Ť Niegan las FARC que murieran 100 guerrilleros tras la ofensiva del ejército
Decomisa la policía colombiana 35 mdd a narcos
Ť El dinero incautado se encontraba escondido en paredes y baños de dos departamentos
Ť Expulsan del país al irlandés Kevin Noel, acusado de tener vínculos con el grupo rebelde
DPA, AFP, REUTERS Y AP
Santafe de Bogota, 25 de agosto. Las autoridades colombianas decomisaron 35 millones de dólares a narcotraficantes, lo cual representa la mayor incautación de dinero en la historia del país.
Por otro lado, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) negaron haber sufrido cien bajas durante la ofensiva que mantiene el ejército en el sur del país, y sólo admitieron cinco muertos en sus filas.
Mientras tanto, el irlandés Kevin Noel Crennan, capturado hace dos días bajo sospecha de tener vínculos con el grupo rebelde, fue expulsado del país.
La policía colombiana, con apoyo de Estados Unidos, incautó los 35 millones de dólares durante un cateo a dos lujosos departamentos del norte de Bogotá, los cuales eran utilizados para actividades relacionadas con el narcotráfico.
El director de la policía nacional, Luis Gilibert, dijo que el hallazgo se circunscribe dentro de la operación Horizonte Tres, que busca desbaratar la poderosa red narcotraficantes Los Mellizos, liderada por los hermanos Víctor y Miguel Mejía Munera, que operan en la costa del Caribe y el departamento de Valle.
Gilibert explicó que la incautación del dinero, que estaba oculto en las paredes y baños de los departamentos, representa un duro revés a las finanzas del narcotráfico, pese a que no se efectuaron detenciones durante el operativo efectuado la noche del viernes y la mañana de este sábado.
La policía aseguró que los hermanos Mejía eran socios de Félix Chitiva, alias La Mica, capturado el lunes pasado y quien es solicitado por el gobierno de Estados Unidos para ser extraditado.
Carlos Lozano, integrante de un comité civil que asesora a los negociadores de paz del gobierno con los rebeldes, dijo que las FARC desmintieron la cifra de bajas proporcionada por los militares, aunque reconocieron la muerte del jefe insurgente Urías Cuéllar.
Lozano, quien integra una misión que formula recomendaciones al gobierno y a la guerrilla sobre la reducción de la intensidad del conflicto y el combate contra los paramilitares, añadió que las FARC consideran que la ofensiva militar en los departamentos de Guaviare, Meta, Guainía y Vichada "hace parte del escalonamiento de la guerra".
Otro de los miembros de la llamada Misión de Notables, Vladimiro Naranjo, resaltó la necesidad de una tregua en el conflicto colombiano, toda vez que el esquema de negociaciones bajo fuego y hostilidades ha hecho crisis.
En declaraciones a radio Caracol, Naranjo expresó que así lo hizo saber a las FARC. "Es un error ?de los rebeldes? subestimar la capacidad de respuesta del Estado colombiano", sostuvo.
Por su parte, la jefatura castrense afirmó que unos 6 mil soldados y la aviación militar tienen cercados en el sureste de Colombia a unos 2 mil combatientes de las FARC, decenas de los cuales habrían muerto y unos 20 han desertado. "Esto va a terminar con una entrega masiva de guerrileros, si es que antes no los traemos en bolsas negras. Sólo cuando el bloque de las FARC esté aniquilado saldremos de la región", sostuvo la víspera el general Carlos Alberto Fracica, encargado de la operación contraisurgente.
A 45 días del vencimiento de la vigencia ilegal de la zona de 42 mil kilómetros controlada por las FARC, Estados Unidos reactivó sus críticas al manejo que los rebeldes han dado a esa región, sede de los diálogos de paz, mientras Bogotá niega haber recibido presiones de Washington para no prorrogarla.
La embajada estadunidense en Bogotá indicó el viernes que las FARC "no han respondido de manera recíproca a los esfuerzos del gobierno por avanzar en el logro de la paz, sino que continúan secuestrando y abusando de las víctimas y realizando actividades de narcotráfico". Pese a todo, Estados Unidos reiteró su apoyo a los esfuerzos de paz del presidente Andrés Pastrana.
En este contexto, el ciudadano irlandés Kevin Noel Crennan fue expulsado del país y viajó a Venezuela, a pesar de que Bogotá comprobó que no violó la ley criminal, pues no mantuvo nexos con la guerrilla ni estaba relacionado con tres compatriotas detenidos previamente bajo sospecha de pertenecer al Ejército Republicano Irlandés (ERI) y entrenar en tácticas de terrorismo a las FARC.
Según el sitio de internet de los irlandeses desaparecidos, Crennan, de profesión ingeniero eléctrico, desapareció de Irlanda desde enero de 1994, cuando se instaló en Barcelona, España, donde consiguió trabajo como profesor de inglés.
En cuanto a las acciones de la segunda guerrilla del país, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el alcalde de la ciudad de Medellín, Luis Pérez, criticó al presidente Andrés Pastrana por suspender los contactos con ese movimiento insurgente, sin prever que desataría una escalada de violencia que en los últimos 18 días dejó seis civiles muertos y 93 heridos, además de daños materiales.
Tras responsabilizarlo de la escalada violenta, Pérez pidió al mandatario adoptar medidas reales para contener los ataques dinamiteros lanzados por el ELN en Antioquia, especialmente en Medellín.