SABADO Ť 18 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť Inició el primer Festival Nacional de Trova

Con Marcial, Haro, Soraiz y Elorza se nos echó encima la bohemia

MARIANA NORANDI

Este jueves comenzó el primer Festival Nacional de Trova Contemporánea, organizado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. Troveros y amantes de este género se reunieron en el Museo Nacional de Culturas Populares de Coyoacán para inaugurar "la fiesta de la palabra bella", que a pesar del aguacero estaba repleta.

El encuentro lo abrió el sonorense David Soraiz. Con voz sólida y profunda, este compositor interpretó canciones inspiradas en su vida cotidiana, con marcado tinte existencialista. Sus amigos, su hija o determinados programas de televisión protagonizan algunos de sus poemas. Pero es al tratar el tema de la muerte y el paso del tiempo cuando este autor se desnuda y muestra su más inquieto interior.

Acabada la actuación, Soraiz anunció su tercer disco, titulado Marcando el paso (en su lugar) que lanzará en octubre próximo. Tras media hora de actuación, el turno le correspondió al chiapaneco Pepe Elorza. Este autor, que ha destacado por sus composiciones para películas, cambió el sonido y el estilo escénico. Con mucha influencia de blues y una voz que varía entre lo agudo y lo afónico, Elorza posee un estilo muy personal. Sus canciones son cuentos, historias biográficas que traslada al terreno lírico más intimista. Este chiapaneco dibuja y pinta canciones como si se expresara a través de un óleo. Además de cantar piezas de su autoría, interpretó prosa musicalizada de Cortázar, poemas de Ramón López Velarde, de Rosario Castellanos, y un bello poema de Jaime Sabines titulado Te desnudas igual que si estuvieras sola, tema que en una ocasión cantó en el salón de la casa de Sabines frente a la persona a quien el poeta había dedicado estos versos.

A continuación, Elorza cedió el turno a la guitarra del veracruzano David Haro, que llenó el escenario de guarachas, sones, rumbas y guaguancós. Procedente "del estado musical por excelencia", Haro cantó principalmente al amor y a su tierra jarocha con voz potente, maciza y sabrosa. Nos entendemos bien y Si morir es dormir encendieron a un público que tenía ganas de escuchar pero también de bailar. Acabada su actuación tuvo que hacer un encore a petición de los asistentes para cantar Oremos, dedicada a los trovadores de este festival.

Pero el momento que creó más expectación fue cuando David Haro, antes de abandonar el escenario, pidió que subiera su amigo Marcial Alejando. A dúo interpretaron el tema del defeño Que me lleve la tristeza, y éste comentó con humor: "Gracias a David Haro por invitarme a cantar esta espléndida versión, que escuchándola parece que la compuso él". Este compositor tiene fuerza y mucho temperamento en el escenario. Sus canciones son menos rítmicas que las del veracruzano, pero sus letras son de sorprendente realismo. Es un poeta de fondos más que de formas, que posee una evidente y rica influencia del bolero en su estado más puro. "La primera canción que escribí fue un bolero porque mis papás los escuchaban todo el tiempo. Eran unos bohemios y yo estaba presente ahí", nos comentó. Fruto de esta influencia, las composiciones de Marcial profundizan en el amor y el desamor en un ambiente de tristeza y añoranza.

Con petaca de vino en mano, Marcial se despidió con una canción que conmovió al público. Inspirada en su hija y en todos esos hijos que a determinada edad se alejan de los padres para hacer su propia vida, esta composición emocionó a su propio autor, quien confesó: "mi hija es el amor de mi vida, y mi hijo es mi amor imposible. Esta canción habla de esos hijos que vuelan".

Los trovadores se mostraron contentos con este encuentro, aunque no excesivamente positivos con los resultados que se puedan obtener en el impulso de este género. Pero lo que sí ya se logró, en las casi tres horas que duró la primera jornada de este festival, es demostrar que la trova mexicana está llena de matices, donde cada estado aporta a este abanico trovadoresco su propio color.

Trova hoy

En su tercera jornada, el primer Festival Nacional de Trova presenta hoy a las 12 horas a Gaspar Aguilera en el espacio Conversaciones sobre la trova contemporánea. Poeta, periodista y promotor de la trova en Michoacán, platicará acerca de Trova y poesía.

A las 13:30 horas se llevará a cabo una mesa redonda que expondrá el tema Trova y protección de la obra. La mesa contará con la participación de Ramón Obón, especialista en derechos de autor y en protección de obra artística y literaria; Alejandro Sandoval, representante de la Comisión de Cultura del Senado de la República; Rafael Mendoza, músico y compositor, así como con un representante del Instituto Nacional de Derechos de Autor.

La tarde musical la iniciará a las 18 horas el sonorense Gerardo Peña, quien interpretará temas de su más reciente producción, denominada Torre de Babel. Después actuará el cantautor poblano Carlos Arellano, quien llenará el escenario de un sonido más acústico. Posteriormente, de la mano del yucateco Jorge Buenfil llegará la expresión más latinoamericana de la tarde para acabar con Rafael Mendoza, que cerrará el programa musical con su estilo funk a ritmo de tumbao afroantillano.