hombre frente a la política y la
realidad de la que no es posible escapar y la imaginación al margen
de lo real y cuál de las dos es más verdadera..."
Con todo esto, no es casual el premio concedido
a Xingjian ni que ésta sea considerada como una de las grandes novelas
modernas de China
Exposición tesoros de Oaxaca.
Dos colecciones pertenecientes a las culturas zapoteca y mixteca. La tumba
7 de Monte Albán y cuarenta y seis objetos encontrados en las tumbas
de Zaachila (adornos de oro, plata, cobre y jade; máscaras de madera
con mosaicos de turquesa y vasijas de cerámica), son reunidos por
primera vez para su exhibición. La muestra puede verse en la sala
Culturas de Oaxaca del Museo Nacional de Antropología hasta el 9
de noviembre de 2001.
Fotografía en Oaxaca.
Viaje
al paraíso, apuntes fotográficos de Oaxaca, del fotógrafo
Rubén Pax, en la Casa de la Cultura de Juchitán, ubicada
en Belisario Domínguez, esquina Colón. La exposición
podrá visitarse hasta el 14 de septiembre de 2001.
IV Bienal de Pintura del Sureste,
"Joaquín Clausell 2001". Convocan la Universidad Autónoma
de Campeche a través de su Dirección de Difusión Cultural,
y el gobierno del estado por medio del Instituto de Cultura de Campeche.
Podrán participar todos los pintores nacidos y residentes en los
estados de Campeche, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y
Yucatán. El tema es libre. Los concursantes deberán enviar
un máximo de tres (3) obras debidamente enmarcadas. Las obras no
deberán exceder de 180 cm por lado. Para los formatos irregulares
se tomarán estas medidas como punto de referencia. La técnica
queda a juicio de los autores. La recepción de las obras queda abierta
hasta el 21 de septiembre de 2001. Las obras deberán entregarse
o enviarse a la siguiente dirección: IV Bienal "Joaquín Clausell",
Universidad Autónoma de Campeche, Centro Cultural y Deportivo Universitario,
Av. Agustín Melgar s/n, CP 24030, Campeche, Cam. En caso necesario
funcionarán como centros de registro las direcciones de difusión
o extensión cultural de las universidades públicas del sureste
del país (UABJO, UNACH, UJAT, UNACAR, UV y UADY). Al reverso de
cada obra deberán anotarse los siguientes datos: nombre del autor,
fecha de nacimiento, título de la obra, año de producción,
técnica utilizada, medida (alto por ancho) y avalúo. Asimismo
se deberá proporcionar currículum detallado. Es requisito
del certamen que la realización de las obras sea posterior a 1999
y que no hayan participado en otro concurso. Los gastos de empaque y envío
de las obras a los centros de registro correrán por cuenta y riesgo
de los participantes. Las obras no seleccionadas deberán recogerse
antes del 31 de octubre de 2001. La UAC no se hará responsable de
las obras que no se recojan en el término señalado. Todas
las obras seleccionadas para IV Bienal de Pintura del Sureste "Joaquín
Clausell" se exhibirán primero en la ciudad de Campeche y posteriormente
en otros foros del sureste del país, por un tiempo no mayor de dieciocho
meses a partir de la inauguración de la Bienal. Las obras seleccionadas
no podrán retirarse hasta después de ese lapso. El jurado
calificador estará integrado por personas de reconocida trayectoria
artística e intelectual. Sus nombres se informarán con oportunidad.
El fallo será inapelable y se dará a conocer durante el acto
inaugural en la ciudad de Campeche. Previamente se notificará a
los premiados al tiempo que se publicará en los medios informativos
adecuados. La IV Bienal de Pintura del Sureste "Joaquín Clausell",
será inaugurada en la ciudad de Campeche el viernes 12 de octubre
de 2001 y en la misma fecha serán entregados los premios correspondientes.
