Ť Los panistas, únicos que se mostraban optimistas
Dudaban gobernadores alcanzar algún acuerdo con el Presidente
Ť Recorte presupuestal, tema que imperó antes del cónclave
MARTIN DIEGO Y ROBERTO GARDUÑO CORRESPONSAL Y ENVIADO
Leon, Gto., 4 de agosto. La pasarela de los hombres que gobiernan los estados y de los secretarios de Estado más poderosos, por los pasillos del hotel más grande de León, configuró un escenario poco propicio para los consensos. Envalentonados unos, evasivos otros, adelantaron que en dos horas de reunión con el presidente Vicente Fox no sería posible llegar a un acuerdo en materia hacendaria y que para dar viabilidad al proyecto nacional se requiere de la suma de todas las posiciones.
Mayor despliegue de guardias presidenciales en la ciudad no se había visto. Los elementos del Estado Mayor Presidencial acordonaron y cerraron los accesos al hotel Fiesta Americana para resguardar la integridad de 30 gobernadores y del primer mandatario, que al mediodía habrían de reunirse para discutir los fundamentos de la reforma hacendaria.
En todos, menos en los gobernantes panistas, se escuchó un tono de desconfianza de lo que habría de resultar en aquel cónclave. Antes de iniciarlo, el tema fue el recorte presupuestal que en la víspera había anunciado la Secretaría de Hacienda.
Ricardo Monreal, gobernador de Zacatecas, inició la ronda de acusaciones contra el gobierno foxista: "estamos en un proceso de muerte por inanición", dijo.
Y al cuestionarle por qué, espetó: "hay incapacidad económica, incapacidad de manejo, hay incapacidad política. Mientras no lleguemos a un gran pacto social, no podremos avanzar... y aquí no se va a resolver todo en dos horas, no va a ser la panacea. Quienes piensen que aquí vamos a resolver todo y que saldremos con acuerdos están equivocados".
-Fox insiste en que sí funciona la política -se le planteó.
-Es él, ¿no? Ja, ja, ja -respondió.
De los panistas, Fernando Canales Clariond fue el único que demandó ?en concordancia con la postura de la Anago? federalizar la hacienda.
"Debe incluirse un concepto de federalismo en el sentido de distribuir parte de lo captado, en particular al impuesto al valor agregado (IVA), el 3 por ciento, entre los estados y los municipios.
-¿Esa sería una condición para que aceptaran un incremento en la tasa general del IVA?
-Mire, la decisión no es nuestra ni del Presidente de la República ni de los gobernadores. La decisión es de los diputados federales y de los senadores. Reconocemos su responsabilidad constitucional y apoyamos la decisión que el Congreso tome.
Otro panista, Francisco Ramírez Acuña, fue sincero al declarar que "esta reunión es importante pero no definitiva, porque no está en manos de los gobernadores la definición de la reforma hacendaria, pero es importante el que tengamos el blanco y negro con las visiones de los estados y la Federación para el trabajo legislativo.
El funcionario que causó revuelo fue Santiago Creel, quien a su estilo de responder lacónicamente explicó que los temas de la reunión serían economía, política y desarrollo social.
-¿Ha tenido comentarios de los gobernadores en el sentido de que pudieran estar incómodos con usted?
-Al contrario, todos nos han aceptado la invitación con mucha disposición y con ánimo de poder entablar el diálogo.
Y al secretario de Gobernación le siguió el de Hacienda, Francisco Gil, quien de plano rechazó las preguntas de los reporteros: "No es momento para dar entrevistas, no puedo dar entrevistas a cada rato".
Quien sí llegó sonriente fue Arturo Montiel. Y el gobernador del estado de México negó estar enfrentado con el presidente Fox:
-¿Se van a limar asperezas con el Presidente, señor?
-No tengo ninguna aspereza ni ningún gobernador priísta ?repuso.