RUTA SONORA
Complot: cinco años de riesgo e independencia
Ť Patricia Peñaloza
CONSPIRANDO EL REVENTON, colapsando la monotonía editorial, el quinto aniversario de la revista Complot nos agarró la noche del jueves buceando entre globos metálicos, inundada la pista del Salón 21 por juventudes rocanroleras y electrónicas a ritmo de Nortec, y por señores raros de traje (¿anunciantes, empresarios, colados, perdidos?), quienes dieron el toque kitsch a la fiesta; escenario y rasgos similares a lo que esta publicación capitalina ofrece mes con mes.
TODO MUNDO ESTA ahí. Ese todomundo chilango que siempre somos los mismos, pendientes de lo nuevo y/o contemporáneo en música, reventón y cultura pop con algo de neuronas.
NORMA LAZO, COMPLOTADORA mayor, luce gozosa junto con Silvia Guillén, compañera de guerrilla editorial. Alambres de púas e instalaciones caóticas, fuertes fotografías de la frontera norte -muestras de Carlos Aguirre, Enrique Jezik, Federico Gama y Vicente Razo, con curaduría de Lorena Wolffer-, reciben a los cerca de dos mil invitados; fiesta dedicada "a quienes corren riesgos, le tienen medido el calibre a las palabras, corren en medio de desafiantes rutinas en esta vorágine de concreto... a quienes abren Complot y pueden descifrarla más allá de las palabras y complotan sobre los derechos que la creatividad no debe perder en nuestra sociedad", reza un impreso de bienvenida.
Y ES QUE si se habla de Complot, se habla de riesgo continuo. Dice Norma entre el punchis norteño que mantuvo feliz a la concurrencia: "Cuando iniciamos sentíamos que iba a ser muy difícil mantener una revista de este tipo en el medio comercial. Llegar a cinco años con la cantidad de patrocinadores que tenemos y con tan buena respuesta del público, es significativo. ¿A qué lo atribuimos? A que nos preocupamos por ofrecer un empaque vendible, comercial, en cuanto a forma: bien impreso, buen papel, cuatro tintas, bien diseñado, bien expuesto, bien distribuido. Y con esa envoltura, brindar un contenido inteligente. Hace seis años era difícil hallar una revista así. Un contenido bueno venía en una revista fea, mal hecha, y una revista bien acabada tendía a ser tonta, frívola. Quiero decir, en México. Ya luego vino un boom de revistas bien hechas con contenido de igual nivel. Pero cuando aparecimos, lo que hacíamos era considerado una estupidez".
COMPLOT, DE CORTE MONOTEMATICO, ha tratado en sus 54 números, tópicos que van del rock mexicano, la animación japonesa, el cómic, la televisión y el cine, hasta el terrorismo, las revoluciones, el poder, la religión, las adicciones, la homosexualidad o el número de agosto sobre racismo. Sus páginas han alojado a colaboradores (escritores, artistas plásticos, fotógrafos, diseñadores, músicos) como Luis Villoro, Sergio González Rodríguez, Naief Yehya, Pepe Rojo, Eniac Martínez, Adolfo Pérez Butrón, Carlos Somonte, Edgar Clement, Jorge Díaz Grajales, Ambra Polidori, Rafael Tonatiuh, Martín Errecaborde, Clarisa Moura, Mónica y Nacho Peón, Osvaldo Cortez, entre muchos otros.
NORMA DEFINE EL sello de Complot como un medio con ensayos y artículos inteligentes, en un formato digerible: "No es que queramos darle papilla a la gente porque pensamos que es tonta. Me refiero a que lo publicado trata de ser profundo pero ameno, divertido, fresco, alejado de la postura catedrática, pesada, aburrida".
EN CUANTO A LA evolución de las revistas en México, la también escritora señala que hace seis o cinco años existía más preocupación por sacar una revista exitosa, que fuera a vender mucho, imponiendo mercado. Ahora, dice, es al revés: "siento que los chavos están editando lo que ellos quieren, para que las revistas mismas creen su propio mercado". Respecto de la evolución de Complot, expresa que sus artículos son cada vez más sesudos: "A algunos lectores no les gusta, dicen que antes era más desmadrosa. Pero yo siento que sí sigue siéndolo. Además, antes nos leían sólo chavitos, ahora nos lee gente de hasta 35 años".
ENTRE LOS NUMEROS que más polémica y/o éxito han causado, está el llamado Gay parade (sobre homosexualismo) y el titulado Salvación (sobre religiones de todo tipo, desde el catolicismo hasta el Heaven's Gate): a la redacción llegaron correos amenazadores: "Ahí es donde ves la cerradez de la gente", dice Norma.
Y COMO NUEVO proyecto, la editorial independiente que produce Complot (Guillén Mexicana SA de CV) emite Líbido, revista lésbico-gay (a la venta en Vips y Tower Records) que busca "atender a un nicho desperdiciado; un producto que también esté bien impreso, bien hecho, a diferencia de otras publicaciones para ese mercado, sí le vemos posibilidades comerciales y de crecimiento editorial. Esperamos que tenga el impacto de Complot en sus inicios", dice la editora.
LAS PIERNAS SIGUEN deslizándose sabrosamente mientras Fussible, Bostich y Terrestre operan con maestría hipnótica sus maquinitas, a ritmo de redoba, tuba, acordeón y güiro sampleados, delante de una pantalla con imágenes tecnológicas, minimales. Gente de medios, periodistas, managers, A&R's, músicos, secres (roadies), diseñadores, arquitectos, modelos, publicistas, locutores, la pasan bomba. Aquí y allá pasean integrantes de Café Tacuba, La Lupita, Santa Sabina, La Barranca, Panteón Rococó; fresas, reventados, chicos cools y señoras aburridas. Un ruco trajeado se vuelve loco en la pista, danza frenético el electrónico ante las miradas atónitas de los jovencitos. Todomundo... complotando la noche.