SABADO Ť 11 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť Acusa la ANP a Tel Aviv de abandonar "unilateralmente" los acuerdos de paz

Condena EU la toma de la sede del gobernador palestino en Jerusalén

Ť Es una medida "permanente" la ocupación de la Casa de Oriente, dicen las autoridades israelíes

Ť Critica el gobierno de Washington el ataque a una comisaría de la ciudad cisjordana de Ramallah

AFP, REUTERS, DPA Y AP

Washington, 10 de agosto. Estados Unidos condenó este viernes que Israel haya tomado la Casa de Oriente, símbolo de la presencia palestina en Jerusalén este y sede del go-bernador palestino de la ciudad, y criticó también el ataque contra un cuartel de la policía palestina en la ciudad de Ramallah.

mideast_israe_palestiniansAmbas acciones del gobierno is-raelí fueron una represalia por el atentado suicida de la víspera en el que murieron 16 personas, incluido el kamikaze palestino, de acuerdo con el balance oficial más re-ciente. Fuentes oficiales israelíes aseguraron que la toma de la Casa de Oriente es una medida "permanente" del gobierno israelí.

Mientras tanto, el presidente es-tadunidense, George W. Bush, dijo estar "frustrado" por la escalada de violencia en Levante y declaró que el presidente palestino, Yasser Arafat, debe "hacer más" para re-ducir la violencia.

Por su parte, Arafat advirtió que los últimos ataques del ejército israelí "constituyen una importante escalada y entran en el marco de un plan infernal (israelí). Todo el mundo debe comprender que los ataques nos hacen más fuertes y más decididos".

Arafat hizo estas declaraciones mientras inspeccionaba el cuartel policial destruido el jueves por aviones de combate F-16.

El asesor de Arafat, Ahmed Ab-del Rahman, advirtió a su vez que "el pueblo palestino se ha quedado sin otra opción que la de escalar la resistencia y la intifada para liberar a Jerusalén y recuperar la Casa de Oriente, y todas las otras instituciones palestinas".

La Autoridad Nacional Palestina (ANP) acusó al gobierno de Tel Aviv de abandonar "unilateralmente" los acuerdos con los pa-lestinos al cerrar la simbólica Ca-sa de Oriente.

En un comunicado difundido hoy por la agencia oficial Wafa, la ANP sostuvo que "las agresiones israelíes muestran claramente las verdaderas intenciones del gobierno (del primer ministro) Ariel Sharon, que pretende no sólo entorpecer el proceso de paz, sino denunciar todos los acuerdos firmados estos últimos años".

Piden intervención internacional

También en un comunicado, los responsables de la Casa de Oriente demandaron una intervención internacional para proteger el proceso de paz, y exigieron la salida inmediata de ejército israelí del inmueble, donde este viernes fue colocada la bandera de Israel.

Además de la Casa de Oriente, Israel cerró otras 12 oficinas pa-lestinas en Jerusalén este, entre ellas la sede de la ANP en el su-burbio de Abu Dis.

Ocho policías palestinos de la Casa de Oriente fueron detenidos, y siete de ellos fueron puestos en libertad, mientras que el responsable de la seguridad, Sami Sarhan, permanecerá en prisión preventiva después de que las autoridades israelíes dijeron que se halló en poder del encargado una ametralladora y un cargador.

Un portavoz militar israelí señaló que "nuestras fuerzas invadieron el edificio del gobernador pa-lestino porque albergaba servicios palestinos de seguridad que no tienen derecho a operar en esa zona bajo control israelí de seguridad".

mideast_israel_palestin_ecaSegún la televisión estatal israelí, Sharon afirmó que la ocupación de la Casa de Oriente era "para siempre", en una reunión el jueves con su gabinete de seguridad, en tanto que el ministro de Seguridad Pública israelí, Uzi Landau, declaró esta noche que la medida de ocupación "es permanente".

La Casa de Oriente, que comenzó a funcionar en 1991, es el símbolo de las aspiraciones palestinas a un Estado independiente con Je-rusalén este como capital. Israel sostiene que Jerusalén su capital "indivisible y eterna".

El vocero del Departamento de Estado estadunidense, Richard Boucher, advirtió que las acciones de represalia israelíes de este jueves son "una seria escalada política" y urgió a las dos partes a "de-tener las incitaciones a la violencia y las provocaciones".

Boucher subrayó que estas ac-ciones "representan una seria es-calada política que mina la fe y la confianza en una salida negociada para este conflicto e incrementa el riesgo de que se deteriore la situación política".

El presidente egipcio Hosni Mu-barak descartó la posibilidad de una guerra árabe-israelí y pidió a Sharon a que convoque el cese de la violencia, y en Líbano el ministro de Información, Ghazi Aridi, saludó el "gran papel" de Hamas, que junto con Jihad Islámica se atribuyó el atentado del jueves.

Rusia exigió a los palestinos e israelíes que reanuden sus esfuerzos para llevar la paz a la región, mientras Italia demandó a las partes en conflicto "dar muestras de buena voluntad y realismo".

Decenas de israelíes asistieron al entierro de cinco miembros de una familia que murieron en el atentado suicida en una pizzería.

Máxima alerta en Israel

Mientras, las fuerzas de seguridad israelíes se encuentran en estado de alerta máxima ante la posibilidad de un nuevo atentado, toda vez que el ataque del jueves fue reivindicado tanto por Hamas como por Jihad, por tal motivo no se descarta que dichas organizaciones hayan preparado dos atentados separados.

Hamas, por lo pronto, afirmó que su militante Izzedine al Masri fue el autor del ataque.

Unos 600 palestinos realizaron manifestaciones antisraelíes en Ramallah y Nablus. Una protesta similar se realizó en Teherán.

En la franja de Gaza ocho palestinos resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, durante enfrentamientos con soldados israelíes, mientras en Cisjordania el ejército israelí disparó misiles antitanque contra un puesto de control en la localidad de Betunia; no se informó de víctimas.

Asimismo, unidades militares israelíes penetraron cerca de la ciudad de Gaza y destruyeron un puesto de la policía. También dispararon contra varias viviendas sin causar víctimas.

Un sondeo de opinión del diario israelí Maariv reveló que 62 por ciento de los ciudadanos de ese país se opone a un ataque militar de largo alcance contra la ANP.