JUEVES Ť 2 Ť AGOSTO Ť 2001
Ť La Permanente exige a Fox respuesta inmediata
Bloquea el Senado de EU a transportistas mexicanos
Ť La decisión legislativa será vetada por Bush: Derbe
Ť Piden diputados que se respeten condiciones del TLCAN
Washington D.C., 1Ɔ de agosto. El Senado de Estados Unidos aprobó hoy una controvertida enmienda que bloquea la libre circulación de los camiones mexicanos en las carreteras del país, asestando un serio revés al presidente George W. Bush en su intento de estrechar las relaciones con su vecino y único socio comercial latinoamericano.
La polémica enmienda, aprobada por una coalición de senadores demócratas y republicanos en voto oral, está incluida en la ley de presupuesto de transporte y ya había sido aprobada en junio pasado por la Cámara de Representantes.
Sin embargo, el presidente Bush ha amenazado con vetar el proyecto de ley si esta enmienda no es retirada durante las negociaciones que tendrán lugar en septiembre, cuando se realice una conferencia parlamentaria entre las dos cámaras.
Bush deseaba que el Senado rechazara la enmienda antes de recibir a su homólogo mexicano Vicente Fox en Washington el 1Ɔ de septiembre y previo a la visita del canciller Jorge Castañeda a su colega estadunidense Colin Powell, prevista para el 9 de agosto. Un eventual veto del jefe de Estado volvería a enviar la ley automáticamente al Congreso, pero quizás el presidente no logre reunir los dos tercios de los votos del pleno que necesita para sostener el veto.
El proyecto de ley fue aprobado a mano levantada luego de que el senador republicano John Mac Cain, uno de sus más férreos opositores, junto con Phil Gramm, también republicano, prometió que volverá a dar la lucha el mes próximo, tras el receso parlamentario del verano boreal. "Pensamos seguir luchando en septiembre", aseguró Mc Cain.
Los senadores que presentaron la enmienda al proyecto de ley sobre transporte, el demócrata Patty Murray y el republicano Richard Shelby, se centran en cuestiones de seguridad. Buscan imponer normas tan estrictas y engorrosas a los camiones mexicanos para obligarlos a respetar las normas de seguridad vigentes en Estados Unidos que, según la Casa Blanca, se convierten en una barrera de facto.
La Casa Blanca acusó ayer a estos legisladores de "aislacionistas" y "unilateralistas", en su gran mayoría demócratas presionados por el poderoso sindicato de camioneros (teamsters).
"Puede haber camiones que llegan desde la frontera (con México) sin frenos, sin seguro, con conductores inexpertos, trasladando desechos peligrosos. No se puede cuantificar el número de catástrofes que podrían suceder", dijo esta semana al diario The New York Times James P. Hoffa, presidente de los teamsters.
El responsable de Comercio exterior estadunidense, Robert Zoellick, señaló ayer que los esfuerzos de los congresistas por bloquear el acceso de los camiones mexicanos a las carreteras de Estados Unidos constituyen una violación del espíritu del TLCAN.
El TLCAN, firmado en 1994 entre Estados Unidos, Canadá y México, prevé un acceso general de los camiones de cada uno de los tres países al territorio de los otros dos socios desde enero de 2000, pero hasta ahora los mexicanos han sido limitados a una franja fronteriza de 33 kilómetros.
Una comisión de arbitraje pedida por México dio plazo a Washington hasta el 1Ɔ de enero del 2002 para ponerse en conformidad con la disposición.
El ministro de Economía de México, Luis Ernesto Derbez, declinó indicar si México tomará o no represalias en el caso de que el acceso de los camiones mexicanos a las carreteras estadunidenses siga bloqueado en esa fecha.
Exhorto a Fox
La Comisión Permanente del Congreso exhortó al presidente Vicente Fox a que continúe las gestiones ante Estados Unidos para resolver el caso del autotransporte de carga y pasajeros o, en su caso, impida inmediatamente el ingreso de los transportistas estadunidenses. Además, que demande la indemnización y mecanismos compensatorios que establece el tratado comercial.
