DOMINGO Ť 5 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť A fin de año presentará el déficit de la balanza comercial más alto de la historia
Junto con el agro, la industria petroquímica es uno de los peores fracasos de la última década
Ť Según directivo de Canacintra, la producción ha caído más de 50 por ciento desde 1996
HUMBERTO ORTIZ MORENO
La industria petroquímica representa, junto con el campo, uno de los peores fracasos de los últimos 10 años para México y la proyección al concluir este año apunta a que el sector registre el déficit de la balanza comercial más alto de la historia: arriba de 10 mil millones de dólares.
Aunque desde mayo pasado la Secretaría de Energía reiteró a los empresarios del ramo que Pemex-Petroquímica se asociaría con particulares para resolver el problema, la decisión está atorada y en octubre próximo serán ya nueve años de que el gobierno anunció por primera vez que este segmento productivo sería privatizado.
Gilberto Ortiz Muñiz, presidente del Comité Directivo de Energéticos de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), dijo que la producción se ha derrumbado más de 50 por ciento desde 1996 y sigue en declive.
En ese año había 7 mil 500 empresas de todos tamaños, pero al 2000 apenas llegaban a las 2 mil 800. De 12 mil trabajadores que ocupaba, ahora solamente tiene alrededor de 4 mil 200.
Responsables
En entrevista, Ortiz responsabiliza de esta situación no solamente a pasadas administraciones que cometieron errores imperdonables, sino al actual secretario de Energía, Ernesto Martens, y a Raúl Muñoz Leos, director de Pemex, por su incapacidad para deshacer el nudo en la petroquímica y no restaurar la confianza perdida en anteriores sexenios.
"No hay información clara y la industria sigue deteriorándose. A este ritmo acabará por desaparecer en tres o cuatro años, a lo mucho", sentenció el alto directivo de la Canacintra.
El déficit en la balanza comercial sigue siendo, por el momento, el mayor "dolor de cabeza" para el sector, dice Ortiz Muñiz. Aún así, no hay comunicación alguna con los funcionarios de la Sener y Pemex para saber qué están planeando hacer con la petroquímica.
"Nos dijeron que ya estaba resuelto todo desde mayo, pero ya estamos en agosto y la petroquímica continúa cayéndose. No hay noticias. Muñoz Leos se la pasa hablando de exploración y explotación, algo sobre refinación, sobre el gas, pero a la petroquímica no la toma en cuenta", se quejó el empresario.
Y es que la crisis en este rubro ha provocado la desintegración de cadenas productivas y una creciente dependencia de las importaciones. En consecuencia, añadió Ortiz, en muchas operaciones de exportación ya ni siquiera se cumplen los parámetros de integración para obtener preferencias, no hay competitividad y los costos son cada día mayores.
En cambio, apuntó, si Pemex estuviera trabajando en México coordinadamente con la iniciativa privada, habría una sinergia y ventajas incomparables de negocios.
Arrastra con el campo
El presidente del Comité Directivo de Energéticos de la Canacintra juzgó que la recuperación y rehabilitación de Pemex-Petroquímica es un paso indispensable para apoyar los esfuerzos de la industria química nacional y el desarrollo del campo mexicano.
Explica por qué: la petroquímica es uno de los sostenes más importantes para la producción agrícola, con productos tales como el amoniaco y la urea, cuya fabricación no ha logrado recuperarse desde que inició el proceso de desinversión en el sector.
Así, por un lado los insumos han subido de precio y, por el otro, simplemente no hay disponibilidad, pues la generación de Pemex-Petroquímica se ha derrumbado en más del 50 por ciento de 1996 a la fecha. De 16 millones de toneladas de productos del ramo, al año pasado solamente hubo 8 millones de toneladas.
Pero además, remarcó Ortiz, fueron rotas cadenas productivas muy importantes porque representan un porcentaje muy alto de la producción nacional.
A juicio del directivo empresarial, más que por carencia de tecnología o falta de inversión, esta situación es producto de errores de administración muy graves. "Es problema eminentemente de pésimas decisiones administrativas y falta de visión de los administradores", subrayó.
Otro error administrativo "tremendo" que no ha resuelto Pemex ni la Sener, acotó, es el de la fallida apertura de la petroquímica, porque si bien ya es posible invertir en ella, definitivamente nadie lo hace en virtud de una mala política sexenal que sembró la desconfianza alrededor del sector y nada han hecho las actuales autoridades para recuperarla.
La bursatilización, salida ideal
Ortiz Muñiz observó que en ocho meses de gestión foxista no parece haber salida para la petroquímica, cuando la Canacintra siempre ha peleado, "y nadie le ha respondido", por la bursatilización de las plantas de Pemex, pues esta fórmula permitiría recuperar rápidamente la inversión, capitalizar a la paraestatal y regresarle a esta rama su antiguo esplendor.
Una medida así, opinó, permite que la bolsa de valores se fortalezca porque tendría un fuerte emisor y participación de varios interesados, sino que esto propicie problemas de concentración o de control de mercados por parte de los grandes consorcios internacionales.
Diversas voces e incluso funcionarios gubernamentales han estimado que Pemex-Petroquímica requiere de alrededor de 10 mil millones de dólares de inversiones durante el actual sexenio, pero a corto plazo necesita 2 mil millones de dólares.
Entonces, Ortiz dice que si fuera colocado el 49 por ciento de acciones de las plantas de Pemex, autorizado por el Congreso, inmediatamente se obtendrían esos 2 mil millones de dólares y además habría resultados inmediatos por la recuperación de una producción netamente competitiva y con un mercado cautivo.
Sin embargo, lamentó el directivo de Canacintra, "hoy todo sigue pendiente, nada se instrumenta, no hay información pública clara de las autoridades y lo único claro es que cada vez la balanza comercial sigue deteriorándose más".
Y mientras, los precios a nivel internacional están en picada y países como Singapur, China, Japón y los Estados Unidos "nos traen fritos y sus industriales quieren colocar sus productos en nuestro mercado".
Eso sí, ellos ofrecen cotizaciones atractivas y gozan de financiamientos accesibles, como en Japón, donde los contratos crediticios se obtienen a tasas del uno por ciento anual y con plazos de pago de 6 a 9 meses. "Nosotros no tenemos ni la fuerza financiera ni el apoyo de las instituciones nacionales para lograr eso".
Gilberto Ortiz y su gremio quieren creer que en realidad este es un "atorón", pero advierten que de prolongarse más será un verdadero retroceso. "En la petroquímica tenemos 10 mil millones de dólares de riqueza y nos andamos peleando por centavos. No hay que dejar que ese patrimonio se nos vaya de las manos", remachó.