JUEVES Ť 9 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť Influir en las políticas públicas de atención a enfermos, entre los objetivos
Diez asociaciones civiles se unen en Redsida
Ť De 40 millones que hay infectados en el mundo, sólo un millón está en tratamiento
CAROLINA GOMEZ MENA
Diez asociaciones civiles se unieron para formar la Red de Atención y Prevención en VIH/sida (Redsida), cuya finalidad será influir en las políticas públicas en la materia, particularmente en lo que se refiere a la "sensibilización" del personal médico de las instituciones sanitarias, así como insistir en que la Secretaría de Salud (Ssa) tome conciencia de que debe incrementar la inversión en la compra de antirretrovirales en por lo menos "300 millones de pesos al año".
En rueda de prensa, Martín Luna, vicepresidente de Redsida, detalló que según cálculos del Centro Nacional para la Prevención y Atención del VIH/sida (Censida), con el incremento de recursos mencionado el sector salud podría tener cobertura de la totalidad de los enfermos no asegurados que carecen de recursos para comprar dichos fármacos, los que se calculan en alrededor de 3 mil 500.
Luego de señalar que en el mundo de los "40 millones de infectados por el VIH, sólo poco más de un millón" siguen tratamientos con medicamentos, comentó que México debe dejar de formar parte de los países que pese a considerar el mal como "emergencia nacional", no tienen políticas para mejorar la dotación de antirretrovirales.
En cuanto al papel de la iniciativa privada, en especial de los laboratorios, Ana María Mata, presidenta de la nueva asociación, dijo que aunado a la dotación de más recursos para la compra de antirretrovirales por parte del gobierno federal, también los laboratorios deben procurar reducir los costos de los fármacos, así como aumentar las donaciones a asociaciones dedicadas a la atención del mal. Al respecto, detalló que Redsida ya cuenta con un banco de medicamentos, los cuales se entregan de manera gratuita a los enfermos que no cuentan con recursos económicos para adquirirlos.
Asimismo, resaltó que otra de las razones para "unir fuerzas" fue "mejorar la calidad de los servicios" que prestan cada una de las 10 agrupaciones asociadas, las que además de proporcionar fármacos, dan atención domiciliaria, hacen visitas a pacientes hospitalizados, proporcionan apoyo sicológico pre y post prueba de VIH, asesoría sicológica, en sicoterapia y en derechos humanos, servicios funerarios y consejería espiritual, entre muchas otras.
En cuanto al estigma y la discriminación en el sector salud, y al repudio que muchos galenos aún sienten en contra de los pacientes de VIH/sida, lo que se traduce en rechazo a atenderlos y en deficiencia en la prestación médica, Luna mencionó que la principal razón que los impulsa a mantener esta actitud es el "miedo al contagio", pues desde que surgió la pandemia en México, debido a que en muchas ocasiones no cuentan con los insumos de protección adecuados, menos de 5 por ciento del personal médico ha sido contagiado de manera accidental al entrar en contacto con sangre contaminada. Para reducir estas prácticas Redsida implementará talleres de sensibilización y respeto a los derechos humanos.
Por su parte, David Murillo, coordinador general de este organismo, destacó que una de las prioridades es contar con al menos una ambulancia para realizar los traslados de estos pacientes a los nosocomios, pues tanto las de servicios públicos como las de la Cruz Roja en ocasiones rechazan realizar esa tarea por temor al contagio, o bien porque "no son emergencias".
En torno a ello, precisó que el primer argumento es refutable, pues además de que las camillas se cubren con materiales especiales, si hay derrame de sangre o de fluidos, tan sólo con el hecho de desinfectar la unidad el eventual contagio se previene. Aunado a esto, refirió que el agente infeccioso en el ambiente sólo sobrevive de cuatro a cinco minutos.