MARTES Ť 7 Ť AGOSTO Ť 2001

Ť Bajos precios en el mercado internacional, la causa

Cierra banco nicaragüense por crisis en la producción de café

AFP

Managua, 6 de agosto. La aguda crisis que enfrenta la producción cafetalera precipitó la iliquidez que llevó a la intervención y cierre del Banco Nicaragüense (Banic) el pasado fin de semana, la segunda clausura de una institución bancaria ocurrida este año en Nicaragua, según fuentes oficiales.

De la cartera crediticia del Banic, estimada en 85 millones de dólares, una tercera parte está relacionada con la producción del café, el principal rubro de exportación del país, que ha venido a menos por los bajos precios del grano en el mercado internacional, dijo el presidente de la Superintendencia de Bancos, Noel Sacasa.

Tras efectuar un estudio sobre la cartera crediticia del Banic, se encontró que ésta "podría tener problemas adicionales en el futuro si el precio del café continúa bajando y se deteriora aún más", lo que en parte habría precipitado a las autoridades financieras a intervenir el banco, explicó Sacasa durante una presentación en televisión.

La incapacidad de recuperación de la deuda cafetalera, sumada a la crisis de credibilidad en el sistema financiero que se generó tras el cierre del Banco Intercontinental y Banco del Café, en julio y octubre del 2000, afectó dramáticamente al Banic, explicó Sacasa.

"Estamos hablando que desde octubre a la fecha el Banic perdió cerca de 800 millones de córdobas (59 millones de dólares); si no hubiera sido por eso (la entidad) estuviera en una situación más líquida", argumentó Sacasa.

El Banic, que contaba con una participación accionaria del Estado de 32 por ciento, era uno de los bancos que tenía "la disponibilidad de depósitos más altos del sistema financiero nacional", explicó Sacasa.

A la intervención del Banic le antecedió el cierre del Banco Mercantil, en abril de este año, con lo que suman ocho las entidades bancarias entre privadas y estatales que desaparecieron en Nicaragua durante los últimos cinco años.

El gerente del Banco de la Producción, Arturo Arana, que adquirió el domingo en subasta pública los activos y pasivos del Banic, manifestó que analizarán la cartera crediticia, y aquella que no reúna los requisitos de garantía será regresada al Banco Central de Nicaragua, que está soportando la operación de compra.

"El crédito al café va a ser un caso difícil de asumir. Primero se va a analizar la cartera pendiente para ver cómo podemos ayudar, pero todo depende de que haya fondos disponibles. Ellos (el gobierno) dicen que tienen 130 millones de córdobas (10 millones de dólares), vamos a probar qué tan cierto es", expuso Arana.

El Banic, que era el último vestigio de la banca estatal nicaragüense (tras la privatización de 68 por ciento de acciones), había asumido la cartera de créditos agrícolas del también desaparecido Banco Nacional de Desarrollo, tras su cierre en 1999, en el contexto de un proceso de saneamiento de la banca local a instancias de organismos financieros internacionales.