Ť Fracasa intento de asesinato del ejército de Tel Aviv contra dirigente de Fatah
Por "incitar" a la violencia, critica Estados Unidos a alto funcionario del gobierno israelí
Ť El viceministro de Seguridad amenazó con represalias a familias de kamikazes palestinos
AFP, AP, DPA Y REUTERS
Washington, 23 de agosto. El Departamento de Estado estadunidense criticó hoy declaraciones del viceministro de Seguridad Pública israelí, Gideon Ezra, quien públicamente amenazó con que su gobierno tomaría represalias contra las familias de militantes integristas palestinos que cometieran atentados suicidas contra los israelíes, lo que fue calificado por Estados Unidos como una "incitación" a seguir con la violencia.
Philip Reeker, vocero del Departamento de Estado, llamó al gobierno del primer mi-nistro Ariel Sharon a distanciarse de declaraciones hechas hoy por Ezra, quien sugirió que los familiares de atacantes palestinos serían detenidos como medida disuasoria contra la violencia, y que los cuerpos de los kamikazes podrían ser sepultados con piel o sangre de cerdo haciéndolos, de este modo, impuros para la tradición musulmana.
Reeker dijo que estas declaraciones eran "ofensivas y reprensibles, sobre todo cuando provienen de un alto funcionario", y agregó: "Confiamos en que el gobierno is-raelí jamás toleraría una estrategia de este tipo y esperamos que tome distancia inmediatamente de estos comentarios".
Este jueves el ejército israelí trató de ma-tar a Yihad Massalmi, miembro del movimiento palestino Fatah de 42 años, quien sufrió sólo heridas leves cuando un helicóptero lanzó dos cohetes contra su automóvil mientras circulaba en la ciudad cisjordana de Nablus.
Según Radio Israel, los proyectiles no fueron disparados desde helicópteros sino desde tanques en el monte de Eival.
El Ministerio de Defensa israelí anunció que comenzó una investigación sobre por qué falló un intento de matar al dirigente del grupo Hamas, Adnan Alrul, poco antes del ataque contra Massalmi, en el que se tratará de esclarecer si los datos de inteligencia aportados eran falsos y si los cohetes disparados anoche en la franja de Gaza fueron mal dirigidos.
Alrul es considerado por los servicios se-cretos israelíes como el principal fabricante de bombas de Hamas. En un ataque de misiles perpetrado ayer, fue muerto su hijo Bilal, de 23 años.
En tanto, un niño palestino de 11 años murió por disparos de soldados israelíes cerca del campamento de refugiados Jan Yunes, en el sur de la franja de Gaza, en un choque en el que otros cinco jóvenes resultaron heridos, dos de ellos de gravedad.
El ejército israelí dijo que un grupo de palestinos estaba tratando de derribar una reja que separa el campamento de refugiados del asentamiento judío Gush Katif, y que se disparó primero al aire, y después a las piernas, por lo que se estaba investigando si la bala que mató al niño provino, efectivamente, de un arma israelí.
Más tarde un tiroteo en la dividida ciudad cisjordana de Hebrón dejó un saldo de seis palestinos y dos israelíes heridos.
En las últimas horas del jueves el ejército israelí, que usó unos 15 vehículos blindados, efectuó una incursión en el barrio de Abu Sneine, de la misma ciudad, donde fue destruido un puesto policial, según denunciaron fuentes palestinas.
Informes palestinos sobre la muerte de dos personas durante la incursión de Tel Aviv no fueron confirmados.
En tanto, el canciller israelí, Shimon Pe-res, y el presidente palestino, Yasser Arafat, confirmaron hoy su intención de reunirse, probablemente la semana próxima, luego de respectivas visitas en Varsovia y Pekín.
Sin embargo, Arafat afirmó en una entrevista exclusiva concedida a cancilleres de la Liga Arabe desde la capital china, que él está dispuesto a "reunirse con cualquier responsable israelí, a condición de que tenga poder de decisión", y agregó que dicho po-der "está en manos del primer ministro is-raelí, Ariel Sharon, y no en las del canciller Shimon Peres".