Habrá tres premios de adquisición, uno por $35,000, un segundo
por $20,000 y un tercero por $15,000 pesos. El jurado hará una selección
de un máximo de cuarenta obras, podrá otorgar menciones honoríficas,
mismas que se acreditarán por medio de diplomas. Las pinturas que
obtengan premios de adquisición se integrarán al patrimonio
artístico de la Universidad Autónoma de Campeche. Cualquier
caso no considerado en la presente convocatoria será resuelto a
criterio de los organizadores y el Jurado Calificador. |
c
u e n t o
Otra
vuelta de rueda
Gregorio
Palafox
|
Guillermo
Samperio,
La
Gioconda en bicicleta,
Océano,
México,
2001. |
Al inicio de esta nota no daba con alguna
imagen que significara el libro de cuentos La Gioconda en bicicleta,
de Guillermo Samperio. Pensé en la llama de una vela: la vida que
resplandece en tanto consume la materia que le da existencia. Después
en la aurora y el crepúsculo, las visiones evanescentes de oriente
y poniente; en los círculos excéntricos del agua, bamboleo
de caderas y senos; en la rotación terrestre, movimiento telúrico
que une y separa la vigilia y el sueño; en la ensoñación
del árbol, verticalidad que se ramifica hacia los cuatro rumbos
del universo. Sin embargo, como ocurre con los arcanos, el signo estaba
oculto donde no lo podía ver: expuesto a todas luces. El libro de
Samperio tiene como emblemas la mujer y el círculo, representa la
pluralidad y el movimiento: la Gioconda en bicicleta.
Estática o en movimiento, la rueda
de una bicicleta despierta en nosotros imágenes milenarias, renovadas,
como el sol por la mañana: floración del hierro, acierto
de flechas verbales en el centro del poema, célula primordial, sephirot,
eterno retorno, senderos que se cruzan, rosa de los vientos, estrella de
los magos, universos correspondientes. Como la palabra, es flujo y reflujo
de sueños; como el espacio-tiempo, contiene curvas y ángulos.
La rueda de una bicicleta es movimiento perpetuo: su inmovilidad es engañosa,
otra forma de la animación.
Lao-Tsé encuentra en los vacíos
entre rayo y rayo la utilidad de la rueda. Samperio sabe dejar vacíos
para que sean llenados por la imaginación del lector, sabe cuánto
describir y cuánto decir entre líneas. Sus cuentos son, como
lo exige el género, sucesivos, nunca morosos. No analiza a los personajes;
los vemos en acción. Su lenguaje es un juego reflexivo que nos obliga
a rodar sobre un camino cada vez menos sólido hasta que topamos
un espacio evanescente: sublimación del lenguaje, rueda del proceso
alquímico.
Como
en la rueda de la fortuna, algunas veces estamos arriba y otras abajo;
la rueda gira, de modo que lo pasivo y lo activo se alternan, son distintos
momentos de una misma realidad. En "Tus zapatos de tacón rojo y
los cuatro mares" el amor es tocado por los brazos de Kali, lo que antes
fue pasión sensual se torna melancolía y nostalgia. En la
carta 10 del tarot, la rueda de la fortuna, un animal sube y otro desciende:
símbolos de la dicha y la desdicha. "Nieves de Navidad" narra dos
historias que se cruzan; mientras Aurelio Zamarripa, personaje del cuento,
se lamenta por su suerte, Santa Clauses traficantes de drogas festejan
el buen término de sus planes: la fortuna y el infortunio ocurren
simultáneamente.
El cuarto principio de Hermes Trismegisto
establece que todo tiene su opuesto y que este opuesto es idéntico
en cuanto a su naturaleza, sólo difiere en cuanto a su grado. Los
cuentos de Samperio giran en torno a dualidades antagónicas: el
terror y el humor, la ternura y la crueldad, la pasión y la razón,
la vigilia y el sueño. Pero los opuestos se anudan en paradigmas:
los zapatos nos remiten a la gravedad terrestre o a la sensualidad, la
gravedad y la sensualidad a las ventanas o a lo brumoso, y éstos,
a su vez, al sueño o a la sublimación, y así sucesivamente,
de cuento en cuento y de personaje en personaje. Sin embargo, no se trata
de una ecuación algebraica, sino de una rotación de sentidos
y asociaciones que nos llevan de la eternidad del instante poético
a la infinitud de la palabra (por cierto, diversas culturas representan
lo eterno y lo infinito con un mismo arquetipo: el círculo). No
hay una sola palabra que sea sencilla: todas postulan el ilusorio universo
y una memoria compartida. Cada signo emite y remite a otros signos; tarea
interminable, apenas aprehendemos uno, se multiplica y ramifica: hay que
empezar otra vez. Cuando leemos La Gioconda en bicicleta estamos
obligados a ir de la palabra a la crítica porque Samperio no denuncia
ni retrata: critica, en el mejor sentido de la palabra.
