Ť Derechos de maternidad y paternidad, entre los tópicos novedosos

Partiría de 14 capítulos la negociación para la reforma a la Ley Federal del Trabajo

Ť El establecimiento de un juicio sumario, previo a un despido; la eliminación de ''rigideces" laborales y la implantación de ''holdings", entre los temas de la agenda

ELIZABETH VELASCO C.

En el temario para la reforma laboral que negocian los sectores productivos, con la mediación de la Secretaría del Trabajo (STPS), la agenda parte de 14 capítulos generales en los que se introducen aspectos no considerados en la actual Ley Federal del Trabajo (LFT) y que durante años han causado desavenencias y la oposición de diferentes grupos sindicales.

La eliminación de "rigideces" laborales; el establecimiento de intermediarios y la sustitución patronal; aprobación de los contratos temporales, a prueba y de aprendizaje; establecimiento de un "juicio sumario, previo" a un despido laboral; revisión de la reglamentación para el reparto de utilidades y el establecimiento de "holdings" para el reparto, son algunos de los temas introducidos en la agenda por los sectores productivos en la mesa central de diálogo para la modernización de la LFT.

Lo anterior se desprende del "marco conceptual para la modernización y actualización de la reforma laboral", editado por la STPS y base de las negociaciones entre los sectores productivos para la reforma laboral.

Aun cuando el documento, que obra en poder de este diario, señala que todavía es una propuesta de temario, sin duda los tópicos incluidos son los de mayor interés para poner a tono la LFT con la "nueva realidad" implantada por la economía globalizada.

En el capítulo de la huelga, por ejemplo, se propone definir varios tipos: la suspensión de actos por emplazamiento; los requisitos de "fondo y forma"; el mantenimiento de los servicios "esenciales" durante la huelga; la requisa, que incluye a aquellos trabajadores que continuarán prestando servicios y competencia para su designación, y el "arbitraje necesario", entre otros.

Temas novedosos son aquellos del trabajo de "mujeres y padres de familia", que incluyen los derechos de "maternidad y paternidad"; flexibilidad de periodos pre y posnatales, así como los permisos con goce de sueldo para el padre y la madre, incluyendo casos de adopción.

En torno a las relaciones colectivas de trabajo, se plantea redefinir las relaciones entre sindicatos y Estado, se enuncia la democracia sindical interna, y de los contratos se plantea la negociación por rama de industria, entre otros aspectos.

Como preámbulo a la agenda se establece en el marco conceptual que la referida modernización deberá tener como criterio rector "la persona humana, centro y justificación de toda norma de derecho", dejando pasar el sustento colectivo y social de las relaciones laborales, en opinión de la Unión Nacional de los Trabajadores (UNT).

Así, se plantea una "legislación laboral para la persona". Y para definirlo -y no quede duda- se recurre "al bello concepto de personas, acuñado por Miguel de Unamuno: el hombre -y la mujer- concreto, de carne y hueso. El que nace, sufre y muere. El que come, bebe y juega. El que, en fin, sueña, piensa y quiere".

También es notoria la propuesta de eliminar "aquella vieja ideología" que cimentaba el derecho del trabajo en el concepto de la "lucha de clases", y propone superarlo "en atención a los cambios que han modificado el rostro de la sociedad contemporánea en el mundo entero".

En contraparte, se señala la necesidad de una ley "promotora de la empresa como fuente de trabajo", y en ese tenor se sugiere la "promoción, el fortalecimiento y la conservación de la fuente de trabajo". En otras palabras, "la empresa exige la solidaridad entre todos aquellos que forman parte de ella para subsistir: no puede prosperar sino en las personas que la integran y gracias a ellas y a su acción común".

En esos términos, es vista como "la unidad de convivencia donde el trabajo, la dirección y el capital tienen, cada uno, un lugar propio y específico que merece idéntico respeto".

Dicho temario y marco conceptual ha sido cuestionado por la UNT, la cual propone reorientarlos e incluir otros temas a la agenda.

Justamente esa central sugiere eliminar la referencia "fin de la lucha de clases" o el señalamiento de que la ley (actual) buscaba una "guerra sin cuartel". Asimismo hace énfasis en que frente a la globalización se requiere una nueva ley que posibilite "la gobernabilidad democrática, sustenda en el estado de derecho y en el carácter irrenunciable de los derechos establecidos en la ley, la participación de los trabajadores y de sus sindicatos en los espacios de decisión de la empresa, con derecho a la información y una relación de trabajo sustentada en la estabilidad laboral, la capacitación, la productividad y salarios vinculados con éstas".

Esto, dice la UNT, debe quedar expresamente establecido en ese punto del documento (una legislación laboral frente al cambio). Además, propone incorporar a la agenda temas relativos a la jornada laboral, seguro de desempleo; representación obrera legítima; concepto de empresa y responsabilidad de propietarios; productividad y distribución de beneficios; medidas para evitar la intromisión patronal en la vida sindical; promoción del desarrollo educativo del trabajador; derecho a la información; trabajo a domicilio y trabajadores de confianza; revisión del marco constitucional en materia de salarios mínimos y elementos vinculados, entre otros.

La central propone que esa reforma sirva de base para impulsar un acuerdo nacional para la recuperación económica y el desarrollo social, pues "la construcción de un sistema productivo competitivo no es compatible con el actual modelo económico".