VIERNES Ť 17 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť Merrill Lynch espera una recuperación ''vigorosa'' hacia el cuarto trimestre
A menos de 1% recortan en Wall Street las proyecciones de crecimiento para México
Ť Un enfriamiento con baja inflación atemperará daños al consumo: Morgan Stanley
NOTIMEX
Nueva York, 16 de agosto. Tras el estancamiento registrado en el segundo trimestre, varias firmas de Wall Street rebajaron sus proyecciones de crecimiento económico de México para 2001 a menos de 1 por ciento, pero prevén una recuperación hacia finales de año.
El Credit Suisse First Boston recortó su pronóstico de crecimiento en 2001 de 2.3 a 0.95 por ciento, mientras el Deutsche Banc Alex Brown lo bajó de 1.7 a 0.8 por ciento, sobre la base de los resultados del segundo trimestre y la prevista lenta recuperación de Estados Unidos.
La firma ABN Amro la revisó de 1.5 a 1 por ciento, lo que prosigue a la reducción que realizó la correduría Merrill Lynch el pasado martes, de 1.8 a 0.6 por ciento.
El gobierno mexicano anunció el miércoles que la expansión económica de México por 21 trimestres consecutivos había finalizado en el segundo trimestre de este año, cuando la economía experimentó un crecimiento nulo respecto a igual periodo de 2000.
Las cifras se han estado revisando tanto en México como en Wall Street tras el impacto que ha tenido la desaceleración de la economía estadunidense en la demanda de exportaciones mexicanas.
Merrill Lynch espera una recuperación ''vigorosa'' de la economía de México hacia el cuarto trimestre de 2001, en respuesta al mejor desempeño económico previsto para Estados Unidos.
''El consumo continuaría desacelerándose hasta el primer trimestre de 2002, mientras el crecimiento de las exportaciones y las inversiones comenzarán a repuntar de forma significativa en el cuarto trimestre de este año'', apuntó la firma.
Por su parte, la banca de inversión Morgan Stanley Dean Witter espera que la debilidad de la economía mexicana toque fondo en el tercer trimestre, sobre la base de que un enfriamiento acompañado de una baja inflación atemperará los daños al consumo y las inversiones.
Según Gray Newman, economista jefe para América Latina de la firma, ''enfocarse demasiado en la tasa de crecimiento del 2001 lleva implícito el riesgo de ignorar el cambio fundamental de México'', refiriéndose a que esta desaceleración es el resultado del enfriamiento económico de Estados Unidos -un factor externo-, y no de las históricas crisis de fin de sexenio mexicanas.