El cosmopolitismo de Guillermo Samperio
es yuxtaposición y combinación de distintos géneros,
hace de ellos coincidencia y disidencia: ensayo, cuento y poesía,
en varios de sus relatos, no son géneros aislados sino uno y el
mismo; rompe las fronteras entre narrativa fantástica y realista.
Tzvetan Todorov postuló una teoría de los géneros
considerando el código que rige la realidad literaria. Desde este
punto de vista, encontramos que los cuentos reunidos en La Gioconda
en bicicleta van de un género a otro: de lo extraño de
"El hombre que recogía vasos" a lo fantástico de "La sombra",
pasando por lo maravilloso de "Vandálica, la cinju (Central Independiente
de Juguetes)"; y por otros géneros no considerados por Todorov:
lo real maravilloso de "Plagas", la magia de "El 2000 de Honorato" o el
realismo simbólico de "El círculo del compromiso". Los géneros
narrativos en La Gioconda en bicicleta son rayos que convergen,
se anudan y divergen dentro de un orbe literario.
En la geometría sagrada de Oriente
los distintos aspectos de Dios son representados por el mandala, círculo
dividido por rayos si bien no siempre representados gráficamente,
no por eso menos visibles que significan al cosmos en su relación
con las potencias divinas; para la psiquiatría junguiana el mandala
expresa la totalidad de la psique. Carl Jung señaló que la
mente está conformada por cientos de "yos"; si un hombre es afortunado
podrá conocer, a lo sumo, unos seis de sus "yos". Los proteicos,
en el lapso de una vida, son: un camello, un león y un niño
o un tigre, un león, Garruda y un dragón. El universo (¿o
multiverso?) de Samperio es pasional e imaginativo: diálogo del
hombre con el mundo, de los hombres con los hombres y del hombre consigo
mismo. La tristeza de "El día que no existió" petrifica al
cosmos, forma un tajamar que se agrieta y el desbordamiento del llanto
llena el vacío: desolación de la gárgola. "Desconcierto"
no es tentativa por descifrar el caosmos sino metafísica
de la palabra: las palabras son una presencia, evocación mágica
del otro. El tema de "Descomponga un reloj" es cósmico y metafísico:
coexisten el tiempo milenario de la arena, el dolor, la vejez, el deseo
y la muerte: rueda del karma.
Quedan muchas palabras agitándose
en las turbulencias del tintero. Imposible expresarlas en tan breve espacio;
quizá sea mejor: no conviene adelantar tramas de un libro a cuya
lectura se hace una invitación. No sugiero esoterismo en La Gioconda
en bicicleta, sino riqueza de formas expresivas y una posibilidad de
lectura. Digamos lacónicamente que la realidad de Guillermo Samperio
es como las ruedas de una bicicleta: estallido en movimiento continuo:
viento y fuego. Las imágenes, la multiplicidad de temas y géneros,
los cambios de forma abierta a forma cerrada que hay de un cuento a otro,
fijan algunos vértigos: petrificada lluvia circular: tierra y agua.
Las dos ruedas se generan mutuamente y giran impulsadas por el pedaleo
de una mujer con zapatos de tacón rojo
FICHERO
LOS LIBROS
QUE LLEGAN A NUESTRA REDACCION
antología
La desdicha fue mi Dios,
Manuel Acuña, compilación y estudio de Marco Antonio Campos,
Col. Cuadernos de la memoria, núm. 8, Universidad Autónoma
Metropolitana, México, 2001, 83 pp.
crónica
Fordlandia. Un oscuro paraíso,
Eduardo Sguiglia, Col. El dorado, Editorial Norma, Santa Fe de Bogotá,
Colombia, 2000, 243 pp.
