Tres días de luto para Amado
Rio de Janeiro, 6 de agosto. En una de sus últimas entrevistas, Jorge Amado recordó cuando uno de sus críticos lo acusó de ser "el escritor de las prostitutas". Su respuesta fue sencilla: "para mí eso es un elogio".
A raíz de los problemas de salud que enfrentó en los últimos años y a punto de festejar el 70 aniversario de la publicación de su primer libro, dejó sin terminar el proyecto de Boris El Rojo, una novela urbana acerca de un joven que vivió las turbulencias culturales y políticas en Bahía durante los setenta.
En distintas ocasiones fue candidato al Premio Nobel de Literatura, antes inclusive de que le fuera conferido a José Saramago, quien en 1998 se convirtió en el primer escritor en lengua portuguesa en recibirlo.
En su momento, Amado saludó la decisión de la academia y dijo que no se sentía frustrado por no sumar el Nobel a su larga lista de galardones; entre ellos el premio Nonino, la Legión de Honor del gobierno francés y el doctorado honoris causa de la Sorbona de París.
Pese a que se sabía de su frágil salud en los últimos meses, la muerte de Amado tomó hoy por sorpresa a los brasileños y causó conmoción nacional.
Caetano Veloso, al enterarse del fallecimiento, entonó la composición Tieta, mientras la cadena de televisión O'Globo anunció la trasmisión del filme Grabriela.
En una nota oficial, el presidente Fernando Henrique Cardoso lamentó la desaparición del autor de Mar muerto: "Brasil perdió a uno de sus mayores creadores". Dijo el político que el escritor dejó la lección "de un combatiente, de alguien que siempre estuvo a favor de la justicia, al lado de los oprimidos". Fue un creador "que tuvo el coraje de pintar Brasil con sus colores reales para, a partir de ellos, crear su utopía".
El gobernador de Bahía, César Borges, decretó hoy luto oficial de tres días en ese estado y cedió las dependencias del Palacio de Aclimatación ?antigua residencia oficial del gobierno local? para montar el escenario del último adiós de los bahianos "al escritor del pueblo". DPA