Lunes en la Ciencia, 13 de agosto del 2001
PARA LEER
Cuadernos de Nutrición Revista Fomento de Nutrición y Salud AC Volumen 24, núm. 4 Julio/agosto de 2001
Los investigadores Agustín López Munguía y Jaime Padilla Acero, del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México, publican en este número el artículo titulado ƑQuieres saber si comes basura? o šCuidado con lo que lees!, con el propósito de que el público consumidor analice y reflexione sobre algunos conceptos que normalmente son "satanizados" sin ningún fundamento científico. Con este ensayo los académicos de la UNAM responden al libro La basura que comemos: transgénicos y comida chatarra (Editorial Grijalbo, 2000), cuyo autor es el caricaturista Eduardo del Río, mejor conocido como Rius. Debido a que en estas mismas páginas dimos a conocer el citado libro (Lunes en la Ciencia, No. 153, 4 de diciembre del 2000), en esta ocasión nos referiremos in extenso al artículo de los doctores López Munguía y Padilla Acero, quienes se refieren a un sinnúmero de errores cometidos por Rius, tanto en el uso de términos, como de traducción y de conocimientos. En opinión de los investigadores, el caricaturista muestra un profundo desconocimiento de la química al utilizar, por ejemplo, términos como "hidrázico maléico" o "propyleno glicosado" que no aparecen en ningún texto de la materia. López Munguía y Padilla Acero señalan que en el libro se "expone una serie de datos incompletos, suposiciones y confusiones graves en torno a la genética, la biotecnología y aún sobre evolución biológica y principios de ecología. Todo para condenar anticipadamente a los alimentos transgénicos dejando una sensación de desprecio hacia el conocimiento científico y su aplicación para entender y resolver problemas productivos en el área alimentaria, de energéticos y de recursos naturales". Un botón de muestra: ante la afirmación de Rius cuando escribe que "todos los aditivos son hijos de probeta, totalmente artificiales y ajenos a nuestro organismo", López Munguía y Padilla Acero indican que "Rius parece ignorar que todo lo que comemos es ajeno a nuestro organismo. Al llegar a la página 114 Rius empieza su postura en relación a los aditivos, pero dentro de los que considera riesgosos, incluye nada menos que a la lactosa (pág.32), con lo que el caricaturista "ignora que ésta ha estado siempre en la leche y sólo en la leche; y si es tan peligrosa Ƒqué recomendar a las madres que actualmente amamantan a sus hijos, pues se sabe desde el siglo pasado que la leche materna también contiene lactosa?" De la misma manera los especialistas aclaran que el uso de clamatos no está permitido en México y que hace años dejó de usarse plomo en la soldadura de las latas entre otras muchas precisiones. En opinión de López Munguía y Padilla Acero, "quien escribe de ciencia y tecnología adquiere una responsabilidad", máxime si se trata de un personaje leído y reconocido. Difundir temas científicos debe ser un acto responsable y documentado, en el que intervenga el compromiso de investigar y tratar de brindar información desde el punto de vista más objetivo que se pueda. En atención a lo anterior, si en esta sección dimos a conocer el libro de Rius, asumimos la responsabilidad de difundir ahora las críticas a las que se ha hecho merecedor (Patricia Vega). |