que Uruguay y cinco más que Colombia, que este jueves enfrenta a Perú.
JUEVES Ť 16 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť Los amazónicos no ganaban en la eliminatoria desde hace nueve meses
Sin brillar, Brasil 2-0 a Paraguay y revive
Ť Marcelinho Paraíba y Rivaldo marcaron los goles para ubicarlo en cuarto lugar solitario
AP
Porto Alegre, Brasil, 15 de agosto. Brasil, que no ganaba un partido en la eliminatoria sudamericana desde hace nueve meses, venció 2-0 a Paraguay y sumó tres puntos de oro para revitalizar sus aspiraciones de clasificarse a la Copa Mundial de Futbol.
Marcelinho Paraíba y Rivaldo se encargaron de anotar los goles brasileños, a los 5 y 69 minutos, respectivamente.
La victoria le permite a la escuadra brasileña asumir la cuarta posición de la eliminatoria en solitario con 24 puntos, tres más que Uruguay y cinco más que Colombia, que este jueves enfrenta a Perú.
Los cuatro primeros se clasifican directamente al mundial y el quinto tendrá que dirimir una plaza en un repechaje con Australia.
Argentina aseguró la clasificación a primera hora tras su victoria de 2-0 sobre Ecuador y marcha al tope de la tabla con 35 unidades. Paraguay es segundo con 26, seguido por los ecuatorianos con 25.
Sin deslumbrar y a veces cediendo la iniciativa a los paraguayos, Brasil sacó un resultado que le era imperioso.
El primer gol no pudo caer en un momento más oportuno y le sirvió a la escuadra verdeamarella para manejar el partido.
El tanto sobrevino tras un pase cruzado del zaguero Belletti desde la derecha, que encontró sin marca a Marcelinho en el poste contrario. El volante remató con la cabeza sin apremio para abrir la cuenta.
Brasil se convirtió en tromba, pero la retaguardia guaraní no cedió y paulatinamente fue neutralizando todo intento de ataque.
Un furibundo remate ensayado por Rivaldo desde 18 metros, pero que el arquero paraguayo José Luis Chilavert manoteó, fue la única ocasión de peligro creada por los brasileños.
Paraguay, por su parte, dependió en demasía de los pases largos al artillero Roque Santa Cruz. Diego Gavilán malogró un par de oportunidades para nivelar el marcador y José Saturnino Cardozo remató desviado al marco.
Tras el descanso, Paraguay atacó con todo en el segundo tiempo y puso a los brasileños contra la pared.
Dio la impresión de que Rivaldo bajó el balón con la mano en una jugada en el área brasileña, pero el árbitro alemán Helmut Krug no sancionó la pena máxima, pese a los airados reclamos de los paraguayos.
Gavilán y Virgilio Ferreira volvieron a fallar a la hora de definir y cuando de las tribunas empezaba a hacerse intensa la rechifla, junto con los abucheos contra la escuadra local, Denilson, que había entrado minutos antes en relevo de Marcelinho, cambió el panorama del partido.
En una sensacional maniobra individual por el lado izquierdo dejó desparramado a Pedro Sarabia y luego centró a Rivaldo, que dejó atrás su marcador y de cabeza sentenció el 2-0.