Ť El gobierno los atribuye a la guerrilla del ELN
Atentados en Colombia; cinco muertos y 39 lesionados
Ť Probado que no tienen voluntad para la paz: Pastrana
AFP Y REUTERS
Santafe de Bogota, 9 de agosto. Tres niños muertos y 35 adultos heridos dejó esta madrugada un atentado en el departamento de Antioquia, que las autoridades atribuyeron a la segunda fuerza guerrillera de Colombia, el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Horas más tarde la explosión de un coche-bomba dejó dos muertos y cuatro lesionados en el poblado de Gramalote, en el norteño departamento de Santander, en otro hecho del que las autoridades responsabilizaron también al ELN.
Estos atentados ocurren luego de que el gobierno suspendió con con ese grupo armado, el pasado martes, las gestiones de paz con las que se buscaba iniciar una negociación formal.
"Pusieron una carga explosiva subterránea (aparentemente en el sistema de alcantarillas), pero calcularon mal. En vez de que estallara la estación de policía, afectó a las familias y las casas cercanas", dijo una vocera de San Franciso, el poblado atacado en el noroccidental departamento de Antioquia.
La acción atribuida al ELN, que la víspera anunció su retiro de las conversaciones de paz con el gobierno del presidente Andrés Pastrana, destruyó además 27 viviendas, según el coronel Guillermo Aranda. El grupo armado no reivindicó el ataque ni negó haber sido responsable.
Pastrana aseguró que el ataque demuestra que el ELN no tiene voluntad de alcanzar la paz a través de la negociación política. "Ellos son los que se están alejando de la posibilidad de hacer la paz", agregó el mandatario, quien el martes justificó la suspensión de los contactos con el grupo guerrillero debido a que ese grupo planteó "nuevas exigencias", que no detalló, como condición para el diálogo. La víspera, Pastrana aseguró que la fuerza pública ha tomado todas las precauciones para repelar una eventual ofensiva del ELN.
Por su parte, los paramilitares de ultraderecha de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) llamaron al ELN a negociar la paz directamente con ellos, al afirmar que están derrotados.
"No han entendido ustedes, señores elenos, que su negociación es con nosotros, quienes los hemos enfrentado reduciéndolos a su mínima expresión", señaló una carta de los paramiltares enviada por Internet a agencias de prensa.
"Ustedes tienen que aceptar que el Estado no puede despejar un territorio donde él mismo no está presente", señaló el comunicado de los paramilitares, acusados de cometer graves violaciones a los derechos humanos, en alusión al departamento de Bolívar.
Entre tanto, el director del Departamento Nacional de Planeación, Juan Carlos Echeverry, estimó hoy que los grupos guerrilleros colombianos tienen ingresos anuales por 576 millones de dólares, que proceden en su mayoría de actividades relacionadas con el tráfico de drogas.
Según Echeverry, 41 por ciento de los ingresos proviene del cobro de impuestos y gravámenes sobre el narcotráfico, 28 por ciento de robos y extorsiones, 19 por ciento del pago de secuestros y 6.5 de inversiones y 2 por ciento de otras actividades.
Por otro, lado, la representación en Colombia de la Organización de Naciones Unidas para los derechos humanos instó hoy al gobierno de Pastrana, las guerrillas y los paramilitares a excluir a las comunidades indígenas del conflicto armado de casi cuatro décadas.
Según la Organización Nacional Indígena de Colombia, al menos un líder indígena es asesinado cada semana en el país, donde hay 85 grupos nativos.