Triunfos y traiciones. Crónica
personal, 1994, Ignacio Pichardo
Pagaza, Col. Tiempo de México, Editorial Océano, México,
2001, 324 pp.
derecho
Un sistema de derecho,
Rex Martín, Col. Filosofía del derecho, Editorial Gedisa,
Barcelona, España, 2001, 509 pp.
ensayo (literario)
La sabiduría sin promesa.
Vidas
y letras del siglo XX, Christopher
Domínguez Michael, Col. Contrapunto, Editorial Joaquín Mortiz,
México, 2001, 351 pp.
Sin cera,
Víctor Manuel Mendiola, Col. Serie diagonal,unam, México,
2001, 287 pp.
ensayo (político)
La política exterior de México
en la era de la globalización,
Federico Novelo Urdanivia, Col. Libros de texto, uam/Plaza y Valdés
Editores, México, 2000, 296 pp.
ensayo (sociológico)
Bobos en el paraíso.
Ni
hippies ni yuppies: un retrato de la nueva clase triunfadora,
David Brooks, prólogo de Vicente Verdú, traducción
de Bettina Blanch Tyroller, Col. Arena abierta, Grijalbo Mondadori, Barcelona,
España, 2001, 296 pp.
Chiapas: Los indios de verdad. Una
visión objetiva de la situación de los indígenas y
de las causas de su marginación,
Laura Bolaños Cadena, Col. Libros para ser más libres, Edamex,
México, 1998, 268 pp.
Jaque a la globalización.
Cómo crean su red los nuevos movimientos sociales y alternativos,
Pepa Roma, Col. Arena Abierta, Grijalbo Mondadori, Barcelona, España,
2001, 342 pp.
filosofía
Filosofía, cultura y diferencia
sexual, Rubí de María
Gómez (coordinadora), Plaza y Valdés/Universidad Michoacana
de San Nicolás de Hidalgo, México,
2001, 229 pp.
Immanuel Kant: política,
derecho y antropología,
Reinhard Brandt, Serie Filosofía Práctica: Tradición
y Crítica, Biblioteca de signos, 6, uam/daad/Instituto Goethe/Plaza
y Valdés, México, 2001, 243 pp.
historia
Tetralogía paraguaya. Historia
y literatura en cuatro tiempos,
Efráin Enríquez Gamón, Col. Los libros, Archipiélago,
México, 2000, 379 pp.
narrativa
Catarsis,
S. Desval, Plaza y Valdés, México, 2000, 145 pp.
La ley secreta,Juan
Nuño López, Col. Reino imaginario, 108, Ediciones Coyoacán,
México, 2000, 162 pp.
La novia de Matisse,
Manuel Vicent, Alfaguara, Barcelona, España,
2000, 259 pp.
La quinta montaña,
Paulo Coelho, traducción de Montserrat Mira, Editorial Grijalbo,
México, 2001, 226 pp.
Mírame a los ojos,
Alberto Huerta y Pilar Alba, Serie Roberto Ramos Dávila. Crónica
Municipal de Zacatecas, H. Ayuntamiento de Zacatecas/Instituto Zacatecano
de Cultura, México, 2001, 131 pp.
poesía
Voces nuevas (XIII Selección),
Inma Arrabal Cano, Celia Bautista, Esther González de la Cera, et
al., Col. Torremozas 149, Ediciones Torremozas, Madrid, España,
2000, 61 pp.
psicología
La pérdida ambigua. Cómo
aprender a vivir con un duelo no terminado,
Pauline Boss, Col. Terapia familiar, traducción de Isabel Campos
Adrados, Editorial Gedisa, Barcelona, España, 2001, 143 pp.
revista
Dialéctica, núm.
33-34, primavera de 2001, nueva época, año 25, textos de
Stefan Gandler, Renato Prada Oropeza, María Noel Lapoujade, entre
otros, Universidad Autónoma de Puebla, México, 190 pp.
Metapolítica,
núm. 18, abril-junio 2001, volumen 5, textos de Ramon Máiz,
José Antonio Crespo, Claudio López-Guerra, entre otros, Centro
de Estudios de Política Comparada, México, 189 pp.
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