Enjuicia ahora el TPI a tres bosnios musulmanes
Ť El coronel Kubura y los generales Hadzihasanovic y Alagic ejecutaron a civiles, acusa
AP, DPA, AFP, PL Y REUTERS
Amsterdam, 3 de agosto. Un día después de haber sentenciado al serbio bosnio Radilsav Krstic por genocidio, el Tribunal Penal Internacional (TPI) de La Haya dio a conocer hoy las acusaciones contra tres bosnios musulmanes por crímenes de guerra contra serbios y croatas.
El coronel Amir Kubura y los dos generales islámicos Enver Hadzihasanovic y Mehmed Alagic fueron señalados de haber ejecutado a civiles y prisioneros de guerra, de utilizar rehenes como escudos humanos durante los enfrentamientos y de perpetrar saqueos y destrozos en ciudades y pueblos durante 1993.
Los sospechosos fueron detenidos por la policía bosnia este jueves, y Jim Landale, portavoz del TPI, señaló que hasta el mo-mento no se ha decidido si serán trasladados al centro de detención de Scheveningen, donde se encuentra detenido el ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic.
Tras la detención de los tres oficiales, se multiplicaron las presiones sobre las autoridades de la República Sprska para que procedan a la detención en su territorio de los sospechosos de crímenes de guerra, principalmente de Radovan Karadzic, líder político de los serbios durante la guerra, y de Ratko Mladic, ex jefe militar de los serbios de Bosnia-Herzegovina.
Oleg Milisic, portavoz de la oficina del alto representante de la comunidad internacional en Bosnia, Wolfang Petritsch, se de-claró satisfecho con este triple arresto.
"Es el tipo de comportamiento el que nos gustaría que llevase a cabo la República Srpska", declaró.
A su modo de ver, la República Srpska "está lejos de este tipo de colaboración, es-pecialmente en lo que respecta a Radovan Karadzic y a Ratko Mladic".
Ambos están acusados por el Tribunal Penal Internacional de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra.
El TPI de La Haya los persigue por su participación en la masacre del enclave de Srebrenica en julio de 1995, donde más de 7 mil musulmanes murieron a manos de fuerzas armadas serbias.
Mientras tanto, se reanudaron este viernes en la ciudad de Ohrid, en Macedonia, las negociaciones para la búsqueda de un acuerdo que ponga fin a la crisis creada por el Ejército de Liberación Nacional de los albaneses étnicos.
En este diálogo participan el gobierno de Macedonia y cuatro partidos políticos (dos macedonios y dos albaneses), así como los enviados especiales de Estados Unidos y la Unión Europea.
Las negociaciones tuvieron un paréntesis el miércoles debido a la fiesta nacional de Macedonia, tras alcanzarse un acuerdo pa-ra dar a la lengua albanesa un estatus oficial limitado similar a la macedonia.
"Será difícil, no estamos aquí para imponer una solución", dijo el francés Francois Leotard, enviado de la Unión Europea para mediar en las conversaciones junto con el estadunidense James Pardew.