Ť Se celebrará del 16 al 19 de agosto en el Museo de Culturas Populares
Reunirá a dieciséis cantautores el primer Festival Nacional de Trova
Ť Pepe Elorza, David Haro, Jorge Buenfil y Marcial Alejandro, entre los participantes
Ť Realizarán mesas de análisis donde reflexionarán sobre la problemática de esta expresión musical
Dieciséis trovadores de diversos estados se unirán por primera ocasión en un encuentro que combina la reflexión, la formación musical y la expresión artística: el primer Festival Nacional de Trova.
A celebrarse del 16 al 19 de agosto en el Museo de Culturas Populares, el festival será el punto de reunión de cantautores como los potosinos David Soraiz y Gabino Palomares, el chiapaneco Pepe Elorza, los capitalinos Marcial Alejandro, Rafael Mendoza y Armando Rosas, el veracruzano David Haro, el sonorense Gerardo Peña, el poblano Carlos Arellano, el yucateco Jorge Buenfil, el jalisciense Pancho Madrigal, el bajacaliforniano Daniel Tuchmann, los veracruzanos Armando Chacha y Roberto González, y los oaxaqueños Víctor Martínez y Gustavo López.
El primer Festival Nacional de Trova se anunció en conferencia de prensa, donde estivieron presentes Griselda Galicia, directora general de Culturas Populares e Indígenas del Conaculta; Armando Chacha, director de Desarrollo Municipal y Regional de la misma institución, y los trovadores David Haro, Gerardo Peña, Gabino Palomares, Gustavo López y Rafael Mendoza.
''Un esfuero inédito''
Con la participación de artistas que se caracterizan por su pertenencia a la generación de los años 50, por sus reconocidas trayectorias, por su calidad poética musical y por su abundante producción discográfica que batalla con los estereotipos de la mercadotecnia, el Festival Nacional de Trova constituye "un esfuerzo inédito" porque no sólo se centrará en lo musical, sino que permitirá la reflexión a través de mesas de análisis de las principales problemáticas de los trovadores, como son sus relaciones con los medios de comunicación, con los productores discográficos y con los legisladores, coincidieron sus presentadores.
En su turno, Rafael Mendoza celebró que un evento formativo, artístico y reflexivo como es el festival tenga cabida en la política cultural de la actualidad. Definió a la trova como "la canción en su estado puro". Para el compositor capitalino, que ha sido interpretado por Eugenia León y Oscar Chávez, entre muchos otros, los trovadores de todo el mundo se están revitalizando y los de México no podrían ser la excepción.
Con el encuentro el público definirá una identidad y conocerá los orígenes musicales de la trova, dijo David Haro, para quien la trova es un medio de comunicación y una ciencia "porque es el arte de informar, dar el dato veraz". El compositor, originario de Jaltipán, Veracruz, que musicalizó poemas de Jaime Sabines, Ramón López Velarde y Gaspar Aguilera, opinó que la canción contemporánea habla de una raza que todavía no se quiere reconocer.
Para el trovador oaxaqueño Gustavo López, autor del éxito de Mercedes Sosa Americana, la importancia del festival radica en que el público tendrá la oportunidad de apreciar la diversidad musical de México, el registro de su historia hecha canción. "Nosotros sabremos si hacemos contacto con ellos o sólo estamos soñando."
''Tendrán cabida los jóvenes y las mujeres compositoras''
El primer Festival Nacional de Trova recoge las experiencias de anteriores festivales como ¿Qué onda con la música popular?, organizado en 1982 en el Museo de Culturas Populares; Y vienen cantando, que promovió Socicultur en 1986, y los cuatro Festivales de Trovadores que se celebraron en 1987, 1988, 1989 y 1998 en la ciudad de Oaxaca. La Dirección General de Culturas Populares e Indígenas planea darle continuidad con un festival de trovadores jóvenes y con otro de mujeres compositoras.
"Tenemos mucho que hacer, como institución, para promover la creatividad de estos artistas porque se la han jugado con México construyendo un lenguaje propio", dijo Armando Chacha, quien consideró a la trova como una de las dos corrientes de grandes aportes a la música popular contemporánea; la otra es el rock nacional.
Diferenciados por su finalidad, los cantautores defendieron la necesidad de que la canción vuelva a sus orígenes, a ser la expresión del alma y no del interés mercantil.
Gabino Palomares, quien se incorporó tarde a la conferencia, se dijo impresionado por la explosión de las peñas y por el empuje de los jóvenes compositores que no se encasillan. "Afortunadamente los anticuerpos contra la masificación de los medios de comunicación siguen generándose", dijo y celebró que en este país los cambios no hayan pasado inadvertidos para la canción.
Entrevistada al final de la conferencia, Griselda Galicia dijo que las conclusiones de las mesas van a generar propuestas en el campo de la legislación de derechos de autor y darán elementos para definir una política de acompañamiento y fortalecimiento a la música popular mexicana en todos sus géneros.