JUEVES Ť 9 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť Legisladores exigen a Fox dar respuesta a demandas de trabajadores del agro

La soberanía alimentaria mexicana es sumamente frágil, advierte Jesús Ortega

Ť Citarán a comparecer ante el Congreso a los secretarios de Agricultura, Economía y Hacienda

ANDREA BECERRIL

La crisis del campo, la dramática situación de los campesinos, "aún más difícil que la sufrida en la época porfiriana", fue el tema central del debate de ayer en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión. Durante la sesión, las fuerzas políticas acordaron citar a comparecer a los secretarios de Agricultura, Economía y Hacienda y formular un llamado al presidente Vicente Fox para que atienda las demandas de los productores agrícolas que han iniciado movilizaciones en todo el país.

Las críticas de PRI y PRD a la política gubernamental que insiste en mantener en el olvido y la pobreza a los campesinos ?"los más pobres de entre los pobres de México que viven en el campo", advirtió el perredista Jesús Ortega? no encontraron eco en el PAN, y el diputado blanquiazul Manuel Minjares sostuvo que las marchas campesinas que ayer se realizaron en el Distrito Federal tienen tintes políticos.

La polémica se trabó desde el momento en que cada fracción parlamentaria fijó su postura en torno al 122 aniversario del nacimiento de Emiliano Zapata y el PAN, a través de Fauzi Hamdan, aprovechó la ocasión para sostener que "la marginación del campesino es producto de la pobreza y el atraso y no una cuestión de origen ancestral, como aseguran ahora los nuevos zapatistas" y para salir en defensa de la propiedad privada.

Con un discurso de aparente exaltación de la figura del Caudillo del Sur, Hamdan repitió los argumentos de quienes se opusieron a la iniciativa de la Cocopa. "La exigencia de la población indígena en lo que se refiere a la tenencia de la tierra no puede interpretarse como una nueva demarcación de los límites de la propiedad comunal, porque ello llevaría a absurdos graves en los que se afectaría a miles de familias que actualmente trabajan y viven honestamente gracias a su tierra."

No conforme con ello, Hamdam uno de los artífices del Fobaproa y abogado de dueños de casas de bolsa y banqueros, sostuvo que deben hacerse serias reflexiones sobre el ideario zapatista, abandonar la actitud paternalista hacia el campo y aceptar que los problemas sociales no deben ser responsabilidad exclusiva del Estado.

El senador Jesús Ortega le respondió al instante: "Hay que recordar a Zapata, pero sin que nadie tenga el propósito de apropiarse de su memoria y menos con razones de carácter político coyuntural".

Tampoco, agregó, ningún legislador debería aprovechar "el recordar a nuestros héroes para lavar conciencias y de esa manera exculpar responsabilidades", remarcó, y expuso luego la situación en el campo. Hizo notar que la crisis en el agro no tiene parangón, pues ni siquiera durante la época de Porfirio Díaz fue tan crítica y difícil.

"La producción en el campo se ha desplomado. Nunca como hoy el país importa tantos alimentos y nunca como hoy, a 122 años del nacimiento de Emiliano Zapata, el país es más frágil en su soberanía alimentaria."

El perredista resaltó asimismo que 50 mil campesinos bloquean oficinas gubernamentales en el Distrito Federal y en todas las delegaciones de la Secretaría de Agricultura en el país llevan a cabo movilizaciones para exigir, como lo hizo décadas antes Zapata, que se corrija la terrible situación de crisis y miseria en el campo.

Más que discursos en memoria del creador del Plan de Ayala, dijo, lo que se requiere son acciones, sobre todo la del Congreso para obligar al Ejecutivo a cambiar la política para el campo.

El diputado del PRI Samuel Aguilar Solís participó de lleno en el debate, al plantear un punto de acuerdo para exhortar al presidente Fox a atender las demandas de los productores rurales que han iniciado movilizaciones y plantones en esta capital y en los estados de la República.

De extracción campesina, Aguilar Solís insistió en la necesidad de que los legisladores atiendan, con toda solidaridad, las demandas de los miles de trabajadores del campo movilizados. Dejó en claro la gravedad del problema, que se profundizará aún más dentro de dos años cuando el Tratado de Libre Comercio (TLC) libere de aranceles a la totalidad del sector agropecuario.

Explicó que las consecuencias de ese tratado han sido ya desastrosas para el campo y los campesinos no sólo enfrentan el problema de los cupos, sino también del contrabando de granos, que genera una competencia desleal y debe penalizarse.

Aguilar Solís apeló a la conciencia de los legisladores, les dijo que el Congreso está obligado a involucrarse en la resolución de la problemática del agro y pidió, por tanto, que se aprobara, "de urgente y obvia resolución", es decir, con un punto de acuerdo para exhortar a Fox a que, en base en las resoluciones de la Convención del Sur, atienda las demandas de los campesinos y disponga lo necesario para que la Secretaría de Gobernación participe en la instalación de las ocho mesas de diálogo y negociación que pretenden instalar los manifestantes.

El punto de acuerdo se aprobó y hubo después otro, presentado por el también priísta Augusto Gómez Villanueva, para citar a comparecer a los secretarios de Agricultura, Economía y Hacienda, Javier Usabiaga, Luis Ernesto Derbez y Francisco Gil Díaz, a fin de que informen a la Comisión Permanente sobre los mecanismos que hasta ahora han utilizado para atender las demandas de los productores de maíz.