JUEVES Ť 2 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť Mediante presión, transportistas obligaron a permitir paso de vehículos durante una hora
Desabasto de agua para beber y alimentos en El Mezquite
GUADALUPE RIOS CORRESPONSAL
La Ventosa, Oax., 1o. de agosto. Irritación y malestar entre camioneros, turistas nacionales y extranjeros, así como riesgo de desabasto de combustible, agua y alimentos en poblaciones del sureste mexicano provocan los bloqueos de las carreteras Transístmica y Panamericana que se registraron en el Istmo de Tehuantepec durante tres días.
Durante el lunes y el martes, campesinos de Alvaro Obregón bloquearon 28 horas la carretera Transístmica en su paso por Juchitán, y el mismo martes, los comuneros chimalapas iniciaron el cierre de la misma vía a la altura de El Mezquite, unos 40 kilómetros al sur de Matías Romero.
En El Mezquite se acabó la dotación de harina de maíz y la población resiente la falta de tortillas y agua para beber. Ante la falta de alimentos, los habitantes han empezado a matar aves y animales de corral para subsistir, pues a ellos han recurrido los choferes y personas varadas.
Desesperados por la situación, un centenar de traileros varados a lo largo de aproximadamente 40 kilómetros en ambos sentidos de la carpeta asfáltica (desde el entronque de El Mezquite hasta la desviación a la población cementera de Lagunas), con presión obligaron a los chimalapas a levantar por una hora el bloqueo carretero.
En tanto, en La Ventosa, unos 18 conductores de pipas cargadas con gasolina y turbosina para el aeropuerto de Cancún, advirtieron que existe el riesgo de desabasto del combustible, y eso "puede retrasar los vuelos".
Los piperos que van con diesel y gasolina a Guatemala y Chiapas también se muestran preocupados, y este miércoles se sumaron a la demanda de que los gobiernos del estado y federal "hagan algo para poner fin a los bloqueos".
La turista española Mayté González, que retornaba a Cancún tras una semana de permanecer de visita en Oaxaca junto con dos personas más, explicó que solicitaron la intervención de la embajada de España en México para que les apoyen a salir de esta región -donde permanecen varados desde hace tres días- y así puedan retornar a su país.
"Ya queremos irnos, no tenemos dinero ni ropa, y tenemos hambre, además de que hay gente enferma... llaman al turismo y no hay garantías para nadie... mire cómo estamos..." dice Isolina Vázquez, quien viaja en un autobús turístico junto con 40 yucatecos procedentes de Mérida.
ƑCómo es posible que un grupo de indígenas tenga más autoridad y poder que el gobierno?, se pregunta una anciana yucateca, acostumbrada a que en su entidad, todo intento de cierre o bloqueo es levantado "con mano dura" por las autoridades.
El presidente del comisariado de bienes comunales de Santa María Chimalapa, Taurino López López, rodeado por cientos de comuneros de Santa María y San Miguel que apoyan su lucha, armados con palos convertidos en lanzas, machetes y piedras, reiteró el ofrecimiento de que hay garantías para quienes acudan a dialogar, porque "no vamos a detener a nadie más, nos genera muchos gastos su alimentación".
El dirigente comunal de los zoques indicó que el secretario de Gobierno de Oaxaca, Héctor Anuar Mafud, mostró disposición para solucionar el conflicto y convocar a las autoridades agrarias federales para que participen en la búsqueda del problema de tierras con la colonia agrícola y ganadera Cuauhtémoc.
Los mismos que primero pidieron al gobierno que "subiera" a la comunidad a negociar y se negaban a "bajar a El Mezquite", como propuso el gobierno, presionados aceptan:
"Si quieren, podemos reunirnos en Juchitán. Lo que la comunidad quiere es la solución del problema, y lamentamos que se afecte a tanta gente, pero si no tomamos estas medidas el gobierno no actúa... le ha faltado capacidad, inteligencia, voluntad y decisión para resolver este conflicto", dijo.
Los chimalapas confiaron en que esta noche comiencen las negociaciones con autoridades estatales y federales, con la participación de la coordinadora de la oficina de asuntos indígenas de la Presidencia de la República, Xóchitl Gálvez.