Signado por las fracciones parlamentarias, la decisión del Congreso fue fundamentada por el diputado panista Alonso Ulloa, quien hizo un recuento de las violaciones al tratado trilateral comercial por la parte estadunidense. A la fecha hay 184 solicitudes de operación que ni siquiera han sido procesadas, apuntó.
En la sesión semanal de la Permanente, los legisladores decidieron hacer un exhorto a la Secretaría de Economía para que continúe con las gestiones tendientes a lograr que los transportistas mexicanos sean tratados de manera ''equitativa, leal y digna''.
El priísta Ernesto Gil Elorduy puso de relieve la presión de los fuertes intereses particulares de Estados Unidos que se sienten amenazados y contribuyeron al incumplimiento del tratado, y luego de la determinación favorable para México del panel de controversias.
Al respecto, dio cuenta de la solicitud de la cámara del autotransporte mexicana para que el Senado revise y analice el tratado y proceda al cierre definitivo del capítulo en materia de transporte de carga.
Estados Unidos, acusó, pretende hacer del tratado comercial una ley del embudo ''ancha para ellos y angosta para sus socios y amigos''.
La ecologista Sara Castellanos sostuvo que no se puede reprochar que el Senado estadunidense proteja a sus industriales, puertos y monopolios sindicales, sino a la ingenuidad mexicana que no protege nada.
México no dará marcha atrás
La decisión del Senado de Estados Unidos de impedir la entrada de transportes mexicanos será vetada por el presidente Bush, afirmó anoche el secretario de Economía, Luis Ernesto Derbez. Funcionarios de la Casa Blanca y senadores, ''con los que he platicado, están convencidos de que no habría una derrota del veto''.
El funcionario afirmó que el gobierno de México no dará marcha atrás en lo acordado en el TLC para evitar no sólo que la industria del transporte pudiera ser perjudicada, sino que otras actividades económicas que han logrado beneficios muy claros con la apertura del TLC pudieran sufrir en el futuro el problema del proteccionismo.
Al reunirse con los integrantes de la Comisión de Comercio de la Cámara de Diputados, manifestó que en las conversaciones que sostuvo con miembros de la administración y del Senado de Estados Unidos ha encontrado claridad.
Dijo que ''la administración del presidente Bush tiene una decisión clara de cumplir a cabalidad con los principios firmados en el TLC''. En el tema del transporte, la posición que el gobierno mexicano ha manifestado y que la administración del presidente Bush apoya, es que el TLC indica con claridad que los vehículos mexicanos deberían tener ya el ingreso a territorio del vecino país.
Precisó que mientras la administración Bush dé muestras y acciones claras en dirección del cumplimiento del tratado, ''seremos pacientes, porque efectivamente estamos hablando de algo en lo cual hay una diferencia entre el Congreso y el Ejecutivo de Estados Unidos''.
A la pregunta del diputado del PAN, Jesús Mario Garza, sobre cuáles son las alternativas del gobierno de México para presionar a los legisladores y transportistas de Estados Unidos, Derbez respondió que: ''Le voy a decir exactamente lo que conversé en los últimos días con funcionarios de la Casa Blanca y del Senado de Estados Unidos, y en ambos casos la respuesta fue categórica: el presidente Bush ya lo manifestó en público y es sencillamente que está dispuesto a vetar la legislación y que dadas las condiciones en que se establecería este veto, ellos están convencidos de que no habría una derrota''.
Sin embargo, el diputado Tarcisio Navarrete, del PAN, sostuvo que el gobierno mexicano no debe descartar la posibilidad de cerrar su frontera para impedir el paso de los transportistas norteamericanos a territorio nacional.
A su llegada, Miroslava García Suárez, coordinadora de Política Económica del Grupo Parlamentario del PRD, propuso a Derbez la ejecución de un plan emergente para reactivar la economía y señaló que a la fecha hay un subejercicio en el gasto público de 19 mil millones de pesos a las secretarías de Agricultura, Energía, Comunicaciones, Desarrollo Social, Economía y Medio Ambiente.
Por otra parte, Derbez informó que de los 200 millones de pesos para los micro créditos, se han otorgado hasta el momento, 73 millones de pesos a 14 mil personas, e indicó que la lentitud del programa se debió en parte a la expedición de un reglamento. AFP, KARINA AVILES Y RENATO DAVALOS